OBSERVE AND REPORT, cuenta la historia de un Segurata, que cómo casi todos los seguratas, es un flipado de su trabajo. El se cree que es un mega policía y se toma su trabajo en el centro comercial muy en serio.
Un día, un exhibicionista llega al centro comercial, a enseñar sus partes a todo aquél que se le pone a tiro, pero el segurata no estaba allí para impedírselo, así que a partir de ahora, la misión de este segurata será capturarle. Y para ello, decide ingresar en la policía, pero no puede, debido a un trastorno bipolar que sufre, y que solo puede controlar a base de pastillas, lo que le frustra aún más.
La película está muy bien, muy entretenida, muy visible, aunque se sirve del tópico del Segurata, que es segurata, porque por algún motivo, no pudo ingresar en la policía. Y es que bien pensado, si no se sirviera de ese tópico, no habría película.
Aunque el argumento penduléa, y la historia no es del todo atractiva, la película se sostiene como una polla tiesa, gracias a un reparto cojonudo, que junto con un montón de gags bien puestos y bien ejecutados por los actores, hacen que lo tontorrón del asunto pase a ser lo que los corbatillas llaman “Alta comedia”, y es que están todos muy bien; Seth Rogen, cojonudo, un torrente de energía, da gusto verlo. Claro que este tipo ha empezado relativamente hace poco, en seguida a tocado la cima y está que ni el se lo cree, de ahí ese entusiasmo. Veremos, que tal dentro de uno años. Luego está Ray Liotta, que ya andaba más perdido que otra cosa, y que aquí haciendo de poli cabrón al que el personaje de Rogen da la brasa constantemente, se desenvuelve como lo que nunca ha dejado de ser: Un gran actor. Y luego tenemos a Anna Faris, haciendo de Anna Faris, pero que es justo lo que queremos ver por dos motivos: Es una de las pocas actrices graciosas que existen y nos pone muy, pero que muy cachondos. Tiene una boca que parece concebida para chupar pollas.
En cuanto a gags, quiero destacar dos escenas, en las que me dolía la tripa de tanto reirme: toda la escena en la que el compañero segurata de Rogen, le muestra “los secretos para disfrutar de su trabajo” que básicamente, es dejarse llevar por los efectos de todas las drogas conocidas, y toda la escena final del exhibicionista, que no comentaré para no destripar el final.
En resumidas cuentas, una comedia muy divertida, muy recomendable que está situando a Seth Rogen a la altura de sus ídolos e influencias a quienes imita. Pero es que además, Rogen, tiene un “nosequé” que Stillers y demás no tienen, y que le va a hacer subir cada vez más y más…
El dire, (que por cierto, ha hecho un trabajo excelente en esta película) es un novato llamado Jody Hill.
lunes, 14 de septiembre de 2009
OBSERVE AND REPORT
Cuando me pongo a ver una película, solo por el actor que aparece en ella, eso significa, que inexorablemente, me he convertido en fan de ese actor, así que Seth Rogen puede estar contento, puesto que gracias a un puñado de películas graciosas en este último año, ya me tiene de culo, esperando a ver todo lo que haga.
Victor Olid