Adaptación a la gran pantalla de un videojuego de Nintendo
DS, sobre juicios e investigación. Dirige Takashi Miike y protagoniza la
historia una panda de actores de la TV japonesa. Películas de videojuegos se
han hecho muchas, que estén bien hechas pocas, y que se parezca al videojuego
del que maman solo dos, Silent Hill y esta que nos ocupa, las demás son poner
el nombre del juego en el titulo para atraer a los fans. La adaptación es 100% fiel
al juego, incluso hasta la historia es la misma que la del primer juego que
llego a nuestro país (al menos el inicio, el final ya no lo sé que no me lo
llegue a terminar) Así que no os sorprendáis cuando veías a los protagonistas
con un look de lo más extraño, con esos pelos locos y esas vestimentas en plan
de época (esto último solo en el caso de los fiscales) todo es traído a la
pantalla desde el juego, algo que es de agradecer pero que puede echar para
atrás a los profanos.
Phoenix Wright es un joven e inexperto abogado, su jefa ha
sido asesinada, y la principal sospechosa es la hermana de esta. Phoenix se
encargara de su defensa, pero el caso de su jefa estará ligado a un crimen
ocurrido hace quince años que enredara la trama. La acción trascurre en
momentos de investigación, o lo que es lo mismo, nos acercamos a la zona donde ocurrió
el crimen y empezamos a toquetearlo todo, y las escenas de los juicios. En
estos juicios rápidos de cómo máximo 3 sesiones, las pruebas se muestran en
unas pantallas holográficas 3D que los abogados y fiscales pueden manejar,
ampliar o tirárselas a la cara unos a otros. Todo muy high-tech, que rivaliza
con la pompa que se dan los fiscales o la pinta de vejete severo pero justo del
Juez.
La película hace gala en unas pocas ocasiones, del humor japonés
absurdo que Miike gusta de meter en sus filmes, así que no asustarse si de
repente Phoenix hace un comentario en el juicio y todo el público allí presente,
contando acusados, fiscal y Juez, se tiran al suelo de la parida que ha dicho.
Y este gag lo usan tres veces!!! En el juego sí que había unas cuantas cosas
que te hicieran sonreír, pero no recuerdo que llegara a ese extremo de ridículo.
Y aun así la película es entretenida. Los fans encontraran todo lo que había en
el juego, y los que simplemente se acerquen a ver la película sin conocer el
videojuego, podrán pasar dos horas que no se hacen largas. Como película es un
bien, como adaptación es un sobresaliente.