jueves, 24 de julio de 2014

VIERNES 13, 5ª PARTE: UN NUEVO COMIENZO

Honestamente no creo que la quinta entrega de la famosa saga horrorífica sea la mejor de todas, pero sí le tengo un cariño especial, seguramente porque se trata de la "oveja negra" de la franquicia. Un producto que es pura contradicción, tan honesta por un lado, como deshonesta por otro. Veamos por lo cualo...
Tommy Jarvis, el niño que mató a Jason Voorhees en el cuarto viernes trece, ha quedado lógicamente tocado, y tras un farragoso periplo por psiquiátricos de media Norteamérica, es ingresado en uno un tanto especial, situado en plena montaña y que aboga por confiar en los pacientes, dándoles libertad total de acción. Una vez allí los inevitables crímenes comienzan a sucederse, justo después de que uno de los chalados se cargue a otro en un ataque de ira. ¿Es Jason Voorhees que ha vuelto de la tumba (a pesar de que, se supone, fue incinerado)?, ¿es otro tipejo con idéntica mala leche?... ¿importa mucho siempre y cuando los personajes vayan cayendo como moscas?, pues no. O sí, que una vez revelado el enigma, hubo quien no se lo tomó demasiado bien. Vale, me parecería raro que, siendo lector de nueso estúpido blog, no hayas visto la película, así que lo diré: En este "Viernes 13" Jason Voorhees limita sus apariciones a pesadillas y alucinaciones, porque el otro es un impostor, un tipo que se toma la -absurda- molestia de disfrazarse del famoso psycho-killer para matar y matar... no se sabe muy bien sobre qué principio. Es decir, sí, el chaval asesinado del psiquiátrico era su hijo pero ¿de verdad ver su cadáver pudo desatar este fervor criminal? y, ya que estamos, ¿de dónde sacó el látex para hacerse la falsa cabeza?, ¿no hubiese sido más cómodo simplemente ponerse la máscara de hockey y ya está?, ¿y por qué imitar a Jason si, total, nunca deja testigos que puedan contar que le han visto?. Sí, tenéis razón, es todo una puta chufla, ridícula y absurda. Pero, cojones, que esto es un "Viernes 13"... ¡¿qué coño importa?!, ¿de verdad alguien cree que hablamos de buenas películas?... no, todos los "Viernes 13" son una mierda, TODOS, solo que algunos son una mierda simpática y entrañable (a mi modesto juicio tal vez la cuarta sea lo más parecido a una buena película, pero imagino que esto va a gustos).
Esa era la parte deshonesta. La parte honesta la tenemos en el hecho de que el produtto da a sus devotos aquello que quieren ver. Sin excusas (vale, menos Jason... aunque entonces tampoco era el icono que es hoy). Quiero decir, en aquellos tiempos la quinta entrega era la que tenía un mayor número de asesinatos, en la que morían más personajes. Y también aquella con LAS MEJORES TETAS de toda la puta saga, todavía no superadas (miento, en el remake habían un par realmente increíbles, pero eran demasiado perfectas... prefiero la espectacularidad totalmente natural del caso que nos ocupa), aunque de ello/a hablo luego.
En este "Nuevo comienzo" no hay absurdas justificaciones, ni todo ese rollo de "humanizar a los personajes" o lo de "hacerlos interesantes", ¡vamos, hombre!, aquí todos son putos monigotes dispuestos para ser asesinados brutalmente... o todo lo brutalmente que la censura permitió, porque esta quinta es uno de los "Viernes 13" -junto a la séptima- donde hubo un mayor número de tijeretazos. Obviaremos la existencia de imágenes de cuchillos hundidos en cuellos y caras que en la peli ni aparecen, e iremos directos al grano: Hay un personaje bastante irritante, una especie de churri "medio punki", "nuevaolera", "newromantic" a la que el pseudo-Jason mata de un cuchillazo en la tripa. Bien, originalmente ese cuchillazo lo recibía en la entrepierna.... pero luego algún listo pensó que era too much y lo cambió. ¡Indignante!.
Todo eso creó una especie de rechazo hacia la película. Y lo que es peor, esputado por parte de los que participaron en ella o en otras entregas de la franquicia. E incluso de algunos espectadores papanatas. Lo mejor que se les ocurría era tildarla de pornográfica, y todo porque entre crimen y crimen lo demás importa una mierda. No solo a nosotros, también a sus responsables más directos. Bien, eso es una gilipollez... quiero decir, citadme UN "Viernes 13" (sobre todo hasta la octava parte) que no tenga estructura de peli porno. ¡¡Todas la tienen!!, pero era muy fácil echar la bilis sobre la número cinco, ¿por qué?, por su director, el detestado -y fallecido- Danny Steinmann que, sí, lo han adivinado, venía del cine para adultos (lo que, claro está, se lo puso muy fácil a los criticones). Luego, cuando intentó meterse en el cine "normal", tampoco se quedó manco rodando un "slasher" en pleno boom del género ("Gemidos en la oscuridad", que firmó con pseudónimo) y la infame/osa "Calles Salvajes". Buen curriculum. Y claro, con un pasado así, y el hecho de que fuese un tirano malhumorado y berreón, pues le ha terminado otorgando la etiqueta del director-villano de la saga. Paparruchas.
Centrándonos en el resto de los implicados, merece una mención Frank Mancuso Jr., joven productor que se haría cargo de la saga durante unas cuantas entregas, hasta el punto de poner su nombre el primero de todos en los títulos de crédito –al menos en este caso-. Vaya jefe.
En el reparto cabe destacar, como anunciábamos, a Debisue/Deborah Voorhees -lo del apellido es una puta casualidad sobre la que ya se han hecho todos los chistes posibles-, la jaca que se despelota en la única escena de sexo compartido y nos deja a todos con los ojos abiertos como platos y supurando. Eso no son tetas, son milagros. Curiosamente, Debisue antes había hecho de prostituta en sendos flims, y después de la reseñada volvería al terror con "El resplandor de la muerte" donde, a pesar de bañarse en una piscina en top-less, no mostraba nada a cámara (¡¡sacrilegio!!). Por los papeles que le tocaban, no me extraña nada que acabara dejando la interpretación. Tras dar tumbos de aquí para allí y escribir algunas cosas, este 2014 reaparece como directora de una comedia "indie" de travelos, "Billy Shakespeare". La veré si sale ella desnuda... claro que ahora igual ya no esté tan apetecible.
La "final girl" de rigor, compite -inútilmente- en el tema erótico luciendo blusa mojada y sierra mecánica, se llama Melanie Kinnaman y no llegó a hacer nada más mínimamente interesante. Tampoco tiene mejor suerte -en cuestiones pectorales- Juliette Cummins, la dulce y encantadora pelirroja que le da crueles calabazas a uno de los chavales. Volvería a deleitarnos con su sonrisa en "Psicosis 3", "Slumber Party Massacre 2" y el tardío “slasher” a mayor gloria de Betsy Russell, "Camp Fear". Tal vez  Rebecca Wood (la camarera que se despelota ante el espejo) tendría algo que decir pechugonamente hablando... pero me temo que el Oscar goes to Debisue.
El otro intérprete que mola es Miguel A. Núñez Jr. encarnando a un primo lejano de Michael Jackson. Ese mismo año -1985-, volvería a enfundarse en cuero para hacer de punko en "El regreso de los muertos vivientes". Y reincidiría con algo parecido en "Los centinelas". También anduvo por "Shadowzone" (producida por Charles Band), el cuarto "Leprechaun" y algunos films "mainstream", entre ellos varios con Eddie Murphy. Vamos, que eran coleguitas. Y ahí sigue, currando.
Tampoco es moco de pavo Bob DeSimone, al que recordaréis -los que hayáis visto la peli- por su papel de ambulanciero salido y farlopero. Resulta que Bob es hermano -gemelo- de Tom DeSimone, el notorio "exploiter" surgido del porno y que puso su estampa en "clásicos" como "El sexo que habla" (sobre un coño al que le encanta paliquear), "La jungla de cemento", "Angel 3" (en todas ellas con papel pal hermanito Bobby) y la más popular, "Noche Infernal/Hell Night". Bob también intervino en "Extraña seducción" de David Schmoeller y "Calles Salvajes", que es donde conoció a Danny Steinmann. No deja de ser curioso que en una de las películas de Tom DeSimone, "Motín en el reformatorio de mujeres", intervenga como actriz Tiffany Helm, la "chica nuevaolerapunki" del acuchillamiento vaginal no procesado antes mentada. ¿Recomendación del hermano, tal vez? (y la cosa no se queda ahí, Helm también actuó en un capítulo de "Las pesadillas de Freddy" dirigido por William Malone -de "Creature", "House on haunted hill" y "Miedo punto com"-, serie en la que así mismo intervino Tom DeSimone como realizador eventual... el mundo del infracine es un fucking cleenex). 
John Shepherd interpreta al Tommy Jarvis adulto (aunque el original, Corey Feldman, se marca un cameo al principio de la peli). Resulta regocijante ver hoy a Feldman y compararlo con el Shepherd de la película. Clavados, vamos. Tanto Shepherd como Shavar Ross (el infante negrito que chilla como una niña) poco después pasarían a ampliar las filas de los llamados "Cristianos renacidos". En concreto, Ross incluso crearía una productora y haría un puñado de películas acordes a sus creencias religiosas. Los dos tienen que vivir con la culpa de haber participado en algo tan sucio e inmoral como un "Viernes 13", aunque Shavar Ross parece llevarlo mucho mejor.
Si viendo la película notáis que el psycho-killer parece adelgazar cuando se enfunda el mono negro y la máscara, tiene sentido, ya que en la mayoría de sus escenas fue el “stuntman” Tom Morga quien le confirió la vida. También ha sido "Leatherface" y "Michael Myers" en sendas secuelas de reconocibles sagas terroríficas, aunque muchas veces sin acreditar.
Podría seguir indagando en el resto del reparto y algo saldría, pero lo más interesante ya está dicho. Nos falta el co-guionista, Martin Kitrosser, que además de escribir el libreto del tercer "Viernes 13", supervisar el de las dos entregas precedentes -y de tantos otros títulos bien conocidos, como las cagadas de Quentin Tarantonto- y ser responsable de la "story" de "Los albóndigas atacan de nuevo", fue director de "Juegos diabólicos", otra quinta parte, en este caso de la famosa saga "Noche de paz, noche de muerte". Cazi ná.
David Cohen, el otro guionista, no ha currado tanto, pero entre sus pocos trabajos está el cuarto "Porky´s". La bomba.
¿Con tantos individuos integrados en el "exploitation", qué esperaba la peña de este "Viernes 13, 5ª parte: Un nuevo comienzo"?... nada bueno... en el mejor sentido. Fue "Un nuevo comienzo", desde luego, pero motivó la confección de una sexta parte mucho más ñoña y buenrollera.... ¡bah!, panda de cagones.
Es mierda, sí, pero de la que chana.