Supuestamente inspirado un caso real , “C.A.U. (Comando
Antiterrorista Unipersonal) nos cuenta como una especia de Súper Agente,
contratado por el gobierno tras los atentados del 11-S, se carga a todo
terrorista que se le pone a tiro, a la vez que se folla a todo aquél u aquella
que se cruce en su camino, incluso, a la vez que ejecuta alguna de sus acciones
–vamos, que puede pilotar un avión a la vez que da por el culo a un tío, y con la mano que le queda libre, le
hace una paja- .Y básicamente, eso es lo que cuenta. La historia se desarrolla
en cuatro capítulos, que casi parecen de estructura clonada, ya que, cambiando
escenarios y personajes, vamos a ver lo mismo en los cuatro: Cómo se carga a
los malos y como se folla a alguien, básicamente.
Hay que tener en cuenta que si, en lo que a tebeos de Marra
se refiere, te desvirgaste con el “Sangre Americana”, lo que te vas a encontrar
en este nuevo álbum es distinto. Es sustancialmente peor que aquellas historias
de Raperos, putas y abogados, pero no por eso es un material poco disfrutable.
Al contrario, “C.A.U. (Comando Antiterrorista Unipersonal) resulta ser un cómic
rematadamente gracioso. El humor negro está siempre presente en cualquier
página de Marra, pero en este caso, desconozco si por homenajear la estructura
narrativa de algún tebeo añejo, o porque el absurdo más absurdo se adueña de
este tebeo, me parece absolutamente genial, y graciosísimo, el hecho de que los
diálogos de las viñetas, escuetos en la mayoría de los casos, se dedican a
poner en boca de los personajes, narraciones de lo que están haciendo o lo que
les está pasando –sobretodo en los pasajes sexuales- así , si en una viñeta
vemos que a un individuo le están cortando la garganta, su correspondiente
bocadillo rezará “Me están cortando la garganta”, mientras que si en una escena
sexual, a nuestro protagonista le están chupando la polla –da igual si un tío o
una tía, que este tebeo no entiende de géneros- nuestro protagonista le hará
saber a su partenaire, mediante bocadillo, que “Me estás chupando la polla”.
Cuando esto sucede, a mí personalmente, me provoca hasta carcajadas.
Sería un álbum que se complementa con “Sangre Américana”,
aunque ligeramente inferior. En cualquier caso, es distinto al otro y eso
siempre es motivo de elogio.
En resumidas cuentas, que está bien, que se disfruta, aunque
por momentos tengamos la sensación de que se nos está tomando el pelo y no
sepamos que es lo que es Benjamín Marra, si un genio con un plan, o un
retrasado mental al que se le está dorando la píldora precisamente porque no se
entera.
En cualquier caso ¡comprenlo!