sábado, 17 de septiembre de 2016

CELL

El año 2007 se estrenó una película basada en un relato de Stephen King que, durante una escueta temporada, dio la impresión que iba a devolver el buen nombre como material adaptable al célebre escritor tras su entrañable etapa dorada por allí finales de los 70 e inicios de los 80. Nada, puro espejismo. Estoy hablando de "1408" que recibió la considerable bendición de la taquilla y parte de la crítica. La verdad es que nunca lo entendí, a mi me pareció un mojón aburrido. Sin embargo, desde entonces el film ha ido arrastrando cierto "buen nombre", tal vez por eso, casi diez años después, a alguien se le ocurrió que sería buena idea, y garantía de éxito, rejuntar de nuevo a los dos protagonistas de aquella, John Cusack y Samuel Jackson, en otra adaptación de King. Hablo de "Cell", producto que no habrá copado las expectativas de sus responsables porque a España ha llegado –que yo sepa- directamente vía televisión.
Hacía años que se iba hablando de la traslación a la pantalla de esta especie de "historia de zombies o infectados según la -afectada- visión del padre de "Carrie"". Se mentó a Eli Roth como director, pero nada. Y para cuando se pusieron de acuerdo, habían dejado pasar el tren de la irritante y cansina moda zombie, cosa que seguramente les ha perjudicado.
"Cell" no se diferencia nada de cualquier otra peli del estilo. Estalla una plaga que convierte a los seres humanos en muertos vivientes, o infectados rabiosos, o lo que sea, y el protagonista decide cruzar medio país para reencontrarse con su ex y su hijo. Por el camino irá topándose con personajes más o menos carismáticos que se unirán a su aventura. Y, eventualmente, tendrá que enfrentarse a los monstruos de rigor.
El aspecto "original" o diferente reside en el origen de estos últimos. Muy acorde a tiempos modernos, la infección viene vía movil. Una especie de ruido ensordecedor convierte en maníacos incontrolables a todos aquellos que estaban con la oreja pegada al aparato. Un poco también rollo "The Crazies", por aquello de que algunos de ellos ríen histéricamente y se ahostian voluntariamente contra la pared hasta perder los dientes. Además están unidos mentalmente en plan línea telefónica. Se comportan como bandadas de pájaros y abren la boca para soltar graznidos, en plan "La invasión de los ultracuerpos".
Bien, debo reconocer que no encontré "Cell" tan mala como me la pintó mi querido hermano. Sí es cierto que a ratos roza el ridículo (sobre todo en el momento que estalla la infección), en otros se torna trillada (hacia la mitad, cuando los supervivientes se encierran en una taberna británica infestada de peña un tanto peculiar) y al terminar ha dejado algunos cabos sueltos, cerrando la paradita de modo más confuso que clarificador. Todo eso es verdad. Pero también lo es que tiene sus buenos momentos (la brutal incineración del campo repleto de pseudo-zombies en estado catatónico escuchando el famoso "trololo"). Total, que entra más o menos bien, a lo que ayudan sus actores, no ya porque lo hagan de puta madre, sino porque ¿¿a quién no le caen bien Cusack, Jackson y el siempre eficaz Stacy Keach??.
Dirige Tod Williams (responsable también de "Paranormal Activity 2"). En la producción encontramos a Xavier Gens, director de "Frontier(s)" y "Hitman". Stephen King se medio responsabiliza del guión cinematográfico junto a Adam Alleca (autor del libreto del remake de "La última casa a la izquierda"). Y el omnipresente (y omnipesado) Lloyd Kaufman se marca un cameo.
Pasable.