viernes, 21 de octubre de 2016

MONSTER BRAWL

Yo creo que si con una película ha habido una opinión unánime en los últimos años, ha sido con “Monster Brawll”, cuya existencia siempre generó interés entre los aficionados, pero que, al verla, todos me advirtieron que se trataba de una absoluta bazofia. Incluso, alguien llegó a calificármela como peor película de la historia.
Sin embargo, precisamente por ese interés previo hice algo que no debería hacer con tanta alegría ya que lo hago bastante: comprarme la película en DVD antes de verla. Y con los ánimos de ver una pedazo de bazofia me puse ese DVD ya que lo había comprado.
Y como esperaba tan poco de la película, me encuentro con que, si, es una pedazo de mierda, pero no tanto como cabía esperar. De hecho he visto montones de películas infinitamente peores.
Se trata de una comedia de horror de corte independiente, casi semi-amateur, la típica película que forma cierto revuelo en según que festivales especializados donde se proyectó, y recibió críticas más o menos como las que en su momento escuché yo.
Y el caso es que partiendo de una idea interesante, un grupo de aficionados a la lucha libre que organiza combates en los que los participantes son, y cito como los llaman en la película, “Los monstruos más famosos del mundo”, que se enfrentarán entre ellos en un ring sito en un cementerio, no es, desde luego, una mala idea. Pero es que la cosa se queda en eso, en una descabellada idea.
La película, rodada como si de un combate televisivo se tratase, nos muestra única y exclusivamente combates de lucha entre los monstruos separados en dos categorías, “No Muertos” y “Engendros”. Entre estos nos encontramos a Frankenstein, El Hombre Zombie, La Zorra Bruja, La Bestia del Pantano, El Hombre Lobo, El Ciclope, La Mujer Vampiro, etc, etc (vamos, la mitad de los monstruos inventados)… entonces, se dan de hostias entre ellos en el ring, ejecutando llaves y golpes propios de la lucha libre. Para hacerlo más llevadero, a cada monstruo le buscan un origen y unos motivos por los que se apuntan al evento de lucha libre. Esto nos lo muestran a modo de ficción para, una vez hemos visto el origen y las motivaciones, dar paso al combate rollo televisivo, con unos comentaristas que nos comentan la jugada entre chascarrillo y chascarrillo.
El problema es que la película se repite más que el ajo. Y si en un principio parece que la estructura parece funcionar, después del primer combate volvemos a ver lo mismo solo que con otros monstruos diferente, y claro, la cosa se vuelve tediosa porque es lo mismo una y otra vez. Amén de los chistes y gracietas, todos más malos que  la leche.
Y si, se vuelve una película bastante aburrida.
Con todo, y a pesar de algún resoplido por mi parte durante el visionado, la vi entera del tirón , e incluso me eché alguna risilla con algún gag tonto –Cuando el arbitro muere en el ring de la forma más tonta- , pero vaya, se me ocurren mil maneras mejores con las que perder el tiempo. Pero no me resultó una película, en definitiva, tan odiosa como todos dicen.
Dirige el tinglado, uno de esos directorcitos de tercera, que al menos pueden vivir dignamente con sus películitas, lo cual es digno de respeto y admiración, llamado Jesee Thomas Cock, que él se lo guisa y él se lo come, y cuenta en su haber con títulos tan sugestivos como “Septic Man” o “The Hexecutioners”.