La peli cuenta como dos borrachos que intentan robar un
espantapájaros. Les pilla el granjero y dispara contra uno de ellos, muriendo,
y en consecuencia pasando su alma al cuerpo del espantapájaros (¡) que querrá
vengarse. Mata un poco, con C.G.I. chungero, y acaba peleando con otro
espantapájaros más jodido, mientras el granjero delira ante la cámara de una
periodista.
Una de las películas más insoportables que he visto en mi
vida, más mala y aburrida yo creo que no existe. Por descontado, que nadie
intente verle la gracia involuntaria, porque no la tiene.
En cuanto a que la película sirvió como spot, me refiero a
que en un momento muy tonto de la película, una enfermera del hospital en el
que está delirando el granjero, lee un libro; se trata de la novela “King of
the Ants” en la que está basada la película, a punto de salir en vídeo, de
Stuart Gordon. Hacen tanto hincapié en ello, tantos planos gratuitos del libro,
que parece mentira que tengan tan poca vergüenza. Además, la portada que ilustra
el libro, es la misma que diseñó la compañía para la carátula del DVD. Ale,
publicidad velada.
En el reparto, hace gracia ver a Tony Todd, el mítico
“Candyman” que en horas bajas, a posteriori al final se ha convertido en un
mercenario de serie Z que no para de salir en mierdas –lo mismo que EricRoberts- y con la tontería, no se harán ricos, pero no paran de trabajar. Todd,
hace del granjero protagonista. Por otro lado, otro Todd, esta vez Todd Rex,
culpable del diseño del espantapájaros, es quien se mete dentro para darle vida
y bueno, Rex no es Kane Hodder, y ese espantapájaros necesita despabilar.
Dirige el asunto David Michael Latt, posteriormente, pez
gordo y productor de la mayoría de éxitos de “The Asylum” (tales como “Snakes
on a train”, “La guerra de los mundos 2”, “2012 Doomsday”, “Megashark vs. Giant Octopus”… y sigue sumando) y que tras este “Scarecrow Slayer” prácticamente
dejó de dirigir (tiene seis o siete títulos más a sus espaldas) para ganar
pasta a costa de poner en marcha las chapuzas que ya todos conocemos.
En definitiva, una puta mierda de peli, de saga, pero a su
modo, es la culpable de que “The Asylum” sea hoy lo que es.