sábado, 24 de octubre de 2020

COME TO DADDY (VEN CON PAPÁ)

Norval es un pijillo que viste de forma extravagante y se considera artista -aunque su función sea la de DJ-. Ha recibido una carta de su padre, el mismo que le abandonó cuando tenía cinco años. Le pide por favor que vaya a verle. Así que pilla un autobús y se marcha hasta una aislada casita junto a la costa, donde le recibe un hombre con pinta de haber vivido mucha vida. A medida que pasan las horas, Norval nota como su progenitor se comporta de manera un tanto peculiar. Es rudo con él, le pone a prueba constantemente y parece que se siente molesto con su presencia. Cansado de la situación, una mañana discuten. El padre agarra un cuchillo para clavárselo al hijo cuando, de pronto, el corazón le falla y muere. En la funeraria no hay sitio, así que el cadáver deberá esperar en casa. Si esto ya de por sí puede resultar acongojante, los escandalosos ruidos metálicos que comienzan a sonar por las noches no ayudan demasiado. Poco sabe Norval -y nosotros- los muchos secretos que le quedan por descubrir y que, a la larga, se verá obligado a sacar al asesino que todos llevamos dentro.
Curiosísima película de la que no esperaba nada de nada y terminó atrapándome, al menos durante una primera media hora genuinamente imprevisible e inquietante. Reconozco incluso que en algunos momentos tuve escalofríos. Pero poco a poco, a medida que la caja de sorpresas se van abriendo y vamos sabiendo más y más, el efecto inquietud se diluye e, inevitablemente, deja de funcionar tan bien como lo había hecho hasta el momento. La buena noticia es que nunca da la espalda del todo al factor entretenimiento. Y tampoco cae en lo previsible.
Aportan su talento, que no es poco, Elijah Wood, Stephen McHattie y Martin Donovan en los roles principales. Al director, Ant Timpson, no lo conocía de nada, en parte porque este es su primer largo como tal, aunque en funciones de productor dispone de una lista extensa donde localizamos bastante terror moderno, especialmente de tipo episódico. 
No es tan estupenda como prometía, pero sigue siendo recomendable.