lunes, 30 de mayo de 2011

DAHMER VS. GACY

Desde luego, al responsable de esto, Ford Austin , sentido del humor no le falta. Desde su incipiente sello independiente dedicado a las “Low Budget movies” Angry Baby Monkey Pictures, Austin, un aficionado al cine de sub-géneros, y sobre todo al “Dwarfxplotation”, siendo Weng Weng su principal inspiración, se saca de la manga esta comedia negra, que toma como modelo el FREDDY VS. JASON de Ronny Yu, pero cambiando a tan populares personajes, por populares “serial Killers” homosexuales reales. De hecho, uno de los pósters de esta película, es una replica casi exacta del perteneciente a la película de Yu. Así, tenemos este delirante “crossover” con el carnicero de Milwaukee y el payaso asesino como absolutos protagonistas.
Científicos militares, sin saber muy bien el por qué, experimentan con el adn de los psicópatas mas peligrosos de América con el fin de crear un súper asesino. Pero por lo que sea, la cosa sale mal y tenemos a los clones de John Wayne Gacy y Jeffrey Dhamer, pululando a sus anchas por ahí, dando cuenta de sus victimas de la manera que les hizo famosos.
Por otro lado, tenemos a un luchador de Wrestling, que es una especie de enviado de dios, que tendrá que parar los piés a estos dos psicho- Killers.
A priori, la película parece bastante interesante, pero a la larga, se queda en un chistecillo insípido.
Incluso, la introducción de Ninjas que se enfrentan a los “Serial Killers”, así como todo tipo de chascarrillos (¡una niña entrevistada en la tele por ser una “serial Killer”!), la convierten en una patochada que busca el delirio y lo bizarro de manera expresa, al mas puro estilo del primer Lee Demarbre ( SMASH CUT, HARRY KNUCLES, JESUCRISTO CAZADOR DE VAMPIROS) o de, por poner un ejemplo de aquí, Pedro Temboury ( ELLOS ROBARON LA PICHA DE HITLER, KARATE A MUERTE EN TORREMOLINOS), o sea, una puta mierda.
A eso, hay que añadirle toneladas de insustancial parloteo y un sentido del ritmo completamente amateur, que aburren de pelotas.
Pero no todo es malo en este producto; el gore, artesanal y de la vieja escuela, es, además de generoso, cojonudo. Sangre a borbotones y látex a mansalva durante la mayoría de escenas de acción, llegan, por los pelos, a salvarla de la quema, y hacen que merezca la pena, al menos un visionado. Especial atención merece la primera víctima de Gacy, un vagabundo que minutos antes de ser masacrado, se estaba comiendo una rata viva. Esa escena está tan bien hecha, que revuelve el estomago.
A destacar también, un noticiero que aparece de vez en cuando durante la película, en el que un reportero nos va explicando lo que pasa, mientras que por la parte inferior, vemos unos rótulos que anuncian cosas como que Warwick Davis va a hacer un biopic sobre Weng Weng o que se van a estrenar a la vez FEAST 4, 5 Y 6 y todo tipo de guiños al cine de género mas ínfimo, reproducido a base de noticias falsas.
La película se queda con un final abierto en el que se introduce a la figura de Charles Manson, al que se le reserva una escena final de lo mas sanguinolenta.
Desconozco si formará parte o no de la secuela, pero lo cierto es que para 2013, ya se está anunciando la segunda parte de esta: DAHMER VS GACY 2: IN SPACE, en el espacio, como no podía ser de otro modo.
Ford Austin, que además es actor de todo tipo de producciones, y que aquí además interpreta a Jeffrey Dahmer, dirige largometrajes de bajo presupuesto como churros, a razón de tres o cuatro por año, y logra con las sagas de CEREBRAL PRINT, o con ATTITUDE FOR DESTRUCTION o este DAHMER VS. GACY, sus mayores “éxitos”.