Realmente nuestra historia se remonta a la primera mitad de los 80 y a un grupo agradecidamente oscuro, pero de indudable culto, conocido por el peculiar nombre de "Thatcher on Acid", con un rollo más que próximo a las maneras de "Crass" y su pandi (con "The Mob" o "Zounds" a la cabeza). Esa clase de combo especialmente interesado en letras totalmente panfletarias y que, sin rechazar para nada el uso de guitarras potentes y afiladas, prefería un modo de componer variado, rico y colorista, recurriendo a melodías bonitas o instrumentos de toda clase y condición. El resultado solía superar en interés a los sonidos monocordes, facilones y comercialuchos -al menos para su nicho- de "Exploited", "GBH" o "Chron Gen", aunque, por contra, también podían pecar de brasas. Aburridos.
A la hora de ilustrar sonoramente el ejemplo, me he decantado por una de las tonadillas más disfrutables de "Thatcher on Acid". Una que es buena muestra de su repertorio. Arranca "fisnamente" y pronto adquiere una energía -con predilección por darle gusto al bajo- tan maravillosa como gozosamente empalagosa. Es escucharla y te entran ganas de dar botes como un lerdo. Les hablo de "¿It is Art?", de chocante naturaleza anti pornografía -urgh!-, nada menos. Creo que salió por primera vez en el disco "Moondance". Pero podría ser "Curdled". El asunto resulta harto confuso. Da igual, la cuestión es que mola muchísimo...
Bien, así de primeras, a la lejanía y como decía antes, estos también podrían calificarse de anarco-punk. Ya el mismo nombre invita a suponerlo. Y sí... salvo por un detalle, "Wat Tyler" hace gala de una tendencia mucho más guasona, alegre y festiva. Sin, por ello, renunciar a sus anarco-ideas. Solo que expuestas a través de la parodia, la bufonada. Muy inglesa en su esencia. Como unos "Monty Python" con instrumentos. De este modo se rompe un mito -mío cuanto menos-, que las bandas anarco-punk carecen de sentido del humor.
Cosa también demostrada ante el hecho de que los mismos "Thatcher on Acid" no le hicieron ascos a compartir surcos con "Wat Tyler" en un LP fifti, fifti. Uno adquirido por estas manitas en su día y de vital importancia para alimentar mi obsesión. Por un lado, "Thatcher...", bajo el título genérico de "Squib", se curran once temas. Algunos jodidamente buenos. Destacaría tres. El primero, "Shakey", por su tempo lento, casi de trance, ideal como acompañamiento senderista (y lo digo por experiencia). El segundo, "My favourite mess", más animado, y el tercero "I'll probably laugh at this one day", directamente me subyuga...
"My favourite mess"
"I'll probably laugh at this one day"
Llegados a este punto, tocaría comenzar a elegir sendas muestras sonoras. Sin embargo, va a resultar una tarea jodidamente ardua. Por la enorme cantidad y diversidad, tanto musical como de "tono" (las hay directamente de risas, y las hay un pelín menos desmadradas) y porque, cojones, me gustan muchas. Demasiadas.
Sí, my friends, entre finales de los noventa e inicios de los dosmil, entré a engrosar las filas de los fans de "Wat Tyler". Tanto como para dedicarles varios artículos en fanzines, periódicos universitarios y, por supuesto, el número dos del "Aquí Vale Todo" papiloso. En sus páginas interiores, oui!, pero también las chocantes portada y contraportada contaban con ellos como imagen central. Llegué incluso a mantener una relación epistolar con uno de sus integrantes (Sean Forbes) y los entrevisté en un par de ocasiones. Ahí es nada. Me encantaban estos cabrones, y me identificaba mucho con sus maneras y sentido del humor. Imposible no fliparse ante una portada como la de "I'm Forever Blowing Bubbles", el primero de sus recopilatorios de singles...
Ya puestos, también merece la pena recuperar la
del single "Appetite por Axl" que tanto escandalizó
a los paletos de "Popular 1"...
del single "Appetite por Axl" que tanto escandalizó
a los paletos de "Popular 1"...
Tal era mi fanatismo, que usé esta última para
hacerme una camiseta y lucirla alegremente.
Podría sonar a bravuconada, pero existen pruebas.
Concretamente, una foto donde salgo portándola a la
par que celebro mis nosecuantas primaveras...
hacerme una camiseta y lucirla alegremente.
Podría sonar a bravuconada, pero existen pruebas.
Concretamente, una foto donde salgo portándola a la
par que celebro mis nosecuantas primaveras...
Como dato curioso, por aquellos tiempos estaban en trámites de colaborar musicalmente con una "película gore de bajo presupuesto" -definida así por ellos- titulada "The Passanger", pero nunca jamás se supo del asunto.
En cualquier caso, a la hora de hacer una selección sonora, me he decantado por varios ejemplos. Veámoslos...
Como decía, una temática recurrente en su repertorio eran
los temas dedicados al desamor, a las relaciones
imposibles o rotas. Canciones como
"You´ve stolen my heart" ("Me has robado el corazón")...
los temas dedicados al desamor, a las relaciones
imposibles o rotas. Canciones como
"You´ve stolen my heart" ("Me has robado el corazón")...
O "Too young, too bitter" ("Demasiado joven, demasiado amargado/a"), sobre
una novia que cambia de parecer diariamente y vuelve loco
a su maromo. Hoy te quiero, mañana no. Hoy te dejo, mañana
no. Seguramente basada en hechos reales...
a su maromo. Hoy te quiero, mañana no. Hoy te dejo, mañana
no. Seguramente basada en hechos reales...
"Rude Boy/Girl" es el término que se utiliza para referirse a
aquellos/as adictos/as a la música jamaicana, con especial predilección
por el Ska. "Wat Tyler" lo toma por su vertiente literal (rude se
traduce como grosero) y con "Rude Girl" primero y "Rude Boy" después
tiran de escatología pura, a base de sonoros pedos y
descripción gráfica de toda suerte de apestosas funciones corporales.
Siempre de modo jodidamente gracioso y contagioso.
aquellos/as adictos/as a la música jamaicana, con especial predilección
por el Ska. "Wat Tyler" lo toma por su vertiente literal (rude se
traduce como grosero) y con "Rude Girl" primero y "Rude Boy" después
tiran de escatología pura, a base de sonoros pedos y
descripción gráfica de toda suerte de apestosas funciones corporales.
Siempre de modo jodidamente gracioso y contagioso.
Aunque para gracioso, "Eternal Triangle" o lo que ellos mismos
califican de "Opera Punk", la primera y última de su especie.
Un tema que pierde un poco su "punch" si no captas el
idioma, pero aún así, resulta de lo más hilarante y
descacharrante. A mi me encanta.
califican de "Opera Punk", la primera y última de su especie.
Un tema que pierde un poco su "punch" si no captas el
idioma, pero aún así, resulta de lo más hilarante y
descacharrante. A mi me encanta.
Y con "There´s a guy down the chip shop swears
he´s satan" ("Hay un tipo en la tienda de patatas fritas que
jura que es Satanás" ¡¡¡!!!) retomamos a los "Wat Tyler"
de punk más (o menos) ortodoxo.
he´s satan" ("Hay un tipo en la tienda de patatas fritas que
jura que es Satanás" ¡¡¡!!!) retomamos a los "Wat Tyler"
de punk más (o menos) ortodoxo.
Hasta entonces la especialidad del trío eran los singles. Nunca se habían currado un LP completo. El día que decidieron ponerse en serio con ello, todo se fue a la mierda.
El resultado al esfuerzo, "The fat of the band" (parodiando esta vez el "The fat of the land" de "Prodigy") tampoco fue totalmente desdeñable. Tenía sus temas majos y divertidos, de entre los que salvaría la bonita e inevitable tonadilla sobre desamores ("Not deep enough") a base de voces femeninas (recurso habitual cuando se decantaban por melodías más poppys) y la igualmente inevitable canción cafre de tintes pervertidos, "The vicar and I"...
"Not deep enough"
"The vicar and I"
(impagable la llamada "versión punk")
Pero, así en general, el disco no viciaba tanto como sus trabajos previos. Se perdía algo. Y es que, tal vez, los "Wat Tyler" funcionaban mejor en formato corto. Es lo que tienen aquellos que se decantan por la coña, las dosis escuetas les benefician. Posiblemente "The fat of the band" fue la causa de mi pérdida de interés en los muchachos, que seguirían tocando y publicando cosas. Justo, no mucho después lanzaron otra recolección de singles bajo el título genérico de "The adventures of Bob Tayler and Mr.Crust", tan divertido como de costumbre. Incluye versiones sutilmente distintas de algunos temas aparecidos en el LP y, ciertamente, mejoran mucho. Así que, quizás, la culpa entonces fue una mala producción. A saber...
Finalmente "Wat Tyler" chapó la persiana. Cada uno de sus integrantes tiró por caminos distintos, siempre dentro del asunto musical (o anarco-punk, claro), dejando un legado altamante recomendable. Espero y deseo que jamás se les ocurra recuperarlo con la excusa del homenaje, el tributo o la nostalgia. Sería impropio de ellos.