sábado, 30 de noviembre de 2024

TIMECOP: POLICÍA EN EL TIEMPO

Una de las desventajas de llevar acumulados ya diecisiete años de reseñas es que, inevitablemente, tiendes a repetirte. No digo películas concretas, serían más bien apreciaciones. Comentarios. Ya, en realidad importa poco, dada la nula capacidad que tienen hoy día los humanos, y mucho menos ustedes, de retener absolutamente nada. Así pues, tampoco se acaba el mundo si vuelvo a aclarar, antes de comenzar, que me pirro por las historias de viajes temporales y demás paradojas. Y ello contribuye, muchas veces, al disfrute de las respectivas películas. Por eso, seguramente, "Timecop: Policía en el tiempo" me cae tan bien. Me gusta. Un perfecto divertimento para pasar el rato la mar de agradablemente, más si lo acompañas con una bolsa de patatas "chips", aunque sufras hipertensión. ¿Qué quieren que les diga? en ocasiones merece la pena jugarse la salud. Esta fue una de ellas.
Los viajes en el tiempo son una realidad, aunque tampoco es que tengan verdadera utilidad... salvo si eres un político corrupto dispuesto a financiar tu campaña para la presidencia enviando asesinos al pasado, en busca de tesoros de incalculable valor, o alterando los acontecimientos en tu favor. Es por eso que el gobierno de los USA crea un cuerpo de policías dedicado a evitarlo. El más mejor de ellos, y más "cool", es Walker (nombre de héroe por antonomasia), quien vive atormentado al no haber logrado impedir la muerte de su queridísima mujer en manos de unos villanos con un gusto horrible a la hora de elegir vestuario y peluquero. Lo que desconoce aún es que tal acontecimiento guarda mucha relación con su actual condición de policía del tiempo, y no solo dispondrá de una oportunidad para impedirlo, también la de detener al político malísimo que todo lo enmierda con sus feos actos.
Estamos en 1994, hace un año que Jean-Claude Van Damme lo petó con "Blanco Humano" y las puertas de Hollywood se le han abierto de par en par. Así, los estudios "Universal" deciden ficharle y crearle este vehículo de lucimiento, contando de nuevo con Sam Raimi y Robert Tapert para la producción (es decir, "Renaissance Pictures", quienes también apadrinaron "Blanco Humano") y al entrañable artesano -dicho sin tono peyorativo- Peter Hyams en la dirección. La materia de base es, nada menos, un comic editado por "Dark Horse" y serán algunos de sus propios responsables quienes se encarguen del guion. Así ya tenemos alguien a quien aplaudir los muchos aciertos, pero también señalar por algunas cagadillas. "Timecop" se desarrolla en un futuro ya por entonces no muy lejano, 2004 y, en fin, aunque los adelantos tecnológicos no son demasiados, los que se muestran dejan bastante que desear. Especialmente esos feísimos + aparatosos automóviles con supuesta autonomía. Y hablando de vehículos, no acabo de entender por qué los viajeros del tiempo se suben a uno para partir, pero cuando llegan a su destino, van a pata. ¿Dónde han aparcado? Tiene que haber sido en algún sitio porque, a la hora de regresar al presente, vuelven a echar mano del vehículo. Aunque para paradojas inexplicables, la teoría de los mismos viajes temporales. Según la película, ir al futuro es imposible porque todavía no ha ocurrido. Bien, en realidad es justo lo contrario. O al menos eso dicen los astrofísicos, con el añadido de que, una vez en marcha, jamás podríamos regresar al punto de partida. Ténganlo en cuenta por si algún día se les presenta la ocasión.
Pero nada de todo eso importa, solo son apreciaciones pajilleras. Cuando una historia es interesante, y viene cargada de secuencias resultonas de acción, yoyas por doquier, diálogos chispeantes, un héroe simpático y un malo odioso -como es el caso- se le perdona todo, incluidos esos costrosos efectos CGI, especialmente en lo referente al poco aciago destino del villano, tan espectacular como chirriante.
A Van Damme lo acompañan Ron Silver dando vida al carismático político corrupto, la guapa Mia Sara enseñando brevemente las ubres y el gran Bruce McGill como jefazo de los polis viajeros.
A diferencia de lo que he creído durante todo este tiempo, "Timecop" fue un éxito. De hecho, es la película de Van Damme que más pasta ha recaudado en toda su carrera, una que comenzó a hacer aguas justo después. Hasta el culo de divismo, drogas y bebercio, el belga se convirtió en un apestado, algo a lo que contribuyó su fracasadísima siguiente película, "Street Fighter: La última batalla". No obstante, aún tendría tiempo de protagonizar algunas cosas potables y volver a colaborar con Peter Hyams en la poco inspirada "Muerte Súbita" (retomando dicha asociación un puñado de añacos después con "Cerco al enemigo"). Supongo que esa caída al vacío impidió la existencia de un "Timecop 2"... es decir, uno financiado generosamente y con Van Damme de prota. Lo que hubo en su lugar fue una serie de televisión de la que nadie se acuerda y una secuela tardía -año 2003- directa pal mercado del dvd con el sosainas de Jason Scott Lee en plan héroe y el hoy recuperado Thomas Ian Griffith (de "Karate Kid 3" / "Cobra Kai") en plan villano. También hubo más comics, algún vídeo-juego y se habló de un remake jamás materializado.