Si hago un repaso a mi adolescencia me encuentro con un panorama muy triste, pero lo que más me llama la atención es que jamás disfruté de dos de las típicas "cosas" que solían encandilar a los de mi quinta: los grupos de heavy metal y las películas de artes marciales. Y lo intenté!, ya lo creo, pero a día de hoy no puedo hablar de ningun grupo greñudo que me flipara y de ningun film de piños que despertara mi interés mas allá de lo meramente anecdótico.
Por ese motivo puedo decir que nunca me sentí atraído (dentro de los parámetros de la heterosexualidad) ni por Bruce Lee ni por Jackie Chan, aunque puestos a elegir, la verdad es que me quedo con éste segundo... quizás porque sus pelis solían ser más divertidas, o porque sus producciones me son más próximas en cuanto a década se refiere. He visto muchas pelis de Jackie Chan, y salvo excepciones, suelen entretenerme, lo que ya es mucho... incluso las más recientes, tipo "El Smoking", me parecieron films muy gozables.
De la cosecha de Chan, antes de su integración definitiva en Hollywood, me quedo con dos. Por un lado "La armadura de Dios" y por otro, la que, sinceramente, creo que es su mejor película, "El Protector".
A Jackie Chan siempre le ha gustado vender la moto de que sus obras están pensadas para una audiencia joven y, por ello, se mantienen alejadas de la violencia excesiva y especialmente cruda. Sin embargo, "El Protector" es la única que se resiste a encajar en esa fórmula, quizás sea por ello que al actor no le hace demasiada gracia que figure en su currículum. Y es que no podía esperar un cuento de hadas con James Glickenhaus detrás de las cámaras, también conocido como "El tipo que dirigió la emblemática, brutal e inolvidable "El Exterminador"", lo que para mi ya es sello de garantía. Está claro que "El Protector" no abusa de la sangre tanto como la obra cumbre de Glickenhaus, pero tampoco se queda corta, sobre todo en los tiroteos.
De por medio tenemos a un Danny Aiello totalmente desubicado, acompañando a Chan hasta su tierra natal para ajustar cuentas con el asesino de un compañero, galletas, muchas galletas, de esas que asustan, un poster promocional super-chanante (aquí presente) y un slogan que quitaba el hipo a jovenzuelos impresionables como yo: "Clint Eastwood es Harry, el sucio, Sylvester Stallone es Rambo, Jackie Chan es El Protector". ¡Olé!