
“N.W.A.” es un grupo de rap surgido a finales de los 80 en
un suburbio de Los Ángeles que significaron una revolución a nivel
internacional –menos en españa, dónde nunca nos enteramos de la misa la mitad y
dónde había que comprar discos de rap de importación, al contrario del resto de
países de Europa donde llegaban sin problemas- además de convertirse en un
fenómeno de masas. Aunque no fueron los primeros –los libros dicen que el
primero en cultivar el subgénero fue Schooly D- si que son conocidos como los
percusores del gangsta rap, además de ser
el grupo más polémico de la historia de los USA al tener al mismísimo
F.B.I, tocándoles las pelotas por el contenido violento y en contra de la
policía de sus letras. N.W.A. se han convertido, con el paso de los años, en
leyenda como Elvis Presley, Kurt Cobain o los Rolling Stones. Y aunque su paso
por los escenarios fue efímero – vieron la vida comercial por primera vez en
1988 para terminarla en 1991- cada uno de los miembros del denominado “grupo
más peligroso del mundo” han continuado con su legado llevando las siglas de
“Niggas With Attitude” a lo más alto, esto es; si estás leyendo esto, por
supuesto que sabes quien es Ice Cube, ya sea por su música o por sus películas y
bien sabes de sus logros. Por otro lado, tenemos a Dr. Dre, que luego descubrió
talentos como Snoop Dogg o Eminen y que era el verdadero cerebro del grupo en
lo que a la parte musical se refiere, que facturó uno de los mejores discos de
la historia del rap, el “The Chronic” inventando así otro subgénero como es el
“G-Funk”- aunque otros ya lo hicieran antes, ya saben- y, para el público más especializado tenemos
a Eazy – E, todo un emblema del Gangsta Rap convertido en icono y cerebro
empresarial del grupo, y ya en segundo termino (igual que en la película)
tenemos a MC Ren y D.J. Yella. Todo ellos, mitos a día de hoy.
Bien, pues la película de marras, biopic súper agradecido,
narra la historia de esta gente desde sus inicios hasta la muerte de Eazy –E a mediados
de los noventa a causa del Sida, con todos los dimes y diretes, separaciones,
reuniones y demás parafernalias del mundo de la música mostrando sin tapujos
como Eazy –E engañaba con la pasta al resto del grupo –lo que propició la
salida de Ice Cube que emprendió una exitosa carrera en solitario- y como a
este lo engañaba el manager, blanco y judío, que se embolsó lo que no estaba
escrito durante los años de carrera del rapper.
Ascenso y auge, que no caída, porque en la actualidad todos
y cada unos de los miembros vivos del grupo continúan en el mundo del
espectáculo con éxito.
Entonces, sin ser una obra maestra, y al ser un producto de
Hollywood de lo más estandarizado y concebido para ser una candidata a los
Oscar, aunque suaviza muchos aspectos de la vida de los rappers –Dr. Dre, era
un maltratador que daba de hostias a su pareja. De hecho, recientemente, esta
ha denunciado a los productores alegando que en la película Dre queda reflejado
como un héroe y se pasa por alto su sufrimiento real. Por otro lado, Eazy- E no
contrajo el Sida por obra del espíritu santo; era un putero indomable y
dorgadicto orgulloso- si que es lo suficientemente solvente (y entretenida)
como para tenerla en estima. De hecho, es una de las 10 mejores películas de
este año en mi lista, sin duda.
A parte de esto, el factor nostalgia hace mucha mella en mí,
y en el resto de espectadores que en el pase de hoy se han congregado en un
cine de Alcorcón. Y vuelvo al principio. Dada la naturaleza del producto y el
target del público a la que va destinada, me decido a ir a verla con la
seguridad de estar completamente solo en la sala. Y mira tú por donde, he
tenido que esperar cola. Y no es una película que haya tenido mucha publicidad
precisamente. Y entrando en la sala, veo que está repleta. Eso si, no es un
público normal y corriente. Es un público en el que predominan las gorras. Hay
alguna pareja de ancianos y un tercio de adolescentes, pero la mayoría de
espectadores rondarían los 40. Esos eran los que llevaban las gorras e iban acompañados
de sus mujeres –o novias o lo que fuesen- … me explico; quizás seamos minoría
en españa, pero si entre los años 1989 y 1995 escuchabas rap y eras
adolescente, lógicamente, ahora eres un cuarentón. El rap en Madrid, pegó
especialmente fuerte en la periferia a principio de los noventa, y huelga
decir, cual era uno de los grupos punteros del género aquellos años; La única sala de la periferia en la que
proyectan “Straight Outta Comptom” es a la que yo he ido; ergo, blanco y en
botella. Todos los raperos de aquellos años, hemos decidido ir al mismo pase en
el día del espectador. De hecho me he encontrado con un viejo amigo al que
hacía tiempo que no veía. ¿Consecuencia de esto? Que como los perros nos olemos
el culo y nos reconocemos. Entonces, la
película se ha visto en completa comunión. Nada más empezar los primeros
compases de uno de los temas clásicos de la banda, “Fuck the Police”, no solo
se me han puesto los pelos de punta, como al resto de los asistentes, sino que,
en completa sintonía toda la sala se ha puesto a rapear junto a Ice Cube
(maravillosamente interpretado por su hijo en la vida real O´Shea Jackson Jr)
“Fuck the police coming straight from the underground, a young nigga got it bad
cause I'm brown”… que les voy a contar. Vivir el rap en los noventa para
contarlo, haber asistido a este pase
para creerlo. Y hacía mucho que no disfrutaba tanto en el visionado de una
película, independientemente de la calidad de la película.
En cuanto a las labores de dirección, ya que es Ice Cube
quien produce, nada más coherente que contar con el artesano F. Gary Gray, al
mismo que antaño dirigiera la primera película autoral de Cube, “Todo en un
Viernes” y que ha sabido mantener el oficio con películas como “Negociador” (la
de Kevin Spacey), “Diablo” para lucimiento de un temprano Vin Diesel, “The
Italian Job”, “Be Cool” o “Un ciudadano ejemplar”, que con “Straight Outta
Comptom” ha firmado su obra maestra. Ahora le ha dado a él la dirección de
“Fast & Furious 8”.
De secundario de lujo y con aroma a Oscar, acompañando a los
muchachos que dan vida a los N.W.A, tenemos a Paul Giamatti dando vida al
manager del grupo, que se debió hacer de oro timando a los negros adolescentes,
Jerry Heller.
Además, la película ha sido un taquillazo en los USA, y aquí no se como irá... pero hacía mucho que no hacía cola.
“Straight Outta Compton” es pura nostalgia. Y una gran
película también.
Para que los no adentrados en la secta –el rap y el Hip-Hop-
les dejo un par de fotos para que comprendan que ha significado esta película
para mí. Podían ser más fotos, pero estos son los discos que más presencia
tienen en la película. Pero de estos cabrones, juntos o por separado, lo tengo
todo. Buen momento para desempolvarlos.