Debo ser un bicho raro porque lo cierto es que a mí estos
“Spoofs” de última hornada made in Wayans, me divierten terriblemente. Mucho,
la verdad es que me descojono. Y es que sus parodias tienen una premisa que a
los negratas de suburbio y, por ende, a mí, nos funciona: muchos chistes de
pollas, muchos de fluidos y mucho racismo. Racismo este que al venir escrito
por un negro, es como un permiso para que los blancos nos riámos con él.
Chistes que escritos por un blanco serían denunciables, por otro lado.
En cualquier caso, la formula basada en la incorrección
política que usa Wayans, me funciona a la perfección, y en esta “50 sombras muy
oscuras” no es diferente que en los “Paranormal Movies”. La formula es siempre
la misma.
En esta ocasión, el
motivo para hacer la chufla es la adaptación cinematografica de la novela
destinada a marujas de variado pelaje “50 Sombras de Grey”. El ella, una
“pocaaguas” conocerá a un individuo bien que la follará mucho y duro. Pues en
esta parodia de Wayans pasa absolutamente lo mismo, solo que entre medias hay
toneladas de chistes de todo tipo.
No he visto la película de la que se pitorrea –ni mucho
menos leído la novela- y no puedo calibrar si es una parodia fidedigna, lo que
si puedo intuir es la casi exacta recreación de escenas clave de la original
con el toquecito Wayans en cada una de ellas. Así que me imagino por donde van
los tiros.
Evidentemente, no se puede decir que “50 sombras muy
oscuras” sea una buena película, como a buen seguro tampoco podemos decirlo de
“50 sombras de Grey”, pero, elementos paródicos aparte, debo decir que me he
reído mucho con todos esos previsibles chistes, esas recreaciones obscenas de
un material ya de por si obsceno, y como Wayans hace alarde se su bis cómica,
que o adoras o amas. Yo no lo adoro,
pero cuando hace un chiste de pollas afortunado, o roza los límites de lo permisivo,
la verdad es que me provoca la carcajada. Más ahora, en su época de decadencia
que en sus momentos álgidos para los grandes estudios en compañía de sus
hermanos.
Este tipo de “Spoofs” tan cerdos y, por otro lado, faltos de
imaginación, son el negocio de Wayans, y quizás no sea un negoco redondo, pero
a juzgar por la regularidad de los
mismos, le dan para ir comiendo y viviendo con dignidad.
Si parodia alguna película más además de la obvia, no me he
dado mucha cuenta, salvo en el obvio gag a costa de “Magic Mike”.
En el reparto contamos con desternillantes papelitos para
Jane Seymour, Mike Epps, o el inefable Fred Willard que se marca un gag a costa
de Woody Allen con el que me he tenido que secar las lágrimas.
Michael Tiddes, es el blanquísimo director que dirige tanto
chiste de negros y que ya sirvió de artesano para las patochadas de Marlon
Wayans en “Paranormal Movie” y “A Haunted House 2”, las únicas películas que ha
dirigido junto a esta.
A mí, que quieren que les diga, me hace gracia.
Por cierto, la película en un principio, en su edición española, se iba a titular "50 sombras más oscuras", pero como en el transcurso de su lanzamiento se estrenó la secuela de "50 sombras de Grey", que tiene ese mismo título, acabaron llamándola "50 sombras negras."