Con el revival de cine zombi que sufrió el mundo a principios del presente siglo, coincidiendo además con la democratización del cine digital, surgieron como setas películas de zombis de todos los tamaños texturas y presupuestos. Se puede decir que el pistoletazo de salida hacia aquella moda lo dio “El amanecer de los muertos” de Zack Snyder y, en lo sucesivo, se puede decir que se pierde la cuenta de feroz fue la avalancha de títulos estrenados y/o lanzados en vídeo.
En los parámetros del cine independiente y de bajo presupuesto, hablando en plata, no aparecía mas que basura en el mercado, por eso tampoco es extraño que, entre tanta basura, se nos pasase alguna pequeña joya del subgénero. “The Dead” sería un buen ejemplo de película estupenda que pasa desapercibida en un mar de mierda.
Se trata de un film británico de naturaleza independiente, financiado enteramente por sus dos máximos responsables, los hermanos Ford, Jonathan y Howard, que producen, dirigen e incluso aparecen en pequeños papeles en esta modesta película que, además, evidencia que con algo de talento, sobran el dinero y hasta las buenas ideas. Porque “The Dead” es estupenda, pero para nada original. Se trata de un film prácticamente mudo y sin argumento, rodado a la luz natural del día, que consigue provocar el desasosiego en el espectador al mismo tiempo que le entretiene y, a veces, le asusta.
Tenemos a una serie de militares que se encuentran en plena evacuación de algún país africano, y un americano sobrevive como puede a una epidemia zombi que esta sesgando a la población. No sabemos el origen de los zombis y en la película en ningún momento se habla de ello. Pronto el americano se encontrara con un soldado local y se unirán en la tarea de sobrevivir, por lo que al final la película es un constante ir y venir de los dos protagonistas acabando con todos los zombis que se interponen en su camino hasta ofrecernos un final de lo mas desesperanzador. No hay nada más, pero tampoco nada menos. Pues resulta ser una de las mejores películas de zombis modernos. Y lo es porque huye del postmodernismo, porque es una película tan seria que a pesar de la cantidad de disparos y desmembramientos, que hay muchos, casi se aborda como un drama intimista, y porque se abraza, mas por casualidad que por otra cosa, al cine de autor mas ortodoxo ofreciéndonos una película de zombis reposada y taciturna, es cine de zombis contemplativo y que, además, se recrea en unos efectos especiales artesanales tan efectivos que, cuando crujen los huesos de algún zombi al ser reventado, el espectador lo siente en los mismísimos cojones. Más espeluznante resulta en sí mismo la elección de los actores que hacen de zombis, un cast compuesto en su mayoría de actores tullidos. En definitiva, “The Dead”, por la que no daba un duro, me ha encantado.
Por lo visto el rodaje en Burkina Faso fue un autentico infierno, perdiéndose la equipación técnica al principio de la producción durante su transporte, sufriendo temperaturas absolutamente aterradoras y esquivando toda suerte de enfermedades africanas. De hecho, el protagonista, Rob Freeman tuvo que ser ingresado tras contraer la malaria y por poco no lo cuenta.
Sin ser una película que al final se haya movido mucho mas allá del circuito festivalero (y especializado) de rigor y que ha trascendido bastante poco (no deja de ser un film con exhibición teatral reducida que ha tenido su mayor vida comercial a través de la venta directa de DVDs y, ahora, las plataformas de streaming), ha dejado un legado lo suficientemente importante como para que sus responsables, los hermanos Ford, hayan rodado después una secuela titulada “The Dead 2: India” y como para que una editorial se planteara la edición de un libro contando los avatares del rodaje: “Surviving The Dead”.
Ya les digo; sencillita, al grano, seria y efectiva, una de las mejores cintas de zombis que he visto en los últimos tiempos.
No obstante intuyo que la secuela no es tan buena como esta (ya les diré... o no) y que los Ford Brothers no han vuelto a facturar nada que llame un mínimo de atención, pero, me alegro de haber visto “The Dead”.
Ah, y como están en África, todos son zombis negros que se quieren comer a un blanco. Casi parece una película racista. Por supuesto, no lo es.
Naxo la descubrió en su momento y más o menos viene a decir lo mismo que yo en su respectiva reseña de hace 11 años. Para leerla, pinchen aquí.