miércoles, 7 de diciembre de 2022

GALERÍA DE ESCANEOS BONITOS 21 (JESS FRANCO 2)

Imágenes extraídas de las fermosas páginas de "Mad Movies", "L´Ecran Fantastique" y otras revistas franchutes que me alegraron la adolescencia por ahí los años 80/90....

Películas de terror en la interminable filmografía de Jess Franco hay muchas. Pero películas de terror potables y que, por estética, maneras y dependencia de efectos especiales y truculencia, sean afines al género en su vertiente más moderna, o pos-setentera por llamarlo de alguna manera, solo hay dos. Puedo estar equivocado, pero creo que no. Son "Colegialas Violadas / Bloody Moon" y "Los depredadores de la noche" (resulta tentador incluir "La tumba de los muertos vivientes" o "La mansión de los muertos vivientes", pero no, esas las veo más añejas, rancias. Y de las de caníbales ni hablemos, ni siquiera son cine de terror) "Los depredadores..." es, además, de lo más soportable del cineasta, básicamente porque era un encargo que abordó aparcando un poco sus muchos tics y esa tendencia a dárselas de "auteur". Aquí Franco ejerció de artesano, gracias a dios. Siempre vigilado desde la sombra por el verdadero instigador del ambicioso proyecto, el legendario distribuidor René Chateau (al que envidio mucho porque fue ¿y es? pareja de Brigitte Lahaie), con el que por lo visto se llevó fatal. 
Chateau avasalló a la prensa especializada regional para que dieran la murga con aquella película. Y así cumplieron todas, siendo "L´Ecran Fantastique" la que le dedicó más páginas y chicha. Justo ahí fue donde supe de su existencia, y quedé maravillado ante el hecho de que nuestro Jess Franco fuese el director ya que, en ésa época, le tenía en un pedestal -iluso de mí-. Aunque, honestamente, hubo un ingrediente que despertó aún más mis ansias de consumirla, el generoso mogollón de gore que prometía el material publicado, este que les dejo a continuación.
Tras mucha espera vi la película y, bueno, si quieren conocer mis impresiones, recurran a la reseña oficial. Gracias.



Y, a continuación, Jess Franco en acción, compartiendo
foto con Telly Savalas. Siempre me sorprendió verle mover
el atrezzo, eligiendo donde situarlo, ... ¿en serio era tan
quisquilloso con esas cosas? ¿y en serio había tanto dinero
invertido en el proyecto como para permitirse perder
el tiempo con semejante pijada?