"Bugsy Malone, nieto de Al Capone" es una de esas excentricidades de
los años setenta, llevada a puerto por Alan Parker, que recuerdo
perfectamente que de niño fue una de las primeras películas que yo
alquilara en el Video Club por propia voluntad. Y es que el concepto me
fascinaba; Se trata de un musical de Gangsters interpretado integramente
por niños. Y como niño la disfruté plenamente, pero hará unos seis o
siete años que la revisé y lo cierto es que "Bugsy Malone, nieto de Al
Capone" es un coñazo muy grande. Como la oreja de una burra. Eso si, los
fotocromos, de esos grandotes, coloreados desde el fotolito de blanco y
negro, son una maravilla.
Entre tanto niño, mucho de los cuales no volvieron a hacer cine, destacan Jodie Foster y Scott Baio.