
Lamberto Bava venía de triunfar con sus "Demons", y arrastró a algunos de los actores de estas, que muestran palmito y dudosas dotes interpretativas junto a Serena Grandi (que sosa, pero que jamonaza!!!!), Daria Nicolodi (musa y ex-esposa de Dario Argento, una de las varias conexiones que esta peli tiene con el universo del padre de "Suspiria"), David Brandon (el orejudo director teatral de "Aquarius"), el mítico George Eastman (montándoselo con la Grandi en una bañera), Capucine en plan "return" y, claro, la Sabri.
A la música tenemos otro de los "elementos Argentianos", Simon Boswell, que también compuso los soundtracks de "Phenomena", "Aquarius", "Demons 2", "Hardware" o "Santa Sangre" y que se curra una música tan inadecuada en su tono como en su servicio (vamos, que suena en los momentos más inoportunos, otro toque muy Argento).
¿Y la historia?, pues un giallo con todas las de la ley, incluidos remalazos delirantes, que una vez más -y última- retrotraen al director de "Rojo Oscuro". Las modelos de una revista erótica van siendo asesinadas por un psycho-killer. ¿Quien es el responsable?... la verdad es que se ve venir a la legua, desde el minuto 10 como poco. El gore es escaso, las tetas las justas y lo realmente destacable es el efecto (que en la peli no se explica, pero que yo leí por ahí) de que el criminal, haciendo gala de su irrefrenable odio hacia las modelos, las ve con rostros monstruosos (el que no esté al tanto de este dato debe flipar colores).
Por lo demás, pues una de las pelis más soportables de su director, sin querer decir que sea especialmente buena, ni especialmente entretenida.