viernes, 26 de noviembre de 2010

TROMA IS SPANISH FOR TROMA

La Troma, que en los 90 alimentó tantas fantasías cinéfagas del tres al cuarto en nuestro país, cuando cualquiera, por moda, se veía capaz de hacer un producto a imagen y semejanza de la productora de New Jersey, está en horas bajas. Es por ello, que cualquier intento por volver a captar la simpatía de sus adeptos, así como inducir al “Tromeo” (dicese del acto de “tromear”, es decir, ver y reivindicar las películas de troma) a las nuevas generaciones, les vendrá como agua de Mayo.
No quiero decir que este documental, sea la manera de hacerlo en nuestro país, ni que esté concebido con esa mentalidad, ni mucho menos. Pero si es cierto que es una buena manera de recordarle a los fans de Troma, si es que aun queda alguno, que esta aun existe, y que en España fue una gran influencia en los 90 para el aficionado mas garrulo, ese que además, prácticamente ya está extinto.
Para ello, gente influyente del fandom como Mike Hostench, Hernan Migoya, Ladrón, Nacho Cerdá, Manolito Motosierra, Manolo Valencia, o los indispensables Naxo Fiol y Dani Moreno, nos van comentando sus impresiones, que pasan desde el entusiasmo absoluto, hasta el moderado desprecio.
Normalmente, los documentales de entrevistas, donde siempre alguien tiene algo interesante que decir, por norma general funcionan, y este no es menos. Cumple su función de documentarse y documentar, y lo más importante, entretiene al espectador.
El problema es, que mas allá de aquellos primeros filmes “tromaticos”, como por ejemplo EL VENGADOR TOXICO, o aquél catalogo de distribución (del que el propio documental se hace eco), el ¿fenómeno? Troma, personalmente, me interesa muy poquito, pero, eso si, miro el documental con sumo interés y compruebo como Migoya, no desaprovecha ninguna ocasión para dejar en evidencia el sistema de producción cinematográfica en nuestro puñetero país.
Dirige Marc Gras, el cual, según Imdb, ha rodado entrevistas a José Luis Merino y a Paul Naschy.