jueves, 11 de noviembre de 2010

AULLIDOS 7

La verdad es que llegó un momento en el que comencé a dudar si la séptima entrega de la franquicia de "Aullidos" no sería una leyenda urbana, porque parecía casi imposible visionarla o leer sobre ella. Pero no, sí existió, y ayer noche pude por fin verla... aunque la palabra adecuada sería sufrirla. Resulta curioso, trágico y fascinante cómo un film tan chulo y entrañable como el de Joe Dante pudo acabar derivando, con el paso de los años, a este "Aullidos 7" (en los USA "The Howling: New Moon Rising" o "The Howling: Mystery Woman"), es decir, a la más baja muestra de serie Z, casi rozando el amateurismo mal aplicado (repito por si algun lerdo nosentera que para mi lo amateur es maravilloso, salvo cuando intenta fingir ser otra cosa, ahí es cuando me entran dolores y arcadas).
¿Y de qué va "Aullidos 7"?, buf! a ver... de un tio que llega a un pueblo de la américa ultra-profunda coincidiendo con misteriosos crímenes. Hay quien sospecha que es un hombre lobo, y que se trata del recién llegado (motivos hay), pero también podría ser otro que aprovecha la ocasión para cargarle el muerto al pobre idiota.
En fin, que sí, que es una pedazo de mierda risible de esas duras, duras. Verla entre colegas fijo que es un cachondeo, pero solo, ¡¡ouch!!, duele. Todo ello se desarrolla, como decía, en un pueblo de la américa más paleta. Tenemos tíos vestidos de cowboy pa dar y regalar y, sobre todo, una banda sonora trufada de country, ¡¡pero asaco!!, hay veces en las que suenan hasta tres temas seguidos. Sin contar los números de baile y, directamente, las secuencias de bandas actuando en un garito. Acabas hasta las pelotas (y eso que a mi no me desagrada el country), sobre todo porque en 60 minutos de peli solo hay UN asesinato, y ni siquiera vemos al monstruo. En realidad este no aparece hasta el final del todo, horripilante morfing mediante, y es tan cutre y triste como cabría esperar. De por medio, además de música country, tenemos momentos de humor voluntario dolorosamente patéticos, muchos diálogos sin sentido ni motivo, infra-actuaciones (el 99% del cast son peña real que habita el pueblo y que, obvio, no se dedican a la interpretación) y dos tios, un cura y un policía que es la combinación perfecta entre El Fary y David Carradine (no exagero), hablando de hombres lobo y tirando de flash-backs. En estos podremos ver las únicas explosiones y el único gore de toda la peli, ya que se tratan de extractos de las cuarta y quinta entregas, que no porque sí están producidas por el mismo baranda que se encarga de "Aullidos 7"... y no solo de dirigirla, también produce, escribe, monta e ¡interpreta al protagonista!. Dado que este mismo tio, Clive Turner, actuó (y produjo) también la quinta entrega, se supone que en esta séptima es el mismo personaje aunque... ¡con distinto nombre! (también estaba en la cuarta, según Imdb). Está guay eso de que, por fin, una de las entregas de "Aullidos" haga referencia a los títulos previos, incluso aquí sale la misma actriz que protagonizaba "Aullidos 4" recordando su terrible experiencia... lástima que haya tenido que ser en la peor de todas.
Resumiendo, un despropósito en toda regla. Todo ello se traslada hasta la carátula del VHS yankee, que aquí les dejo, en la que se asegura que es "Una de las mejores películas de hombres lobo jamás hechas" según Los Angeles Magazine (claro que luego, en letras pequeña, vemos que dicha reseña hace única y exclusiva referencia al "THe Howling" original, no a esta séptima demencia!!). Por ahí también dicen que los responsables son los mismos de la saga "Pesadilla en Elm Street" o la novena de "Viernes 13"... y todo porque New Line se encargó de su distribución en video. Los hay mu listos, oiga!.