
Una chica, rescatada de la calle en pleno acto de locura, es encerrada en un manicomio. Allí, y lentamente, comenzará a tener terribles visiones fantasmales... pero unas de bien físicas, ya que la figura siniestra que se le aparece de modo imprevisible se despacha a gusto con el resto de pacientes. Naturalmente, la moza se pondrá manos en el asunto para desentrañar el misterio.
Vale, sí, es cierto, "The Ward" no resulta nada original, ni sorprendente, tiene un desarrollo típico y tópico. Sin embargo, y como ya he dicho innumerables veces, cuando algo trillado está bien hecho, sigue siendo útil como entretenimiento. Y "The Ward" tiene un acabado técnico estupendo, muy Carpenter, a lo que contribuyen unos actores bien solventes. Además, la ración de CGI está bajo mínimos (idem con el gore, plato este no muy habitual en el cine de su director) y lo que prima es el suspense y algunos sustos que, por poco abrumadores, funcionan.
En fin, que me ha gustado. No es ninguna maravilla, ni está a la altura del mejor Carpenter. Pero os diré algo, tampoco está entre lo peor de su cosecha. De hecho... ¡¡ya les gustaría a Craven, Hooper, Argento o Romero llegar a estas alturas de su carrera y realizar un film tan sobrio y, sobre todo, DIGNO!!. Carpenter sigue teniendo clase, y eso mola.
No la veas con expectativas... no esperes una joya, a estas alturas -y dado como funcionan las cosas- sería absurdo e ingenuo por tu parte, limítate a verla como la clásica "peli de miedo" que es y tal vez la disfrutes del mismo modo que yo lo he hecho.