Siempre he dicho que la mejor filmografía de Paul Naschy, no es la adscrita al fantaterror, si no los títulos mas estándar; comedias, melodramas, thrillers… Al igual que siempre he dicho que sus títulos de menor calidad, son los más disfrutables.
Pero si definitivamente me tengo que quedar con algunos títulos, sin que estos sean objeto de mofa, y cuya calidad no pueda ser puesta en entredicho, me quedo con EL HUERTO DEL FRANCES, y tras descubrirla por primera vez, la que nos ocupa.
Un quinqui, tras un atraco colectivo a una joyería, decide escaparse con el botín. Sus compañeros, preparan todo para darle caza y recuperar lo que les pertenece, pero saben que dar con el tipo será difícil. Con todo medido, el quinqui decide pedir trabajo de guardes en una finca en la que viven un potentado impedido en silla de ruedas junto a su mujer y su hija. La atracción que sienten ambas por los músculos del quinqui, serán la trama central de la película.
Adelantados a la moda del cine quinqui, el “equipo Naschy”, con Jacinto Molina escribiendo y Leon Klimovsky dirigiendo, se marcan lo que podíamos llamar la primera película del sub-género “Cine kinki”, aunque no sería una película de “kinkis” al uso, mostrando una imagen del mismo mucho mas sofisticada que la que nos ofreció José Antonio de la Loma, sin descuidar la jerga, que en esta película utilizan, a pesar de ir vestidos mas o menos correctamente. Es más, el unico efecto que se utiliza para darle a Naschy aspecto de Quinquillero, es untarle bien de cremita bronceadora, para que no quepa duda de su procedencia gitana. Obviamente, ninguno de los quinquis de la película, son delincuentes reales.
La película, es un 15% acción un 85% melodrama, pero contra pronostico, nos interesa mas el melodrama que la acción, puesto que resulta muy entretenido el especular sobre si Naschy se follará a algunas de las dos féminas de la película, o si el celoso del marido impedido, acabará con unos cuernos como los del diablo… Véanla si les atormenta la duda.
Bien filmada y con buen ritmo, también es posible que nos encontremos con una de las mejores películas que protagonizó y la mejor interpretación de Paul Naschy, menos contenido de lo que suele estar y con muchos mas registros faciales. A su lado, la indispensable Julia Saly en el papel de la hija del paralítico, y Carmen Sevilla, en el papel de la madre, que se pegará tórridos filetes con el bueno de Molina.
A destacar la interpretación de esta ultima, que lo hace bastante bien y me ha sorprendido, siendo yo desconocedor de su carrera mas allá del “Telecupón”, por lo rancio de su filmografía.
De Klimovsky destacar sus películas MARIHUANA, LA CASA DE LAS CHIVAS con guión del crítico Carlos Pumares, y LA SAGA DE LOS DRACULA, por citar algunas que no le vinculen con Paul Naschy.
Por cierto, el título es una mierda, porque desde el principio, sabemos como va a acabar el quinqui ¿No?