jueves, 26 de julio de 2012

LUNA NEGRA

El mayor problema que le veo yo a "Luna Negra" es que, así de lejos, mirándolo con mentalidad tierno-adolescente, se trata de un film algo engañoso. Es decir, ES engañoso en dos aspectos. Uno, parece una peli sobre un coche futurista capaz de todo... y no, en realidad el auto tiene un papel secundario. Dos, en la caratula se destaca a John Carpenter casi como padre absoluto del film, cuando únicamente es responsable de la idea de base y de (parte de) un guión que, seguramente, otros muchos terminaron retocando y mutando.
Un ladrón roba por encargo una cinta de cassette con un contenido de lo más importante y básico. En la huída, la esconde en el recoveco de un coche futurista que anda cerca aparcado. Cuando intenta recuperarla, otro ladrón (en este caso, ladrona) roba el auto y lo guarda en una guarida secreta comandada por una gran corporación de lo más malvada. El ladrón prota y los inventores del coche unen fuerzas para rescatar cada uno su respectivo botín.
Y sí, al final el super-coche se marca una pirueta entre espectacular y cutre, pero como digo, eso es todo. La mayor parte del metraje reposa aparcado en un garaje. El auténtico clímax de la función (y uno de sus mejores momentos) es la entrada al custodiado edificio, aunque francamente, el modo en que ambas tramas se unen me parece demasiado burdo y chorras... no sé, no me suelo tragar las pelis que parten de meras casualidades, como es el caso. Sin embargo, asumido ello, y otras carencias, la verdad es que "Luna Negra" funciona como leve entretenimiento para Domingo por la tarde. Nada chirría ni molesta, pero tampoco impresiona o deslumbra. Un film sencillito que deja un regusto potable, y a por otra cosa.
El entrañable reparto es muy de su época. Tommy Lee Jones, todavía no tan arrugado, interpreta al ladrón/anti-héroe de la función, y uno de sus mayores atributos es que comete varios errores que afectan al desarrollo de la peli, y eso mola. No es perfecto. Le sigue la guapa/fea Linda Hamilton, casi recién salida de "Terminator". Robert Vaughn en su inmortal papel de malo-dandy. Richard Jaeckel, William Sanderson, Nick Cassavetes y, muy especialmente, Bubba Smith (el "Hightower" de "Loca academia de policía") y Lee Ving, el mítico frontman de la mítica banda punk-de-goma-pero-guay "Fear" que, como era habitual en la época, hace de malo cabrón.
Harley Cokeliss, director, terminaría con sus huesos en la tele, pero antes de "Luna Negra" firmó una cosica titulada "Warlords of the 21st Century", un pseudo-"Mad Max 2" que en España se lanzó con el título "Destructor".
Ta bien.