Esta vieja película Belga semi-amateur del año 1986, salió hace poco en su versión “Director´s cut” que luego os diré en que consiste. El caso es que su condición casi ( y con influencias clarísimas) ultra-gore, me tiraba un poco para atrás, pero sin embargo, también había algo que me atraía de ella, por que era sobre un “Serial Killer”, que como ya sabréis es uno de mis géneros predilectos. Y si la película está basada en un caso real, ya ni os cuento. No es el caso de este LUCKER.
Nada más empezar la peli, y ver esos mugrientos y desagradables 16 mm. en los que está rodada, la forma en que está montada, totalmente amateur con muchos planos y la mayoría repetidos( y gratuitos, síntoma inequívoco del director amateur que monta cuando ha hecho muchos planos y quieren que todos salgan), y la atmosfera que crea Johan Vandewoestijne (he tenido que hacer un corta-pega…) totalmente enferma e insana, ya me cautivaron y me tuvieron delante del televisor la hora y cinco que dura la película (encima una duración perfecta).
Contar, no cuenta nada, solamente vemos a un siniestro tío que acaba de salir del hospital y que tiene a una tía atada en casa, la cual da pie a un flashback que nos remite a tras años atrás, donde vemos que pasó para llegar al punto del comienzo de la película. ¿Y que pasa? Pues básicamente, el tío este se va cargando a la peña de la manera mas grafica posible, y se folla un cadáver que se descompone.
La peli tiene dos influencias claras: MANIAC de William Lusting y NEKROMANTICK de Jörg Buttgereit. De la primera, saca a ese asesino en serie desagradable y sudoroso totalmente deudor del que magistralmente interpretó Joe Spinell, además de todo ese ambiente insano que dan ganas de vomitar y que te deja tocado de estado anímico. Del segundo, toda la parte mas sensacionalista y provocadora, con la escenita en la que antes de penetrar el cadáver descompuesto de una mujer, este le acaricia morbosamente, lamiendo luego, los líquidos que fluyen en el cuerpo a causa del rigor mortis de la palma de su mano. Una escenita, que pone de mal cuerpo al alumno más aventajado.
La mezcla de las dos influencias, es un cocktail explosivo muy eficaz, pero es que además la película pasa en un suspiro, dejando al espectador la mar de satisfecho, aunque este sea reacio a según que tipo de productos.
Que mi entusiasmo no les lleve a equívoco; LUCKER THE NECROPHAGUS en realidad es una mala película, lo que pasa es que a mí este tipo de películas me gustan.
Eso si, supongo que algo tendrá para que me haya gustado.
El “director´s Cut” del que les hablaba antes, es simplemente que el director a considerado que en la primera versión le faltaban algunos planos, y los ha añadido posteriormente, ¿Pero los ha vuelto a rodar en 16 mm? Que va, los ha rodado en video, y los ha colocado ahí a pesar del canteo. Que falta de prejuicios más maravillosa.