martes, 24 de mayo de 2016

MIS FOTOGRUMOS FAVORITOS

Aunque hoy se haya convertido en un panfleto lameculero de las distribuidoras y el cine español, y cada nuevo número parezca más un folletín publicitario que una revista de cine, hace años, muchos años, "Fotogramas" era mi lectura favorita. Mi hermano la compraba puntualmente cada mes, y siempre que la ojeaba encontraba imágenes, reportajes, posters o carátulas (durante el auge del video-club) que me fascinaban y disparaban mi imaginación. Luego, cuando dejó de comprarla, cogí el testigo, aunque para entonces ya no molaba tanto. De hecho, gracias a un corto mío premiado (o mejor, "gracias AL corto mío premiado") gané una suscripción para un año. Por lo visto hubo un error en administración, porque, pasados esos 365 días, seguí recibiéndolo gratis a mi casa durante bastante más tiempo. Lo malo es que, por entonces, "Fotogramas" iba siempre acompañada de esa basura hipnótica en su condición de aborto impreso que era "Fantastic Magazine".
Pero centrémonos en la buena época de "Fotogramas". Llegué a acumular un porrón de ejemplares, pero un día me dio el siroco (coincidiendo con mi primer intento de emancipación) y los tiré TODOS, uno por uno (junto a los "Pantalla 3", "Imágenes de actualidad" y tantas otras). Suerte de mi amigo Vicente que también los tenía y todavía no se había deshecho de ellos. Un día me comentó si quería echarle un ojal a alguno. Y, lógicamente, le pedí aquellos que encajaban entre finales de los 70 e inicios de los 90. Los que tanto devoré siendo chaval.
Tras darles un repasito bien completo, decidí recuperar algunas páginas concretas por considerarlas raras, curiosas, interesantes o por despertar al nostálgico que hay en mí, últimamente demasiado ocupado.
El resultado a tanto desbarajuste justo a continuación, en riguroso desorden...



Joder, ¿cómo olvidar el impacto que supuso para mi visionar este clásico del "trash" made in el temible René Cardona Jr.?.
Lanzada a rebufo de la moda "Indiana Jones", y con una engañosa caratula, como debe ser (El aparente "pseudo-Indy" de la portada no era el verdadero prota, y encima la palmaba antes de acabar la peli), la alquilé pensando que me encontraría pues con una de aventuras pa la familia... no me esperaba para nada ese festín de truculencia "a la italiana", con primeros planos de cangrejos extrayendo ojos y otras burradas.
Años después, ya superado el trauma, me la agencié en VHS y volví a verla... la diferencia es que esta vez únicamente me pareció jodidamente aburrida. Me deshice de ella.



Pues sí, amigos, la aristócrata del cine respetable y sensible, apreciada por críticos sesudos, feministas y demás hipócritas, tiene dos pecadillos de juventud. Uno ya lo conocemos, haber escrito el guión de la costrosa "Morbus (o bon profit)" de Ignasi P. Ferré. La otra, ¡haber sido "chica bond"!... eso sí, al fondo de todo y sin destacar.


Fue ver este cartel y, súbitamente, recuperar una serie de recuerdos que, la verdad, hasta ese momento andaban totalmente perdidos. Yo consumí este producto animado en su día, pero no alquilándolo... ¿por alguna tele autonómica? (¿existían ya entonces?) o, mejor, ¿en el cine?. No descarto esto último. El caso es que de pronto me vino la imagen de ese lobo patillero levantando el puño enfurecido y gritando eso de "¡Me las pagarás!", siempre como colofón de cada aventura. También recuerdo que la calidad de los dibujos era muy parecida a la de las pelis porno animadas de los 70. Te daba la sensación de que en cualquier momento el lobo y el conejo harían las paces por la vía rectal.


¡¡Ay Garci, Garciiiii!!, tuviste un berrinche de niño mal criado, soltaste el escupitajo, este quedó impreso y, hoy, tantos años después, vemos que no eres hombre de palabra. ¡Volviste a rodar!, y no poca cosa. Sería fácil decir aquello de: Seguramente muchos habrían dado una pierna para que esas palabras se cumplieran... pero también seguro que nuestro Víctor no sería uno de ellos, que siempre se ha declarado miembro honorífico de la "causa Garci".
Eso sí, enardece ver cómo no hemos cambiado nada en España. Ya en aquella época éramos unos envidiosos y rabiosos, unos "haters" que los llaman ahora, y vomitábamos nuestra bilis sin miramientos sobre aquellos que tenían éxito. ¡Biba Hezpaña!.



¿Os podéis creer que nunca he visto esta peli?, sin embargo el cartel me gustaba mucho. Y creo que vi el trailer en alguna cinta y también me gustó. Pero la peli no llegó a ser bendecida por mis bonitos ojos. En cualquier caso esta era una de esas imágenes resguardadas en lo más profundo de mi psique, que había olvidado por completo, y que despertó con violencia, como la corrida de un mono, cuando me topé con el cartel durante la sesión de revisaje fotogrumero.


A raíz del éxito de "Loca academia de policía" se ponen de moda las comedias con la palabra loco/loca en el título. Tenemos "Locademia de conductores", "La loca historia de los tres mosqueteros" o "Estos Zorros locos, locos, locos", entre cientos más. Entonces se anuncia el rodaje de una comedia en España con punkis de por medio y la inevitable e irritante "cinefilia respetuosa" de siempre de la mano de un viejo conocido de este blog, Santiago Lapeira. Que no, que dice que el título es una imposición comercial, que lo de "Loca patrulla de verano" es solo para que la peña pague entrada, pero que de homenajes a la moderna comedia yankee ni por el forro, en su lugar el discurso recurrente: cine clásico, carne de Filmoteca y el puto Billy Wilder. Bla, bla, bla.
La parte triste de esta historia no está en el párrafo anterior, sino ante el hecho de que, a pesar de las dolorosas concesiones comerciales que hizo su director, la peli... bueno, ¿alguien sabía de ella?, ¿esto se estrenó? , ¿lo sacaron en vídeo?. No sé... puestos a caer, al menos hazlo con el cuello bien alto, ¿no?.



Joder que puto mal rollo con las películas "mondo".
En fin, ahí va una de las carátulas que más corrieron por los video-clubs y uno de los "mondo" más burracos que recuerdo. Yo, como adolescente adicto a emociones extremas, me comí muchos "mondos" y la verdad es que era un acto sadomasoquista, porque lo pasaba fatal y al terminar me quedaba hecho polvo. Creo que había algo de "oscuro y prohibido" en ello que me alteraba el flujo de adrenalina, no sé. Hoy no sería capaz de comerme otro "mondo", lo reconozco, su solo "look" cerdo y granuloso ya me da mal cuerpo nomás comenzar. Cosas de la edad.



Hubo un tiempo en el que, como a todo jovenzuelo indocumentado, me flipaba John Waters y se me caía la baba ante un anuncio como este que ven aquí. ¡¡Que bizarrada!!. Y alquilé "Pink Flamingos", y flipé, e invité a mis amigos a verla, y fliparon, y la copié de vídeo a vídeo, y la imité con mi cámara de single-8. Hasta que un día descubrí las dos dolorosas verdades con respecto a John Waters que hoy todavía muchos panolis desconocen: UNO- Que todo su legado estético formal se lo mangó a los Hermanos Kuchar. DOS- Que era y es un puto vendido.
¡Que le jodan!.




De esta no voy a hablar porque ya lo hizo Víctor en su día. Y de hecho, me mandó la peli, pero no llegué a verla, ahí la tengo, en el disco duro esperando a que me decida. Y como en el caso de "Me las pagarás" o "Johnny Peligroso", fue reencontrarme con su extraño y crudo cartel y recuperar todas las inquietantes y desconcertantes sensaciones que obtuve la primera vez que, siendo chinorri, esta imagen casi de peli porno gayer se plantó ante mí desde las páginas de "Fotogramas".



Lo flipante de este anuncio a doble página no son las pelis que promociona, sino... ¡¡lo genialmente cutre de su aspecto!!, ahí hecho a mano por un retrasado, con Letraset pegado toscamente.... en fin, lo opuesto a los mandatos del diseño gráfico. Sin embargo, ahí lo tienen, dos páginas en el "Fotogramas", ¡qué maravilla!, ¡¡hay que ver cómo han cambiado los tiempos, cojones!!.



En una ocasión, hace ahora unos pocos años, editamos un fanzine apadrinado por este blog que incluía un artículo la mar de completo y entretenido sobre la trayectoria del cineasta español Manuel Summers. Bien, el firmante fue Víctor, verdadero interesado en el sujeto. No es ese mi caso. Sin embargo, por nostalgia, me ha hecho gracia recuperar acá para ustedes la publi de lo que fue un auténtico taquillazo (y fenómeno) en su época, "To er mundo e... güeno", la famosa película a base de bromas pesadas mediante cámara oculta. Naturalmente, siendo como era Summers humorista gráfico, la publi no podía limitarse al cartel, tenía que ir acompañada de un simpático dibujillo del interfecto.



Hace unas imágenes más arriba hablaba del "boom" de las comedias con la palabra loco en el título. Pues bien, ¡ahí va otra! y esta con más razón que nunca ya que el director, Hugh Wilson, es el mismo que firmó la madre de todas, la loca academia de maderos.
Lo curioso de "Esos locos cuatreros", aparte de lo mentado y del protagonismo de Tom Berenger, es que se parió en co-producción con España. Y recuerdo que cuando me enteré de eso en su época, ¡se me quitaron las ganas de verla!. Era como si, al ser medio Española, asumiera que el proyecto perdía categoría. ¡Chico listo era ya entonces!. Y la verdad es que, a día de hoy, aún no la he consumido.



¡¡Y mira que en “Fotogramas” había páginas y páginas dedicadas a anunciar lanzamientos videográficos!!, ¿por qué, pues, centrarse en esta?. Lo desconozco. Llámenlo instinto. Fue verla y no dudar un segundo en escanearla. Tal vez por la presencia de “Los albóndigas en remojo”, una de mis “comedias teen” favoritas. Tal vez por el cartel de “Mr.Boo”, que siempre me pareció fascinante. O tal vez porque por segunda vez en este post aparece la peli española “nuevaolera” “Un par de huevos”. No lo sé. Pero en cualquier caso, ¡¿a que es  maravilloso?!.

Si tal apreciación se expande como una enfermedad venérea al resto de imágenes, significa que esta entrada les ha gustado. Y también significa que algún día, en el futuro, habrá otra. Con más imágenes de “Fotogramas” o de alguna otra revista cinematográfica de la época. La cuestión es nadar en nostalgia un ratito y recordar lo que, indudablemente, fueron momentos no mejores, pero sí más inocentes y, por ende, mágicos.