lunes, 28 de noviembre de 2011

TROPA DE ELITE 2

Del primer "Tropa de élite" no me esperaba nada. No tenía ni puta idea de qué iba a ver. Y claro, me llevé una grata sorpresa tratándose como se trata de un film realmente logrado con una -agradecida- puya a progres, universitarios y otros entes de mal vivir. Su éxito (su merecido éxito, añado) generó una segunda parte que, lejos de poder considerarse oportunista, rémora de la peli madre o "más de lo mismo", tira por derroteros un tanto distintos. Claro, de esta sí esperaba ya algo... y, bueno, digamos que José Padilha, director, no me lo dio. O no en las cantidades exigidas por mi psique. Y me desconcertó un poco... pero solo un poco, ya que, sin llegar al nivelón de la primera, "Tropa de élite 2" es una buena película.
En esta olvidaros del nervio y el brío de "Tropa de élite 1". Aquí hay violencia y escenas de tiroteros magníficamente rodadas, sí... pero menos. Digamos que para su secuela, Padilha prefiere apostar por un tono algo más calmado y más versado en diálogos que en acción. Más como el cine denuncia de los 70, cuya buena parte de el se desarrolla entre paredes a base de darle al pico. Así pues, tenemos al prota de la primera, el carismático Capitán Nascimiento, que después de cagarla en el asalto a una cárcel amotinada, pero gracias al fervor de las clases favorecidas, es ascendido a subsecretario de inteligencia. Se acabaron las armas y la adrenalina, hola traje, hola despacho, hola barriga.
De por medio, nos narran el ascenso al poder de un grupo de personas (policía, político, presentador televisivo... creo que basado en uno real) muy corruptas y que no tienen problema alguno a la hora de mentir, engañar, extorsionar y, claro, matar. Hay que decir que uno de los personajes más molones de "Tropa de élite 1" aparece aquí, pero acaba acribillado ante nuestros incrédulos ojos (u olhos). La cosa se desmadra tanto que el hijo de Nascimiento acaba ingresado en el hospital a causa de un balazo. ¡¡HUY!!, ¡¡huy, lo que han hecho!!. Más motivado que nunca, nuestro protagonista decidirá acabar de una vez por todas con la corrupción. Desafortunadamente, no lo hace al estilo Bronson/Eastwood... pero bueno, alguna buena yoya sí que cae.
Lo dicho, viendo "Tropa de élite 2" uno echa un poco en falta el brío y la tensión de la peli madre... pero bueno, tampoco te aburres, sigues la historia con interés, esta hace gala de buen ritmo y, en fin, que en el fondo agradeces no ver más de lo mismo. Aprobado.