viernes, 30 de diciembre de 2011

EL SER

William Osco, o Bill Osco, o Mr.Osco, es un personaje muy curioso e interesante cuya principal -pero no única- tarea en esto del séptimo arte era producir. A él debemos una de las primeras películas porno con argumento, "Mona: The Virgin Nymph" (que tuve ocasión de ver gracias a una colección editada en España y sorprendía lo tosca, cutre y chapucera que era... en el buen sentido), la famosa y divertida "Las aventuras de Flesh Gordon", seguida de la menos lograda pero curiosa "Alicia en el país de las pornomaravillas". Cansado de sexo, a inicios de los 80 el amigo Bill lo intenta en el exploitation, y lo hace de la mano de su -por entonces- mujer Jackie Kong en funciones de directora. De esta asociación nacen cuatro films, "El Ser", la descerebrada "Patrulla de noche" (que quiero revisar, en su época me molaba mucho), la más famosa y lograda del pack, "Blood Diner/Fonda Sangrienta" y la peor, "Loca academia de maleantes". Desde entonces, no se ha vuelto a saber nada de la señora Kong, y William Osco anduvo activo hasta el año 2008.
"El Ser" me pilló en pleno vendaval Kong. Lo había flipado mucho con "Fonda Sangrienta" y "Patrulla de noche" por lo que, en un intento de mero completismo, la alquilé ilusionado, llevándome la consiguiente hostia padre. La peli de marras (que por cierto, era el debut en la dirección de la muchacha) resultó ser una chapa insufrible. De hecho, me quedé totalmente roque durante su visionado y la di por imposible.
Pasados un buen porrón de años, decidí volver a verla ayer noche y aunque esta vez no me dormí, comprendo perfectamente por qué me decepcionó tanto en su momento. A ver, la trama es mínima y totalmente sobada... un monstruo, resultado de alguna extraña mutación propiciada por unos desechos radioactivos, causa el terror en un pueblo. Ni más, ni menos. Un detective se encargará de pararle los pies entre bostezo y bostezo. Sí, hay algo de gore, sí, hay unas pocas tetillas, sí, hay humor voluntario (aunque no especialmente inspirado), sí, el monstruo es un señor disfrazado bastante pobremente.... etc, etc... pero la ausencia total de garra o de brío, hacen que el visionado solo pueda efectuarse si antes te has tatuado la "p" de paciencia entre ceja y ceja.
Y como suele pasar en esto del cine de bajo presupuesto, lo más interesante está detrás de las cámaras. A la presencia de Bill Osco como productor, debemos añadir su protagonismo absoluto, escudado tras el alias de Rexx Coltrane. Por cierto, el colega aprovecha para vengarse un poco de todos esos "vigilantes de la moral" que, supongo, le darían la murga en su época de pornógrafo, haciéndolos aparecer en "El Ser" como unos hipócritas y como, obvio, carne de monstruo. Pero la cosa no termina ahí, contamos también con la participación de tres actores en plena decadencia, José Ferrer, Dorothy Malone y Martin Landau. Este último resulta especialmente gracioso, ya que en un momento dado se enfrenta al bicho del título, un muñeco inanimado de dudosa factura. Años después repetiría la hazaña, aunque en esa ocasión con intenciones paródicas, en la maravillosa "Ed Wood" de Tim Burton, donde Landau hizo una genial recreación de Bela Lugosi (que le valió el Oscar), incluida la titánica lucha con un pulpo de goma para el film "Bride of the monster". Ya entonces, el actor afirmaba entender perfectamente el caso Lugosi, en referencia a ese descenso a los infiernos del zetismo que él mismo había padecido (¿estaría pensando en "El Ser" cuando dijo eso?).
Pero dejando todas estas paparruchas fricosas a un lado (y sin contar la estupendamente falsa y cutre caratula Española), "El Ser" es un tochito de mucho cuidado que no recomiendo más que a curiosos y fans muy fans dispuestos a todo con tal de ver monstruos y un poco de sangre.