viernes, 31 de octubre de 2008

LOCA ACADEMIA DE POLICÍA 3: DE VUELTA A LA ESCUELA

La tercera entrega de la saga es muy rara, y parece que se pasan el hilo argumental de las dos anteriores por el forro de los cojones. En esta, de golpe y porrazo, absolutamente todos han ascendido, los otrora cadetes son ahora sargentos instructores, y sin saber por qué, el Teniente Mauser es comandante a cargo de una academia de policía, a la que, hasta ahora, no pertenecía y rival directo del comandante Lassard... como si hubiera pasado algo entre medias que no sabemos. Muy raro.
La academia recoge una nueva promoción, justo en el momento en el que la alcaldesa decide cerrar una de las dos. Un comité evaluador decidirá cual se mantendrá a flote. En esta nueva promoción se incorporan dos nuevos cadetes que ya aparecían en la segunda parte, pero aun no eran policias: Zed (Bobcat Goldthwait) el líder de la banda criminal aquí ingresa en el cuerpo (¿no se supone que debería estar en la cárcel?, ¿que con esos antecedentes, sería imposible ingresar? Es precisamente este sentido de la anarquía, la que hace que esta saga sea tan particular y maravillosa), al igual que Sweetchuck (Tim Kazurinsky) el propietario de la tienda de lámparas, que nuestros polis destrozan en el segundo film. Dos de los personajes a posteriori más queridos por el publico. También se recupera la presencia de la (ahora) Teniente Callahan.
La película es bastante superior a su predecesora, está a la altura de la primera, eso si, ya tan alocada como recordamos, plagada de gags, esta vez bastante efectivos (el Comandante Lassard matando una mosca en la cara de una señora... ¡mítico!) y con una estructura que ya no cambiaría en el resto de la saga, a pesar de ese giro argumentalmque, al menos yo, no logro comprender, aunque a fin y al cabo, ¿qué mas da? La cosa sigue funcionando a la perfección.
Jerry Paris se encargaría de la dirección 
por segunda y ultima vez, pues poco después del rodaje fallecería dejándonos dos pelis de la franquicia y una tonelada de series y telefilmes.

LOCA ACADEMIA DE POLICÍA 2 : SU PRIMERA MISIÓN

Dentro de la franquicia, y en un contexto siempre positivo, hay pelis que son más divertidas y otras que lo son menos. Esta segunda es bastante mas floja si la comparamos con la primera, pero hay que tener en cuenta que esta es una saga que ha ido en declive año tras año.
Una vez estrenada la primera, el productor Paul Marlansky ya tenia claro cuales eran los personajes favoritos del público, así que eliminó al resto, aunque mas tarde recuperaría alguno.
En el distrito ha surgido una banda de delincuentes que la policía no puede dominar, así que el capitán Lassard pide ayuda a su hermano el Comandante para poner fin a esta oleada de crímenes. Le manda a los policías que, más o menos, ya se mantendrán a lo largo de la saga.
Pero en la comisaría siempre tiene que haber lameculos, y ahí es donde aparecen el Teniente Mauser (Art Metrano) y el sargento Proctor (Lance Kinsey) a los que se les ha prometido que si el Capitán Lassard falla en su intento, harán capitán 
a Mauser, así que este pondrá todo su empeño en que los protagonistas la pifien.
Por otro lado tenemos la incorporación de uno de los personajes mas entrañables de la franquicia, Zed, interpretado por Bobcat Goldthwait, un famoso personaje televisivo conocido por hablar siempre gritando y popular también por doblar toda suerte de dibujos animados. Zed es el líder de la banda criminal, que entre grito y grito, destrozo y destrozo, aun le queda tiempo para ver películas de Shirley Temple.
"Loca academia de policía 2" es bastante mas sosa que su antecesora, pero también gana con los gags, que esta vez son mas brutos y cómicos aun si cabe.
Una vez mas, la función se la llevan los personajes negativos (Mauser y Proctor) que protagonizan los momentos más divertidos y esto aplíquenlo también al resto de las secuelas.
El cambio de guionistas y de director se nota. Jerry Paris, de extensa filmografía televisiva es quien lleva las riendas de esta película que, por supuesto, fue un éxito de taquilla.

jueves, 30 de octubre de 2008

LOCA ACADEMIA DE POLICÍA

Aunque reivindico "Tropic Thunder" como lo mejor de lo mejor, desde luego como las comedias de los 80 no hay nada. Y una de las sagas que mas me marcaron en esa época fue la de "Loca academia de policía". Yo, por supuesto, las tengo todas en mi dvdteca. Con la excusa de reseñarlas aquí, he decidido ver la saga completa y comentarla titulo tras titulo. Sinceramente pensaban que habían envejecido muy mal y que tenían muy poca gracia.
Anoche, sin embargo, disfruté enormemente con la primera parte.
El argumento es por todos conocido: Un nuevo programa impuesto por la alcaldesa permite que la academia de policía admita en sus filas todo tipo de personas, sin importar la raza, religión, sexo o condición física del cadete, lo que al jefe de policía y a algunos lameculos, les parece una idea horrorosa y no permitirán que esta iniciativa llegue a buen puerto. Carey Mahoney es un irresponsable que, tras haber cometido un par de faltas leves, es arrestado y el castigo al que es sometido no es ir a prisión, sino ingresar en la  
academia de policía con el fin de que reciba algo de disciplina. Esto le viene de perlas para hacer gamberradas, ya que, a fin de cuentas, lo que quiere es largarse.
Lo atractivo de estas películas, mas allá de sus argumentos o sus (en la época muy efectivos, hoy no tanto) gags, es la personalidad tremendamente marcada de los inútiles que ingresan en el cuerpo, algo muy de aquel periodo y que ya pasaba también en otro clásico como es "La revancha de los novatos". El protagonista absoluto es Mahoney, interpretado por Steve Guttenberg, secundado por el enorme Moses Hightower, (Bubba Smith), el especialista en ruiditos Larvelle Jones (Michael Winslow, que también dio voz a los "Gremlins"), el flipado de las armas Eugene Tackleberry (David Graff) y la atontada de la voz de pito Laverne Hooks (Marion Ramsey), interpretando todos ellos a los cadetes, que irían ascendiendo en posteriores secuelas. Hay más cadetes, como el latin lover Jorge Martín, o el gorderas de Leslie Barbara, que tenían bastante importancia en esta primera entrega, pero los borraron de un plumazo en la segunda. Otra constante de la saga es que los policías aparecen y desaparecen según la película, pero estos que he nombrado son mas o menos los que se mantienen fijos, aunque en la ultima entrega de todos estos quedan tres. No hay que olvidarse de los "policías genuinos" -por así llamarlos- de la peli que son quienes soportan la mayoría de los gags divertidos y, como ocurre aquí, los auténticos protagonistas. La Sargento Callahan (Leslie Eastbrook, una habitual de las pelis de Rob Zombie) y El Teniente Tadeo Harrys (G.W. Bailey, que se prodiga como el mejor personaje de la saga, además del mejor actor de cuantos aparecen) y por supuesto, el bueno del Comandante Lassard (George Gaynes). La mayoría de estos actores poco más hicieron a parte de esta saga, y es que se encasillaron mas que Bela Lugosi y, salvo telefilmes, en pocas cosas mas hemos podido verles.
La película no es especialmente graciosa, los chistes son muy tontos, pero lo bueno es que está muy entretenida, y la vemos sin pestañear, pasándolo de puta madre.
Recuerdo cuando se estrenó en su momento. Fue todo un fenómeno social, la gente acudía en masas al cine, las colas eran interminables. Mi padre se encargó dos veces de llevarme pero nunca pude, porque las localidades siempre estaban agotadas. Tardé un año o así en poder verla, porque me pasó una cosa muy curiosa: Al no tener entradas, mi padre y yo nos fuimos al videoclub y para nuestra sorpresa la localizamos en sus estanterías, algo improbable teniendo en cuenta que en esos momentos estaba en las salas. Mi padre debió pensar que se trataba de una copia pirata, así que la alquiló y por la tarde estuvimos viéndola toda la familia. Lo gracioso de todo esto es que no se trataba de "Loca academia de policía". La caratula era muy parecida, prácticamente idéntica, aunque si te fijabas bien, veías una pequeña palabra escrita encima de la palabra “loca”. Ponía “otra”. Así que vivimos engañados 
durante un año pensando que habíamos visto "Loca academia de policía" cuando, en realidad, lo que habíamos visto era "Otra loca academia de policía", película italiana anterior a aquella titulada "Il carabinieri" que, como era habitual en la época, habían sacado en vídeo a la vez que se estrenaba la original, con prácticamente el mismo titulo, para que picasen los incautos...¡y vaya si picamos! De hecho, descubrimos el engaño cuando la de verdad salió en vídeo y la alquilamos. Lo malo de todo esto es que yo, infante como era, me decepcioné terriblemente, ya que me había gustado mucho mas la Italiana, que por cierto está inencontrable. La verdad es que me gustaría verla de nuevo, pues hace mas de 20 años que no lo hago. En fin una anécdota de la que me he acordado y que venía a cuento contar.
Pues eso, que la primera parte de la saga la dirigió Hugh Wilson, de escueta filmografía.
Cojonuda, esta noche me zampo la segunda, y les sigo diciendo por aquí.

DRACULAS SETENTEROS (DRACULA 79 + LOS RITOS SATÁNICOS DE DRACULA)

Desde que tengo uso de razón, he vivido convencido de que la versión de "Dracula" rodada a finales de los setenta por John Badham tenía que ser la peor de todas. Y sin embargo, tras el visionado que me metí ayer noche, casi que he cambiado de opinión de modo radical. Probablemente sea la mejor.
En 1979 nadie parecía estar muy interesado en los monstruos clásicos o el romanticismo gótico. A pesar de ello, alguien decidió arriesgarse con esta peliculilla que, guste o no, acaba haciendo gala de algunos tics muy de la época, tanto a nivel estético (el aspecto que gasta el vampiro. Hay una secuencia en la que se pasea con la camisa abierta y solo falta un poco de "disco music" para ambientar) como visual (el look granuloso y oscuro, y arrebatos de violencia tirando a cruda, como el desgarramiento de una garganta en manos de un licántropo o la dura imagen de un bebé asesinado por un vampiro). Y es que, además, la peli tiene una atmósfera muy lograda, algún susto, ideas cojonudas (cómo Dracula se cuela en la habitación de Mina... ¿o era Lucy?), los decorados y la ambientación están extremadamente bien hechas (en especial el castillo habitado por el no-muerto) y en sendos momentos resulta francamente inquietante (cuando Van Helsing entra en la mina que hay bajo el cementerio dispuesto a acabar con su hija, ahora una chupasangre de efectivo y espeluznante aspecto).
Mención aparte merece el gran Frank Langella como Dracula. Las fotos hacían suponer que no existía actor menos adecuado para el rol que él. Sin embargo, la clava. Compone un Drácula diferente y muy carismático, tope de educado y sociable (la verdad es que casi acabas más de su lado que de los buenos) a la par que maligno. Digamos que cae entre la fiereza de Christopher Lee y la ñoñería de Gary Oldman.
La historia no difiere en exceso de otras adaptaciones del libro de Bram Stoker (por lo visto, está más inspirada en la obra teatral con la que debutó Bela Lugosi), la única diferencia es que está narrada con más brío y efectividad.
Seis años antes, Hammer Films se sacó de la manga "Los ritos satánicos de Drácula", con el tándem Lee & Cushing como absolutos protas. Decir que por esa época la factoría británica de terrores ya andaba algo perdida, pero para mi eso es casi una ventaja, puesto que he descubierto que mis films favoritos de su catálogo son los que la crítica considera peores (como éste o la de los vampiros de oro). Si el anterior "Dracula" era eminentemente setentero, este es ya la repanocha. Desde la inconfundible música con regusto funky con la que arranca el film, hasta el patillero look del 90% del reparto. Añádale a la mezcla un remalazo jamesbondiano (con organizaciones secretas de espías high-tech o planes para acabar con la humanidad entera), la obsesión por movidas satánicas (también muy de moda entonces) y la delirante idea de un Dracula empresario (sin duda, la personificación del mal).
Planteada como una secuela de "Dracula 73" (ambas comparten director), el film narra las malvadas intenciones del vampiro de crear un virus ultra-potente capaz de arrasar con el planeta entero (y cuyo fin es, simplemente, ¡quedarse sin alimento y morir!) y de cómo el descendiente número mil de Van Helsing (el gran Peter Cushing), aliado con las fuerzas de la ley, intenta sabotearlo.
El resultado final es cuanto menos bastante entretenido.

miércoles, 29 de octubre de 2008

DIMPLES

Tomando el título de una vieja película de Shirley Temple, a la que además se hace referencia constante, nos topamos con una extraño slasher que, al menos, sirve para pasar el ratillo.
Un joven se va con su grupo de amigos (llenos de estereotipos, como debe ser) a donde cristo perdió el gorro para rodar una película amateur de terror. A mitad de camino, llegan a una descuidada estación de servicio y desde allí ven como un tipo con aspecto de retardado se está masturbando mirando a una de las chicas. Lejos de asustarse o marcharse de allí, a uno de los chavales no se le ocurre otra cosa que apedrear la casa y esperar a que salga el retardado para darle una paliza.
Una vez llegados a este punto, la cosa se pone tremendamente confusa, y salvo que los chavales son ajusticiados con métodos no del todo sorprendentes, cuesta entender lo que ocurre (o es que, para solaz de algún idiota, soy demasiado tonto), pero ahí sale de todo, desde un caserón con inquietante niña secuestrada por un médico, hasta un monstruo que da bastante yuyu y se revela como autor de varios de los acuchillamientos.
El director es Dusty De Pree, uno de tantos que en los últimos años hacen una o dos pelis para el mercado del vídeo, y luego desaparecen de la faz de la tierra.

lunes, 27 de octubre de 2008

EL CINE DE AVENTURAS

Visité la biblioteca de mi barrio en busca de lectura cinéfaga. Aquello que, ojeando los estantes, me encuentro con un libro titulado "El cine de aventuras", asín como suena, no demasiado gordo y con imágenes más que sugerentes en la portada: "Terminator 2", "Tiburón", "En busca del arca perdida" y el "King Kong" original. Mola. Me lo pillo y me lo llevo.
Esa misma tarde comencé con la lectura. La introducción no pudo ser más poco prometedora: El autor, Luis Pérez Bastías, advierte que siente más simpatía por el cine de aventuras clásico que por el moderno, es decir, la década de los 80 para acá. ¡Uuuuh!, mal rollo. Y cuando da motivos por esa antipatía, confiesa que se debe a su falta de realismo. ¡¡¿¿Falta de realismo??!!... claro, ahí chocamos del todo, porque ya conocéis me teoría al respecto: si quieres ver realismo, vete a un puto parque a mirar cómo pasea la peña. Teniendo eso en cuenta, no solo se prometía una lectura poco estimulante, sino engañosa, ¡¿entonces a santo de qué ilustrar la portada con films de Spielberg y James Cameron?!, ¡¡que me devuelvan el dinero!!. Suerte que no pagué por leerlo... decidí darle una oportunidad, aunque confieso que tardé un huevo en ponerme (fue la fecha de devolución la que me empujó a hacer el esfuerzo).
Vale, "El cine de aventuras" se lee rápido, el autor se centra en varios géneros y, más específicamente, en las ocasiones en los que estos entran de lleno en la aventura pura: edad media, espadachines, monstruos, catástrofes, selva, desierto, piratas, peplum, ciencia ficción, circo, espías y western. La lista de títulos que ofrece es inmensa, muchas veces de carrerilla y solo se detiene ante lo que considera buenas películas. Lo curioso (y positivo) del caso es que ni todos los films antiguos los considera buenos.. ni todos los modernos malos. Hay que decir en su favor que salva "Terminator" (la uno), "Tiburón" o "Batman Returns". Sin embargo, y tal como prometía en la intro, pone punto y final con una notable reprimenda casi exclusivamente a la saga icónica del cine de aventuras moderno: Indiana Jones.
Sigo sin entender la puta obsesión de Pérez Bastías con el jodido realismo y, lo que es peor, con que los protas han de sufrir, pasarlo mal, estar deprimidos y no ser como superhéroes. ¡¿Pero por qué?!.
Hay que señalar que el libro está repletísimo de cagadas inmensas. Por un lado datos (como decir que Arnold Schwarzenegger interpreta a Batman en el film de la serie en el que hacía de Mr. Freeze u otorgar la dirección de "El hombre de la máscara de hierro" a su prota, Leonardo Di Caprio) y, por otro, títulos y nombres mal escritos, que quizás no sean cosa del autor (igual fue pasado a limpio por otro que la cagó), pero quedan muy feos. Además, toda la parte final centrada en los 80 y demás es muy extraña, pues se reseñan muchas "series B y Z", y se olvidan films más conocidos y respetados... ¿por qué citar "Critters 4" pero no "Critters 1"?, raro, raro. Es como si Bastías hubiese ido al video-club de la esquina, armado con un bloc y un boli, limitándose a apuntar títulos arbitrariamente.

LA CRISIS CARNÍVORA

Me apuesto un huevo a que muchos de los que os pasáis por aquí sois asiduos de las andanzas de un personaje creado en "Flash" por un tipo llamado Niko y que goza de una gran popularidad por la red: "Cálico Electrónico", del que incluso se han editado DVDs.
Bien, "La crisis carnívora" no viene dirigida por Niko, pero sí es el responsable de la animación y se vende a sí misma como el primer largometraje parido en "Flash". El caso es que a mi la animación me carga y en concreto ese "
Cálico Electrónico" me repugna, lo encuentro insoportable. Con estos prejuicios, las malas críticas que he leído y la intención de cargarme con muy mala leche "La crisis carnívora", me la puse anoche. Pero, contra todo pronostico, me ha encantado.
Cansados de tanta violencia, los animales hacen un pacto según el cual no se comerán los unos a los otros. Para ello, deciden alimentarse a base de vegetales, siempre y cuando los herbívoros trabajen para los carnívoros. Todos acceden, excepto los carroñeros, que se las ven y se las desean para llevarse algo a la boca. En esto que una apestosa hiena decide ir al cementerio a desenterrar cadáveres para comer (una de las reglas que ningún animal debe infringir) y descubre que los cuerpos ya han sido devorados por los felinos. Y, a partir de ahí, todo el follón.
Soy un 
absoluto fan de esta peli. Para empezar, es una osadía atreverse con un largo para cine en "Flash", pero los creadores salen del paso con un sobresaliente. Tiene de todo, guerra, humor y mucha, mucha violencia. Incluye un par de escenitas gore muy resultonas e inesperadas, y si, además, le añadimos que a las primeras de cambio aprovechan para colar “hijo de puta” en los diálogos, la diversión está asegurada. Dicen “hijo de puta” bastantes más veces de las que es habitual en una película.
El doblaje está a cargo de algunas estrellas de nuestro país, pero salvo José Coronado, que canta un huevo y además hace fatal de personaje animado, lo cierto es que todos los demás (Alex Angulo, Pablo Carbonell, Pedro Reyes, Carlos Sobera…) están irreconocibles y bastante bien, en especial Quique San Francisco, que da voz a la hiena, el personaje que más tacos dice, y lo borda.
En definitiva, que me ha gustado mucho y la recomiendo encarecidamente.
Esto estuvo en cines tan solo una semana. A lo sumo dos, y precedida de unas críticas espantosas. No lo entiendo, para una vez que se hace algo divertido en este país….

JACK BROOKS, MONSTER SLAYER

Muchas veces, al leer algo sobre una peli a uno se le ponen los dientes largos y se crea unas expectativas. Luego, rara vez, se ven cumplidas. "Jack Brooks, Monster Slayer" no es (por si acaso pensaban lo contrario) una excepción. Todo lo que había leído sobre ella era bueno. Y se puede ver, pero no es para tanto.
El fontanero Jack Brooks tiene descontrolados ataques de ira por culpa de un trauma. De pequeño, vio como su familia era devorada por un monstruo. Además de darle a las tuberías, asiste a las clases de un profesor, magistralmente interpretado por Robert Englund. Con el fin de hacerle la pelota, un día Jack acude a su casa para desatascarle las tuberías. Hurgando por allí encuentra una caja con restos dentro, entre ellos un corazón palpitante. Pronto el profesor es poseído por un demonio y empieza el festival de casquería.
A ver, ya digo que está sobrevalorada. Aunque, verdaderamente, la única pega que le pongo es que hasta que llega todo lo divertido, pasa una hora larga. No nos aburrimos, pero nos agotamos de tanto esperar.
El rey de la función es Robert Englund, que hace de la sobreactuación un arte. El personaje de Jack Brooks está también muy divertido, y cuando se encuentra con todo el percal (estudiantes poseídos por demonios) ¿sabéis como se enfrenta a ellos? ¡A base de hostias! Sí señor, se los va cargando a puñetazos y eso está muy bien. Al menos es original.
Lo que está claro es que con este Jack Brooks intentar sacarse una franquicia del bolsillo, algo así como un sucesor de "Ash Williams" (de "Evil Dead"). Y aunque está simpático, lógicamente no alcanza al gran Bruce Campbell.
El dire es un canadiense llamado Jon Knautz.

domingo, 26 de octubre de 2008

LA GUARIDA DEL GUSANO BLANCO

El día que nos enteramos de que el respetado, excesivo y surrealista cineasta británico Ken Russell se pasaba al terror estándar, todos nos quedamos patidifusos. El resultado, "La guarida del gusano blanco" (según un relato de Bram Stoker, adaptado -dicen- muy libremente), es desde luego lo más "normal" del realizador (junto a "Viaje alucinante al fondo de la mente"), pero claro, hablando de Russell ese término no acaba de hacerle verdadera justicia.
Un arqueólogo localiza el esqueleto de un antiguo gusano gigante al que rendían culto una estirpe de medio vampiros, medio serpiente. Una de estas, de atractivo aspecto, llega al pueblo dispu
esta a revivir a la criatura, aunque para ello tenga que luchar contra el arqueólogo y su panda de colegas, entre ellos un joven, y aún no tan famoso, Hugh Grant.
"La guarida del gusano blanco" se vendió como una "comedia de terror". Es bien cierto que el humor campa a sus anchas alegremente por toda la peli, pero también que este queda bien lejos de, por ejemplo, el estilo americano. Vamos, que las gracias son muy "british", y a veces no las pillas, o no sabes si se están riendo de ti o es otra de las paranoias del puto loco del director (como cuando "encantan" a los vampi-serpientes mediante música y les hacen bailotear). Coñas a un lado, estamos ante un film muy entretenido, que se sigue con interés, se disfruta y cruza ante tus ojos en un pis pas. Visualmente tiene momentos realmente potentes, como las secuencias de alucinaciones provocadas por el veneno que lanza la vampira/serpiente (no se pueden explicar, hay que verlas), la pesadilla de Hugh Grant, inquietante en su absurdez y el aspecto de los monstruos. El que espere sangre, tendrá sus justas pero satisfactorias dosis. Hay algún susto, momentos sacrílegos (¡ese Russell!) y mucha perversidad, la villana se pasa media peli en pelotas, y la secuencia en la que seduce a un joven boy scout es impagable.
A la fiesta hay que añadir una muy adecuada canción de rock-folk estilo "The Pogues".
Altamente recomendable.

sábado, 25 de octubre de 2008

EL MAGNIFICO CARNICERO

A los aficionados al cine de kung fu les sonará (o, si son muy aficionados, lo conocerán a fondo) el nombre del Maestro Dr. Wong Feing Hung. Y es que en China este hombre, que según mis fuentes existió verdaderamente, es toda una leyenda. El mejor maestro de Kung fu de la historia.
Su presencia es constante en el cine de Kung fu, ya sea en el serio o en mis adoradas comedias Chinorras, ya sea como protagonista o secundario. Eso si, a la hora de interpretarlo, a los Chinos les ha dado igual quien lo hiciese. Claro que la cosa va por etapas. Al Wong Feing Hung adolescente le dio vida Jackie Chan en la obra maestra "El mono borracho en el ojo del tigre", y años más tarde lo interpretó ya adulto en la secuela (oficialmente, sería la tercera parte, pues todos sabemos que la segunda parte real de "El mono borracho en el ojo del tigre" es "La danza de la pantera borracha") "La leyenda del luchador borracho". Pero quien más veces lo ha interpretado de adulto ha sido Jet Li, en la trilogía de "Érase una vez en China" y en algún titulo más que se me escapa. Esporádicamente, el maestro Hung, ha aparecido incluso en alguna producción americana, como la mas o menos reciente "La vuelta al mundo en 80 días", donde le daba vida el mejor luchador de todos los tiempos, el increíble Sammo Hung. Precisamente, la película que paso a reseñar ahora la protagoniza también Sammo Hung, pero no hace de Wong Feing Hung, sino de uno de sus alumnos.
Si he soltado este rollo sobre el maestro Hung, es porque en esta película también aparece, esta vez como anciano e interpretado por el veterano Tak-Hing Kuan.
Dirigida por el mejor director de películas de Chinos Yuen Woo Ping (por algo años después le contratarían en los USA para crear las coreografías de la trilogía de "Matrix"), "El magnífico carnicero" es una de esas comedias de finales de los setenta, que los chinos producían como churros y que tan efectivas resultaban mundialmente, tanto en taquilla como en diversión.
El carnicero Wing (Sammo Hung), da una paliza por error a un empleado del Maestro Ko, así que este va a pedirle explicaciones al maestro del carnicero, el ya tan mentado Wong Feing Hung. El hijo del Maestro Ko es un macarra y secuestra a la mujer del hermano del carnicero, fingiendo ser este último para que su hermano lo considere culpable (un lío.. muy propio de la época y curiosamente de los guiones de Ozores, ya sabéis, las comedias de enredo). Entre tanto, aparece en el pueblo un maestro borracho (rol que siempre solía interpretar el mítico Yuen Hsiao Tien, pero que en 1979, me parece, ya había fallecido) que resuelve los problemas. El hijo del maestro Ko, quien no se cansa de hacer el malvado, por x cuestiones acaba matando a su propia hermanastra, cargándole el muerto al carnicero Wing. Este, dispuesto a vengarse, acaba siendo entrenado por el maestro borracho.
Un poco mas de lo mismo de siempre (bajada de carteles incluida… los que han mamado mucho kung fu, ya saben) pero igual de entretenido o más de lo habitual. Y es que si se juntan en la dirección Yuen Woo Ping y se curra las coreografías junto con el propio Sammo Hung, el producto resultante tiene que ser cojonudo.
Pero me ha llamado la atención que esta película cuenta con una dirección superior a lo que era común en la época, tiene más planos y está todo mejor medido, se utiliza menos el zoom y las coreografías son excelentes. Además, es una de esas pelis, también muy propias de los Chinos, en las que la cosa empieza como una agradable comedia para, según avanza la trama y las tonterías, convertirse en un dramón desgarrador con la venganza como leitmotif, cosa esta que ya pasaba en títulos tan destacados como "La mantis maldita" o "La víctima".
Y, aparte de unas buenas peleas clásicas con los siempre pintones abanicos (y curiosamente ningún swordplay), incorpora nuevos elementos de lucha, como los pinceles (el estilo de la caligrafía…¡Increíble!) o los cuchillos en los codos.
Totalmente imposible no pasárselo de putisima madre con su visionado.

jueves, 23 de octubre de 2008

SHOPGIRL

Anoche quería desintoxicarme un poco de tanta bazofia. Así que decidí ponerme una ñoñería, “Hollywood junk” que diría un amigo mío, y me puse "Shopgirl", con uno de esos cómicos entrañables: Steve Martin.
La película está basada en una novela suya. No sabía que Martin también publicara libros...
Nos cuenta la historia de una chavala muy sosa (Claire Danes, que cuanto más mayor, menos despierta la libido) que está más sola que la una, y conoce a una especie de "grunge" un poquito retardado. Y si no es así, al menos eso es lo que a mi me ha parecido. Se enrolla con él y se lo tira. Hasta que aparece en su vida un galán (Steve Martin, haciendo de galán a estas alturas...) que llega, la conquista con su pasta y sus buenos modales, y luego la confiesa que lo único que quiere es follársela siempre y cuando el esté en la ciudad.
Pues como suele pasar con este tipo de películas tan edulcoradas (mis sinopsis siempre suelen ser más duras), no hay ningún problema a la hora de verla. Me pasa con todas las comedias románticas: a priori no me interesan ni lo mas mínimo, pero cuando las empiezo, me las zampo tranquilamente y sin mirar ni una vez el reloj. Luego, rápidamente me olvido de ellas. Pero, que quieren que les diga, si consiguen que me esté entretenidito durante una hora y media, ya es mucho.

REBOBINAR: UNA EXTRAÑA COSTUMBRE

Ayer alquilé "Rebobine, por favor", peli que reseñó mi compadre Víctor en este mismo blog y puso a bajar de un burro. Por otro lado, cierto amigo opinó más bien de forma totalmente opuesta. Y cuando una peli despierta opiniones tan extremas suele ser señal de que, cuanto menos, el resultado será interesante y/o estimulante.
"Rebobine, por favor" no es estimulante... ni interesante.... tampoco es una puta mierda... ni una maravilla. Vamos, que me dejó indiferente. Ta bien, se puede ver, no es nada del otro Jueves, etc. Sí que llamó poderosamente mi atención su desenlace en el que, básicamente, nada ocurre, o nada termina. Y eso mola. En cuanto al tema de "peña grabando en vídeo cutremente pelis famosas de los 80" pues sí, tiene su gracia, sobre todo con "Los Cazafantasmas" que es a la que prestan más atención (por otro lado, resulta curioso que el director del film, tanto que va del palo arty y auteur, y recurra a unos títulos tan populares y comerciales... ya, su fin es que la audiencia los reconozca en seguida, pero no deja de ser singular). Siempre digo que el día menos pensado algún papanatas reivindicará el vídeo cutre de los 80 como herramienta creativa, ya sabéis, las cámaras armatoste y todo ese rollo... y este film es una demostración de ello. Ahora solo falta que Tarantino ponga la guinda, y ya tendremos a todos los modernos buscando por mercadillos vídeo-cámaras que apoyarse al hombro.
Sin embargo, el motivo de este post no es hablar del film... sino del rebobinado. Ayer noche lo pensaba y me decía "Dios, que absurdo era aquello". Yo, como treintañero, he vivido el auge de los vídeo-clubs, de las colas para alquilar la única copia disponible del blockbuster del momento (de cuando no se les llamaba así) y, of course, del "rebobinar antes de devolver". Ahora que lo miro detenidamente, me pregunto cómo podía haber gente tan jodidamente perra como para no rebobinar la cinta una vez acabada de ver la peli... ¡¡pero si no costaba nada!!... resulta sorprendente que los dueños de los video-clubs tuvieran que insistir tanto en ello, resulta sorprendente que yo me enfadara cuando alquilaba una peli no rebobinada y resulta sorprendente que a alguien se le ocurriera fabricar esos extraños rebobinadores que había quien incluso se los compraba. ¿No era más "costoso" sacar la cinta del vídeo y meterla en el rebobinador, que darle al botón adecuado del mismo reproductor?.
Ya se, decían que era bueno rebobinar las pelis porque así duraban más tiempo... o no se que chorradas. Y también que rebobinar en el vídeo era malo para sus cabezales... o no se que chorradas. En fin, son cosas de esas propias de lo que supone adaptarse a las carencias de las nuevas tecnologías. Hoy ya no hay que preocuparse del rebobinado gracias al dvd... y dentro de 15 años seguramente no tengamos ni que bucear en el menú para encontrar alguna función que nos interese. Seguramente todo será automático y lo manejaremos mentalmente... al tiempo...

martes, 21 de octubre de 2008

NOSFERATU, ESE HUMORISTA

En mi periplo por paisajes Draculianos no podía faltar su hermano bastardo. Y no, no hablo del Conde Yorga... ni de Blackula... sino de aquel que existió únicamente con el fin de evitar el azote legal de la señora de Stoker. Hablo del Conde Orlok, más conocido como Nosferatu.
La saga la componen, más o menos, cuatro films. El original de Murnau, el remake de Werner Herzog, la secuela de este y, también, "La sombra del vampiro", el "biopic" sobre el rodaje del film original. De todas ellas, decidí tragarme la uno, la dos y la cuatro. De la tres paso mucho. Y he llegado a la conclusión de que el Conde Orlok, o el Dracula con alopecia, es ante todo carne de stand-up comedy. Vamos, que me he reído en todas sus encarnaciones... por eso las he reunido en un mismo texto. Así que, vayamos por partes.
La de Murnau: Negar que el cine realizado en los años 20 no es entrañablemente gracioso, sería propio de un puto esnob saturado de tópicos académicos. Con esa facha y esos caretos, es imposible que el Orlok primigenio no despierte una sonrisa. ¿La peli?, hombre, es lo que es... si la miras con esos ojos, estamos ante un clásico imborrable, si la miras con los de ahora, se convierte en un coñazo insoportable.
El Nosferatu de Herzog: Después de lo aburridísima que encontré "Fitzcarraldo", me daba pánico enfrentarme a otro trabajo del insufrible Herzog... pero en este caso, dada su afiliación no solo al género vampírico, sino al terror, decidí hacer un esfuerzo. Bueno, no ha sido tan duro.
El "Nosferatu" del amigo Werner es soportable, aunque al mismo tiempo hilarante. No pude evitar reír durante algunos pasajes tan propios de esa clase de cine como las escenas en las que los habitantes de la ciudad donde se desarrolla el drama se vuelven medio tarumbas. La comida en un patio infestado de ratas supongo que pretende ser Buñueliano, pero en su esencia resulta cómico. Como cómica es la simple idea de adentrar un cuento de horror como el de Drácula en el pomposo y pedante terreno del arte y ensayo Europeo de los 70. Kinski está ridículo a la par que muy logrado. Y el final es chocantemente más propio del cine Hollywoodiense.
El Van Helsing despistado y escéptico que, en un minuto, decide creer y actuar es también un descojono. Pero para descojono el niño con el violín que, sin venir a cuento, aparece en el castillo del vampiro cuando menos te lo esperas (será una obsesión pedófila de Herzog, ya que también hay niños con violines en "Fitzcarraldo").
La Sombra del Vampiro: Esta es una peli francamente extraña. ¿Se trata de una comedia?. Su idea de base da para el humor, pero ¿es este intencionado?, frases como la que el vampiro suelta comparando su hábito alimenticio con el mear de un anciano (a veces de golpe, otras gota tras gota) es inevitablemente descojonable. No sé. El caso es que, si pretende hacer reír, nunca lo evidencia del todo, y eso también está muy bien. El punto de partida es curioso: Max Schreck es el actor que daba vida al Conde Orlok en el film de Murnau. Por su inquietante aspecto y su ignota procedencia, se forjaron muchas leyendas en torno a él, y una de ellas es la que presupone que, simplemente, se trata de un chupa-sangre genuino. De eso va "La sombra del vampiro", de que el cineasta germano ficha a un vampiro para que interprete a un actor que interpreta a un vampiro (tal y como el mismo cuenta en la peli).
E. Elias Merhige fue fichado en tareas de dirección porque había demostrado saber cómo recrear muy bien la estética del cine mudo en su aburrida, pero curiosa, "Begotten". Nicolas Cage es uno de los productores. Yo la vi en el Festival de Sitges y la peña se partía de risa cuando el vampiro reacciona a ciertas salidas de tono con movimientos propios de Chiquito de la Calzada. No llega a 90 minutos, lo que la convierte en la más entretenida y amena del pack.

lunes, 20 de octubre de 2008

CONDORITO 3D

Unos alumnos de la Universidad Audiovisual de Chile se curraron este corto hace un par de años como ejercicio de fin de carrera. Para ello, decidieron poner en el mapa audiovisual al personaje de comic mas famoso de Latinoamérica: Condorito.
Lo más normal es que, con esto, suspendieran. No me gusta la animación, me parece un coñazo y el visionado del corto incrementa aún mas mi aversión natural por los dibujos.
Con un ritmo mediocre -parece que la peli se desarrolla a cámara lenta-, una animación 3D que da vergüenza ajena, a base de movimientos torpes, y muy poco cuidado a la hora de sincronizar las voces con la boca de los personajes. En algunos momentos ni la abren.
Y un Condorito que, en el último minuto, lanzan al espacio para hacer un chiste que, aunque vi dos veces, no pude comprender.
Y es que Condorito es 
para mi un personaje intocable. Que lo dejen tranquilo y no lo destrocen, que esto que han hecho es una puta mierda.

sábado, 18 de octubre de 2008

BIGGER, STRONGER, FASTER

Un documental que claramente ha mamado de los de Michael Moore y Morgan Spurlock, pues la estructura es idéntica, por lo menos, a las maneras del segundo.
Chris Bell, el mas lúcido de los hermanos Bell (tres forzudos que, influenciados por el gobernador Arnie, Sly y Hulk Hogan, deciden un buen día ponerse cachas y emular a sus ídolos. Uno de ellos llegó a luchar en la WWF sin existo ninguno) realiza este documental con intención de hacernos ver que todo lo que dicen los medios de comunicación norteamericanos sobre el uso de esteroides es mentira. Bien, a mí me la suda todo el rollo de los esteroides, y me la suda el deporte, pero ver como Bell deja en bragas a Arnie o a Stallone está bastante bien. Sobre todo Arnie, sale bastante mal parado en el documental.
Muy entretenido, muy al estilo de los documentales comerciales que se estrenan en salas en los últimos años, y con una galería de garrulos fornidos que no nos dejará indiferentes. Con deciros que aparece el tipo con los bíceps mas grandes del mundo, ya os podéis hacer una idea de lo que vais a ver.
Reivindicación de los músculos y del uso de drogas para hincharte. Muy USA.

viernes, 17 de octubre de 2008

SUPER AGENTE K-9

A finales de los 80, y principios de los 90, se pusieron de moda dos cosas: Las “buddy movies” de policía y perrito y Jim Belushi.
En aquella época James Belushi era mi actor favorito, estaba obsesionado con él por culpa de "El Rector". Lo flipaba. Fijaos si era fan, que hasta incluso me hice fabricar una camiseta con una imagen de Belushi apuntando con una pistola. Una de esas tan chungas en las que planchaban una pegatina y que en dos lavados de borraban.
El caso es que en aquellos años Belushi no paraba de estrenar pelis para mi deleite ("Millonario al instante", "Homer y Eddie", "La pequeña pícara"...) y me las zampaba sin pestañear. Pero con "Super Agente K-9" fue la locura. Me compré unas gafas de sol muy parecidas a las que luce el agente Dooley (Belushi) en la pantalla.
La vi tropecientas veces. Incluso, estando ya en vídeo y disponiendo de mi propia copia, volví a verla en los pases del cine de verano de mi barrio.
Con los años, cuanto más mayor, más iba desapareciendo mi ese interés por James Belushi, aunque he de reconocer que aun despierta mi simpatía, y todavía, si descubro uno de esos telefilmes que hace, pasado de kilos e interpretando, como no, a un poli duro, lo veo con agrado.
Anoche, decidí ver de nuevo "Super Agente K-9".
Un poli intenta desmantelar una operación de narcotráfico con la ayuda de un perro K-9. Entre misión y misión, el poli habla con el perro. Eso vendría a ser la sinopsis.
Hombre, está desfasadilla en estos tiempos, los diálogos que le suelta Belushi al perro Jerry Lee son poco menos que mongoloides, y se nota todo el tiempo que el animal está esperando las instrucciones de su entrenador. Pero una trama bastante interesante, y un Belushi en estado de gracia, hacen que sea aun muy disfrutable, aunque los gags ya no hagan ninguna gracia. Eso sí. si quieren revisarla, háganlo ahora, que dentro de diez años dará vergüenza ajena. Es una película muy de principio de los noventa.
Rod Daniel, su dire, luego siguió rodando con perros en "Beethoven 2". También facturó otra de mis pelis favoritas de los noventa, "El Super" con Joe Pesci.
A "Super Agente K-9" le siguieron diez años después dos secuelas, ya directas para la televisión y ya con James Belushi fondón y en pleno declive.

jueves, 16 de octubre de 2008

DEMONS 2

Para mi siempre será un misterio el por qué Dario Argento, en el papel de productor, y Lamberto Bava, como director, decidieron reducir el nivel de gore en esta secuela de su "hit" "Demons", cuando, precisamente, el exceso de babas, pus y demás era lo MEJOR de la misma. ¿Ampliar la audiencia?, no se, no me cuadra... si habláramos de Hollywood sí, pero tratándose del rey del horrorismo Italiano, lo veo rarillo. El caso es que supongo que la jugada les salió mal, porque nunca hubo un "Demons 3" oficial (aunque sí muchos intentos -véase "El engendro del diablo", nacida como tal pero luego cambiada-, y alguna tercera entrega pirata, como el "Black Demons" de Umberto Lenzi y el "The Ogre" del mismo Bava Junior) y esta segunda parte llegó a algunos lugares de las Españas directamente en formato vídeo (como fue el caso de Barnacity).
La verdad es que la recordaba mucho peor. Acabo de verla y, bueno, me ha entretenido lo suyo... por lo que no será tan horrible. Los actores siguen siendo malos de cojones, estáticos, absurdos (entre ellos, Antonio Cantafora, la forma humana de "Supersonic Man"). Los diálogos igual de tronchantes y las escapadas al exterior para narrarnos sucesos sin importancia con respecto a la historia de base también están (en una tenemos a Lamberto en un pequeño papel), como la panda de punkos mega-chungos de la primera, aquí transformados en góticos mega-chungos. Y es que esa es otra, ¿por qué cambiar la adecuadísima banda sonora de grupos heavy metal de "Demons 1" y meter combos pop (esos grandes "Smiths") o góticos?, ¿más concesiones comerciales?, ¡raro!.
Algunos actores del primer film repiten en este, solo que haciendo de otros personajes y olvidando que, en su primera vez, fenecían. Algo rocambolesco sin tenemos en cuenta que en "Demons 2" se habla de los hechos de su precedente como si hubiesen ocurrido realmente.
El caso es que ahora la acción se desarrolla en un edificio requetemoderno. Los demonios se cuelan a través de la televisión y arman la marimorena. La galería de poseídos crece con la presencia de un perro-demon, un niño-demon y un gremlin-demon.
Lo dicho, se puede ver, pero se echan mucho de menos los excesos burros que en la primera compensaban su incapacidad. ¡Ah!, y sale Asia Argento, pero muy cría, así que los pervertidos ya pueden olvidarse (¡o no!).

miércoles, 15 de octubre de 2008

IVAN Z

Andrés Duque es el responsable de este retrato a Iván Zulueta.
Viene incluido como extra en la edición especial de "Arrebato" y me gusta más que la película de marras. Y es que esta puede tener su encanto, pero seamos serios, es un tostón del quince.
En "Ivan Z", vemos al Zulueta en su enorme casa al pie del mar, paseándose por ella con nada mas que un albornoz azul, y nos enseña sus cuadros, sus carteles de cine, sus colecciones de cromos de hace tropecientos años y nos habla inevitablemente de "Arrebato" y de su relación con la droga, que todavía perdura.
Me gusta como está rodado este retrato, me gusta la escena en la que Zulueta agarra una vídeo cámara y graba sus enredaderas (podemos ver las imágenes insertadas en el montaje junto a 
escenas de los cortos de Zulueta en Súper 8 y montones de cosas mas) y me gusta la duración (54 minutos).
No soy especialmente amigo del cine de Zulueta, le tenía hasta cierta manía. Y ha sido al ver este retrato que he comprobado que el tipo no es tan pedante como pensaba. Es más, se le ve bastante campechano y agradable.
Pero el tema está en que esta película está muy bien realizada y resulta muy entretenida, se disfruta, aunque no sepamos nada del retratado, o como me pasaba a mí, nos caiga mal.
Destaco el uso descontrolado del zoom 
al principio de la película, sin motivo artístico aparente.

martes, 14 de octubre de 2008

DRACULA, DE TRANSILVANIA A HOLLYWOOD

Creo que ya había confesado con anterioridad la poca simpatía que siento hacia los vampiros. Seguramente sea el monstruo que menos me gusta. ¿Por qué?, pues no sabría decir, tal vez porque lo asocio a esa clase de terror estilizado y elegante que tanto gusta a cierta platea neogótica. El que se disfraza de Jason suele ser un cachondo... el que lo hace de vampiro, a veces incluso se lo toma demasiado en serio.
Sin embargo, de chaval tuve mi ración de obsesión con respecto a Dracula (¡y su polo!... que rico está). Quizás por eso el otro día, visitando la biblioteca de mi barrio en busca de lectura interesante que llevarme al buche, agarré este libro en cuanto lo vi reposando en las estanterías. No hay nada que me guste más que leer sobre mi cine favorito.
De entrada "Dracula, de Transilvania a Hollywood" es tremendamente interesante, entretenido e instructivo. Te habla, con un lenguaje sobrio pero cercano, sobre las leyendas reales de chupa-sangres (increíble la ristra de nombres raros que enumeran), luego se centra en el personaje -una vez más, real- que inspiró el mito de ficción, Vlad el empalador (una verdadera lección de historia), y finalmente en aclararnos quién era en realidad el autor de la novela, Bram Stoker. Hasta aquí todo muy bien. El problema viene cuando nos adentramos en el terreno de las pajas mentales. Los autores analizan aquella desde todos los puntos de vista: políticos, sexuales, psicológicos... y ahí la cosa pierde fuerza.
Se recupera cuando entramos de lleno en aquellos terrenos en los que Dracula caló hondo e influenció: literatura, cómic y cine. Naturalmente esta última parte es la que, al menos a mi, más me interesa. Es bastante completa, aunque los autores (a los que, por cierto, aún no había mencionado: Roberto Cueto y Carlos Díaz) cometan un error etiquetando de casi-porno al jodidamente aburrido "Blood" del jodidamente incapaz Andy Milligan, algo completamente erróneo (ya le gustaría a él).
Lástima del tramo final, donde reinciden en las pajas mentales, haciendo profundos, exagerados e innecesarios análisis estético-filosóficos de cuatro o cinco de las más celebérrimas adaptaciones de la novela vampírica a la gran pantalla.
Si le quitas los elementos onanistas, "Dracula, de Transilvania a Hollywood" es un libro más que bueno.

lunes, 13 de octubre de 2008

UNIVERSAL REMOTE

"Universal Remote" es una peli directa para vídeo (¡faltaría mas!) con la que, dentro de lo estúpida, mala y chunga que es, te ríes bastante. O quizás es que la vi en el momento oportuno, pero lo cierto es que me gusta esta caquita.
Se desarrolla a base de "sketches" y recuerda ligeramente a la mítica "Made in USA", salvando lógicamente las distancias. No es que sean unos gags muy buenos, ni especialmente graciosos, pero veréis, "Universal Remote" hace de lo políticamente incorrecto su bandera. Un acierto.
Nada más empezar, se nos explica que los productores, conscientes de que el racismo es gracioso, han decidido hacer una película racista donde se hacen chistes de genitales. Y, desde ya, es un no parar. ¡Una jodida película donde se reivindica el racismo para hacer reír!.
Es como si viéramos un zapping de internet, en el que la máxima consiste en hacer chistes de negros, chinos, judíos… soltando burradas gratuitas, que sonrojarían a cualquier izquierdoso que se precie de serlo.
Una voz en off nos dice cada x tiempo “que le jodan a las razas inferiores” o “que les jodan a los noruegos” y así, entre sketch y sketch, no paran los insultos y los chistes ni un momento. Merece destacarse el concurso televisivo donde el concursante responde siempre con un chiste racista. Si lo hace de forma coherente, dan la respuesta por mala y llega una negra que le mete una hostia. Unas risas. Aunque no todos los sketches funcionan, los hay mas flojos que buenos y llegamos aburrirnos un pelin, pero la idea está bastante bien
Su director, Gary Hardwick, es negro. Una película que no deja raza alguna sin su chiste con mala hostia, ¿no se convierte automáticamente en la peli menos racista del mundo? Esa es la intención, creo.
No obstante, el racismo es gracioso, esta peli lo sabe y lo utiliza como elemento cómico. Arriesgado y divertido, desde luego.

BASURA EN EL REPRODUCTOR DE DVD (BROTHERHOOD OF BLOOD + DIARY OF A SERIAL KILLER)

Tengo en casa una pila de dvds por ver, en su mayoría películas yankis de terror destinadas al dvd o la televisión por cable de los states. Y al final voy a tener que parar con esta actividad compulsiva de consumir pelis videocluberas. Pierdo un tiempo precioso. Me daría igual si estuviesen bien, pero esto es una jodida lotería… lo mismo te sale una potable que una cochambre sin ningún interés.
Anoche sin ir mas lejos, tuve que quitar dos pelis ¡dos!, porque eran un absoluto coñazo. La primera de ellas "Brotherhood of Blood", cuyo principal reclamo era la presencia de Ken Foree. Va sobre unos extraños vampiros y un grupo de garrulos que pretende darles caza.
Aguanté media hora, no más. Me resultaba imposible centrar mis atenciones en una pantalla en la que no ocurría nada lo suficientemente interesante y no me estaba enterando de nada. Intenté centrarme unos minutillos más, pero no pude con ella, así que opté por quitarla.
Rebuscando entre las toneladas de mierda, encontré otra a priori más atractiva para mi, "Diary of a serial killer", tema este, el de los asesinos en serie, que siempre me ha fascinado. Un tipo que de joven se juntaba con un soldado aficionado a fotografiar sus torturas y vejaciones en Vietnam, se vuelve un asesino en serie y la poli le investiga.
Otra media hora. ¡Vaya coñazo!... fuera dvd.
Todo esto me da que pensar… ¿realmente son las películas tan malas? ¿seré yo que me está dejando de gustar el cine de terror? ¿demasiadas cosas en la cabeza como para ponerme a ver pelis de madrugada?
En fin, que podía haberme ido a la cama y tan tranquilo, pero opté por una nueva intentona, así que vi, esta vez entera, la peli que paso a comentar a continuación.

viernes, 10 de octubre de 2008

NOCHE DE MIEDO 2

De chaval veía extractos de este film en la tele y exclamaba: "¡Guau!". Fui al cine, y cuando salí decía de todo menos: "¡Guau!". Hoy, muchos años después, sigo pensando exactamente igual.
Hay pelis que cuando las ves y no te gustan, rápidamente pasan a ocupar un espacio mínimo en tu memoria. Entonces, te haces mayor, te entra la nostalgia, las recuperas y, sí, rápidamente recuerdas por qué las habías casi olvidado. Siguen siendo una mierda. Bien, "Noche de miedo 2" entra en ese grupo.
El prota de la primera, tras comerse tres años de terapia, decide que los vampiros no existen. Lástima que no vaya a gozarlo mucho, pues la hermana del chupasangre fenecido en el film anterior viene a la ciudad dispuesta a vengarse, convirtiendo al asesino de aquel en una criatura de la noche. Un punto de partida resultón, para una historia completamente fallida. La cagada más grande de "Noche de miedo 2" es su abuso de la comedia. La primera lograba ese punto de unión tan de inicios de los 80 entre el terror más serio y el humor sutil, sin excesos. La segunda entra ya en el terreno de la "comedia de horror" que tanto daño hizo -y hace- a nuestro género favorito. Por ejemplo, por un lado tenemos al vampiro simpático perfectamente aborrecible, y por otro una secuencia directamente estúpida en la que un no-muerto explica con palabras técnicas cómo recibir un estacazo mientras agoniza. Esta última ya nos pareció ridícula en la época, pues imagínate ahora. La vampira prota (a la que veríamos posteriormente en "En la boca del miedo") no tiene el carisma de Chris Sarandon y, en general, a la narración le cuesta avanzar mucho. Vamos, que me aburrí. Además, la estética super-hortera de la década está más presente que nunca.
Para no ser tan negativos, resaltaré la mítica actuación de Brian Thompson -el cachas malo de "Cobra"- como versión inflada de Renfield. Su devoción por devorar insectos -y su espectacular muerte- son de lo poco salvable. Dirige el cotarro el protegido de John Carpenter, Tommy Lee Wallace (responsable de la estupenda "Halloween 3"), que después regresaría a la sombra (suya es la primera e infame secuela de "Vampiros de J.C.") e impediría que se hiciera una tercera entrega de "Noche de miedo", cosa esta de la que me alegro.

jueves, 9 de octubre de 2008

LA PRISIÓN DE LOS MUERTOS

Uno de los últimos productos de Charles Band y su "Full Moon" que dirige un David DeCoteau en baja forman (¡¿más?!).
Unos chavales van al funeral de un amigo a tomar por culo de sus respectivas ciudades. Cuando llegan, resulta que todo había sido una broma y el susodicho amigo no estaba muerto, tan solo quería tenerlos allí para mostrarles una especie de castillo del medioevo que acababa de heredar. En estas que hacen una ouija y despiertan a los antiguos muertos del lugar.
Menudo despropósito. Esto es aburridísimo, una película en la que los horribles actores se dedican a paliquear todo el puto metraje sin sacar nada en claro. Sin una gota de sangre, con unos zombies que da penita verlos, y dirigida sin ganas. Un producto que no entiendo por que existe, no vale ni para los fans de DeCoteau, pues por no haber ni hay tetillas, ni fornidos chavalotes mostrando torso y marcando paquete.
Un esfuerzo sobrehumano tuve que hacer para llegar al final, un final que, por otro lado, no tiene sentido alguno. Nada, es como ver la carta de ajuste.

HANCOCK

"Hancock" tenía todas las papeletas para que me gustase, y no es que no me haya gustado, que va, entra con facilidad y resulta un ameno entretenimiento. Pero algo falla en ella.
No se quien me comentó que en la ultima de Batman se decía por ahí que para que un superhéroe funcione, necesita un villano a su altura. Y ese es el problema de este 
"Hancock", que como no hay villano, el héroe no termina de cuajar.
En cuanto a gags, la peli está correcta, pero con el visionado del trailer nos hubiera bastado, pues están todos ahí. Aunque, en realidad, es una película bastante seria. Y demasiado estilizada para mi gusto.
Will Smith no está tampoco muy allá, y desde que no va de rapero graciosito lo cierto es que pierde fuerza, y película a película, va empeorando como actor o eso me parece a mi.
Por otro lado (y aunque no viene a caso la comparación), su rol de alcohólico es bastante más visible que en el caso de "Iron Man", ya que mientras que a John Hancock podemos verle tirado en un banco con una botella en la mano, al Tony Stark de su peli apenas le vemos tomar una copita o dos, cuando todos sabemos que en el comic es un borracho consumado. Con esto quiero decir que los de la "Columbia" han sido mas osados. No es ni bueno, ni malo, pero me llama la atención.
Por lo demás, 
"Hancock" es una película muy dosificada en efectos especiales, en espectacularidad y en duración, que se deja ver... pero no me voy a comprar la edición especial en DVD cuando esta salga.

miércoles, 8 de octubre de 2008

LA MALDICIÓN DE LA PANTERA ROSA

De chaval sentía verdadera fascinación con el póster de esta película. La idea de disfrutar de las aventuras de un nuevo detective patoso caracterizado por unas grandes gafas me parecía maravilloso. Fui al cine a verla con mi abuela, creo recordar, y en general me llevé una notable decepción. Pero el paso de los años no acabó de borrar el recuerdo de algunos momentos destacados, y tras mucho perrear, por fin decidí repetir.
Siempre he creído que las mejores pelis de la pantera rosa son las que producía Tony Adams. Lo que no comprendo es por qué a este, y al creador de la serie Blake Edwards, les costaba tanto entender que una nueva peli del tema sin Peter Sellers como Clouseau sería, no una mierda, pero desde luego algo bastante mediocre. A pesar de ello insistieron, y no durante pocas ocasiones. Concretamente, "La maldición..." se hizo tres años después del fenecimiento del actor británico, y además, con la errónea idea de colar a un nuevo Clouseau en pantalla, el improbable sargento patoso Clifton Sleigh, interpretado por un más o menos resultón Ted Wass, que figura en los créditos casi al final de todo, a pesar de que es quien más rato aparece en pantalla. El señor Wass estuvo activo como actor -televisivo- hasta mediados de los 90, para pasarse a la dirección -televisiva-, a la que aún hoy sigue dedicándose.
"La maldición de la pantera rosa" nos cuenta cómo el Inspector Clouseau desaparece, y el gobierno decide usar una computadora para elegir al mejor policía del mundo cuya misión será localizarlo. Obviamente esa es una idea que no agrada nada al eterno némesis de Clouseau, el jefe inspector Dreyfus, que decide hacer trampa para que la computadora seleccione al peor candidato, quien resulta ser el mentado Clifton Sleigh.
El tono y look de la peli es idéntico al del resto de la saga. Repiten actores de renombre como David Niven, Capucine o el gran -y siempre gracioso- Herbet Lom. Robert Loggia también se deja ver por ahí. Hay una larga secuencia de artes marciales y Ted Wass se esfuerza en imitar las payasadas de Clouseau, quedándose únicamente en la superficie. Encima, más de la mitad del film se desarrolla en Valencia e Ibiza, nada menos. Uno de los aciertos es contar con Roger Moore en el reparto, en esa época un exitoso nuevo James Bond, y que figura ser el mismo Inspector Clouseau tras someterse a una sesión de cirugía estética. Vamos, que Moore hace de Moore.
En general el humor es muy tontorrón, muy simple, no despierta carcajadas ni mucho menos, aunque sí amables sonrisillas. Empieza peor que acaba, lo que no deja de ser algo positivo.
Un entretenimiento familiar sin mayores complicaciones.

martes, 7 de octubre de 2008

MARTYRS

Digan lo que digan, la mejor manera de definir "Martyrs" es como "la aportación europea al torture-porn iniciado por "Saw" o "Hostel"". Pero claro, siendo Europea como es, y Francesa más específicamente, no esperen gore de comic-book ni descerebre, "Martyrs" es tremendamente seria, salvajemente realista (superando incluso a su paisana "A L´interieur", más enfocada al gran guiñol) y, sí, un pelo pedante... pero tampoco demasiado.
Una niña escapa de lo que es una evidente sala de torturas. Internada, tiene terribles pesadillas en las que una mujer con aspecto casi animal la ataca. Suerte de la amiga que se ha agenciado, y que prácticamente vela por ella. Pasados 15 años, la prota va en busca de aquellos que la martirizaron para vengarse. Pero esto no será más que el principio del horror.
Lo que os acabo de contar sirve para mas bien poco. Si algo tiene "Martyrs" es que NO es nada previsible, vamos, que cuando crees que sabes por dónde tirará, pega un giro del copón, y luego otro más. Y ello afecta incluso al tono y estética del film, que arranca como una imitación francesa del horror japonés para, poco a poco, olvidarse de todo eso y empezar de cero alejándose por completo de lo que sería el terror estándard. Estos cambios de rumbo radicales parece que molestan a un sector de la crítica, pero a mi me chiflan. Igual que me chifla que "Martyrs" no quede en la mera imitación del cine americano de los 70, y haga gala de unas virtudes muy francesas... y muy europeas.
¿Pero es tan fuerte como dicen?, hombre, para quien haya visto cosas como "Irreversible" o "Saló" de Pasolini, pues no le hará trallar ni se desmayará, pero sí es peligrosa para aquellos que no estén acostumbrados. Lo curioso es que gore, lo que se dice gore, no hay muchísimo, es más una violencia física y psicológica tremendamente cruda y brutal. Un poco como "La matanza de Texas" original (pero aún así, "Martyrs" tiene más chicha). Desde luego olvidaros de los espectáculos sangriento-delirantes para gritar y aplaudir, no van por ahí los tiros, el objetivo del realizador (como él mismo confiesa) es provocar la ira del espectador y poner su paciencia al límite. Pascal Laugier está convencido de que el terror debe ser transgresor y no acomodarse, tal y como ha ido haciendo estas últimas décadas.
Y es que no sólo de violencia vive "Martyrs", lo que cuenta es original, lo que se muestra va acorde con la historia, el ritmo no decae, logra agarrarte por la entrepierna, tenerte en vilo e inquietarte. Terror con mayúsculas. Sorprende que sea el mismo dire de la aburridísima "El internado".

domingo, 5 de octubre de 2008

ROVDYR

Los Noruegos se apuntan a la moda "retro" de revivir el horror sucio y crudo de la cinematografía americana de los 70. "Rovdyr" es puro cine de supervivencia. Arranca como "La matanza de Texas" y se desarrolla como "Deliverance". Encima, la canción inicial recuerda mucho a la que David Hess compuso para los créditos de "La última casa a la izquierda". No creo que sea casualidad.
Un grupo de chavales van de excursión por una región de la américa profunda en la que se habla Noruego. No, es broma. Lo que quiero decir es que "Rovdyr" es ultra-yanki en su estética, look, forma, color... todo, y se hace raro ver a rednecks tan "yahoos" hablando Noruego. El caso es que todo el atrezzo y el vestuario es tope setentero. En lo que no varía es en la mongolidad de sus protas (siempre en eterno conflicto por absurdas causas) y el hecho de que, al menos tres de cuatro, son guapos, especialmente la rubia cañón, que por lo visto es una presentadora bastante popular en su tierra natal. Total, que los chavales caen en una trampa (autoestopista con malas intenciones... lo que yo os decía) y se convierten en las víctimas de un grupo de paletos que quieren cazar seres humanos.
A partir de aquí arranca la lucha por sobrevivir. Aunque todo es mega-tópico y ultra-previsible, está bastante bien resuelto, notablemente bien acabado, y por eso uno puede tragarse perfectamente "Rovdyr" sin aburrirse, a pesar de saber de pe a pa por dónde irán los derroteros. En cuestión de gore, no es excesivo, pero puntualmente sí bastante gráfico. ¿Serán los Noruegos los próximos revitalizadores del horreur de línea dura tras los Franceses?.

viernes, 3 de octubre de 2008

DELTA FARCE

Un trío de perdedores, uno agobiado por su esposa, otro que ha descubierto que su novia se la pega (y además ha quedado preñada) y un tercero que, directamente, es retardado, tiene por costumbre pasar un fin de semana al mes en el ejército con el fin de desestresarse. En esto que, sin saber por qué, se los llevan a Irak y los tres gilipollas no ponen pega alguna.
Esta película es horrorosa. Toda resuelta a base planos cortos, y todo muy alborotado, es como un puzzle en el que resulta imposible enterarse de nada, la obra de un incapaz. Directamente, no se puede ver.
Lo que a mi me motivó para proceder a la inversa es la presencia de D.J. Qualls, actorcillo este por el que siento una especial simpatía y que, si salió airoso de "Road Trip", tocó el cielo con "Los feos también mojan", y cambió de registro en "Hustle & Flow", aquí no resulta tan divertido, aunque es lo mejor de la película, sin duda. Solo verlo, tan flaco, tan alto, tan feo y tan desgarbado, ya provoca la risa. Añádanle un bigotazo a lo Burt Reynolds.
La película está concebida para el lucimiento de un tal Larry the Cable Guy, que no tengo ni zorra de quien es, pero intuyo que debe ser una estrella del "stand up".
En fin, que una puta mierda.
El director es un tal CB Harding, quien se dedica a dirigir todo producto en el que aparece el tal Larry y (ojo al dato) es también director de "The Osbournes", ese "reality show" con la familia de Ozzy Osbourne como protagonistas.

COLLEGE

"Supersalidos" ha marcado mucho a la jarca adolescente americana, y todo el cine juvenil de los 80 también. Como claro ejemplo de todo eso está esta "College", que con tres protagonistas idénticos a los de "Supersalidos" (el responsable y romántico, el gordo obsesionado con el sexo y el "nerd") y un argumento que, directamente y sin ningún tipo de pudor, plagia al de la ya mentada y al clásico "La revancha de los novatos", se ha conseguido un “directo to video” que deja en bragas a todas las comedias juveniles que se han estrenado en los cines desde los 90.
Los tres chavales mentados escuchan las aventuras (sexuales) que un compañero ha tenido el fin de semana que fue a visitar a su primo a la universidad. Uno de los chavales -aún en el instituto-, tiene también un primo que, justamente, les invita a lo mismo. Así que parten para allá, donde sufrirán toda suerte de vejaciones por parte de la hermandad de deportistas, aunque también disfrutarán de fiestas y polvetes.
¿Se acuerdan de Ogro, aquella mala bestia que puteaba a los "nerds" de "La revancha de los novatos"? Pues "College" tiene su propio Ogro, y su Stan Gable… los malos de la película son un calco de los de aquella.
Como fan del género, en lugar de irritarme, 
tanto plagio ha hecho que me lo pase de puta madre.
Deb Hagan es el mamón que ha mamao y luego ha vomitao.

jueves, 2 de octubre de 2008

SEMUM

No hace mucho que, por cosas del fandom, se puso de moda ver viejas películas turcas de género fantástico. El poder comprobar su tercermundismo es una cosa tremenda.
Bien, pues los turcos tienen tradición de cine de terror, y siguen haciendo sus películas, otra cosa es que nos lleguen o, en su defecto, podamos descubrirlas. Yo he descubierto esta.
Y en el 2008 los turcos siguen en sus trece. A ver, "Semum" es una película mucho mejor hecha que todas aquellas ponzoñas, pero sigue siendo tercermundista. Eso sí, se adapta a los tiempos que corren ya que ha sido grabada en vídeo.
Una pareja bien posicionada se muda a una casa de lujo ¡¡generada por un CGI de tres al cuarto!! y comienzan a suceder extraños sucesos. Alguien les comenta que en ella un hombre asesinó a su mujer. Lo que la parejita (¡que feos que son!) no sabe, es que allí campa a sus anchas el 
"Semum", un demonio que se la tiene jurada a dios y a los humanos. Terminará poseyendo a la muchacha y, como es lógico, tendrán que llamar a un exorcista.
Lo más curioso es que, en esta película, cada efecto especial que se curran lo hacen a través de la computadora, destacando el Semum, que está fatalmente hecho, de lo peor que he visto en infografía y el infierno. Es más, el bicho parece un plagio del Eddie de "Iron Maiden", pero con manos gigantes.
Lo bueno es que, dentro de lo que cabe, está entretenidilla y tiene un par de sustos decentes. Lo malo es que no te ríes, pues aunque tercermundista, no lo es lo suficiente.
Eso si, siempre buscando la estética Americana como agua de mayo.
Me gusta mucho la actitud de los cineastas turcos… el no poder competir con ningún cine de otros países, no les impide seguir haciendo películas, aunque estén tan mal paridas. Es como decir “nosotros hacemos esto y al resto del mundo que le den por el ojete”.
Su director, Hasan Karacadag, es precursor del terror ¡¡turco – Islámico!! con dos pelis más del mismo rollo.

miércoles, 1 de octubre de 2008

LOS DESMADRADOS PIRATAS DE BARBA AMARILLA

En los 80 había una moda bastante irritante que consistía en atribuirle películas al clan Monty Python en las que, únicamente, solo alguno de sus componentes había participado. Un caso que se dio mucho con Terry Gilliam ("La bestia del reino" y "Los héroes del tiempo" son dos ejemplos) y con otras, tal como la que hoy comento, "Los desmadrados piratas de barba amarilla", título más adecuado para la comedia americana que se producía entonces, eminentemente juvenil, que para este film británico hasta la médula.
Obviamente, lo que más destaca es su espectacular reparto de actores habituales del cine de risas. Tenemos a, como decía, algunos miembros de Monty Python (John Cleese, Eric Idle, Graham Chapman como protagonista y co-guionista), otros del clan Mel Brooks (Marty Feldman, Peter Boyle, Madeline Kahn), a los yankis Cheech y Chong y una suculenta variedad de cómicos ingleses (Peter Cook, Spike Milligan o Nigel Planer, es decir, el hippie de la inolvidable serie "The Young Ones"). A semejante ensalada debemos añadir a James Mason, un breve cameo de David Bowie y a Buddy Van Horn encargado de las tareas de los especialistas. Van Horn era habitual colaborador de Clint Eastwood, e incluso le acabó dirigiendo como "Harry Callahan" en "La lista negra".
Evidentemente, con un plantel así, y medios bastante holgados, esta peli tendría que haber sido la repanocha, el no va más del descojone padre. Pues no, todo lo contrario. "Los desmadrados piratas de barba amarilla" nos cuenta la historia de un feroz pirata que oculta un tesoro y es encarcelado 20 años. Pasada esa fecha, escapa en busca del botín, solo que ahora son unos cuantos más los que saben de su existencia, y no dejarán que el fiero pirata se lo quede.
El resultado es terriblemente desencantado, soso, sin gancho, sin ritmo y sin especial gracia. Con suerte sonríes en algún momento, pero poca cosa. En general mas bien te aburres como una puñetera ostra. Cuando llegas a la hora, estás tan cansado ya, que ni algunos de los por entonces mejores gags logran animarte. Un desperdicio de talento (y dinero) del que debemos culpar a su director, Mel Damski, un tipo que venía de la tele, hizo un parón en el cine con este film, y volvió a la caja tonta de por vida (entre sus últimos trabajos hay episodios de "Psych").
Si no me acabáis de creer, ahí va esa: El propio John Cleese asegura que es la peor de todas sus películas. Casiná.

TROPIC THUNDER (CRÓNICA DE UNA OBSESIÓN)

Supongo que si os molestáis en leer esto, ya sabéis que es lo que opino sobre Ben Stiller. Como actor y cómico, me parece un genio, como director, ya es otro cantar.
Considero "Reality Bites" sosa y pijaza y "Un loco a domicilio" correcta, pero digamos que estoy mucho más centrado en su faceta como actor.
Bien, acabo de salir del cine de ver "Tropic Thunder", en la que el bueno de Stiller, ejerce de amabas tareas.
Hace ya algunos meses, leyendo la revista de cine más famosa de España (y que me he prometido a mi mismo más de mil veces que dejaría de comprar… pero soy incapaz), miré con suma atención una foto en la que aparecía un actor negro en lo que tenía pinta de ser una película de guerra. Joder, lo que se parece este negro a Robert Downey Jr.- Pensé. Leí el pie, y vi que se trataba de la ultima de Ben Stiller, y me pareció cojonudo el hecho de caracterizar a un actor blanco de negro y quedara tan bien.
Pasaron los meses y se estrenó en USA, desbancando a "El caballero oscuro" en el primer fin de semana, y descubro que, junto a Stiller y Downey Jr. está también otro de mis favoritos: el por otro lado cargante (pero vive dios que eficaz por lo que a mi respecta) Jack Black. Por consiguiente, el interés se acrecienta en mí como hacía mucho que no se me despertaba por una película. Una sensación similar a cuando de pequeño 
veía en la tele el trailer de la nueva de Parchís y no podía esperar para ir al cine.
Pasan las semanas, y veo en las noticias que una asociación de familiares de disminuidos psíquicos se manifiesta con el fin de boicotear "Tropic Thunder" pues, por su culpa, se sienten ofendidos. ¿Y eso? – Pensé yo… claro que me lo imaginé… en la película harían chufla de los retrasados mentales (y vaya que si la hacen…).
Por fin se estrena este pasado fin de semana. No puedo ir a verla porque tengo que trabajar, así que espero al Lunes, ya que es el día que yo libro. Durante la noche del domingo no podía dormir, solo por saber que iría a verla, una sensación que no tenía desde pequeño, os lo juro…
Llega el Lunes, y mi mujer y yo cogemos el coche para dirigirnos al cine. Pero se truncan mis planes. En plena carretera, hay una pieza de hierro y mi mujer, que es la que conduce, no logra esquivarla. ¿Consecuencia? La pisamos y se nos revienta una rueda, con lo cual salimos disparados haciendo espectaculares eses y casi nos matamos. De chorra logramos ir al alcen y parar allí. Salimos del coche acojonados y vemos que donde antes había una rueda, ahora solo hay un amasijo de hierros triturados. Pero gracias a dios, nosotros estamos sanos y salvos. Llamamos a la grúa, esta se presenta, y nos dice que igual nos ha salvado mi peso, que como la rueda estaba justo debajo de mi, con mi gordura he frenado el coche (es pequeño, un Cinquecento) Para que luego digan que nos pongamos a dieta. Llevamos el coche al taller y, milagrosamente también, el único daño lo ha sufrido la rueda, que quedó destrozada, pero el resto está impoluto. Tenemos problemas para encontrar llantas de ese tamaño, así que todo el santo día de taller en taller.
Así que decidimos que veríamos la película hoy, cuando el coche estuviera arreglado. Bien, además, dice Naxo, que la peli no está mal.
Pues de la obsesión por verla, esta noche he soñado con "Tropic Thunder". Y con unas expectativas tan altas, me siento en la butaca del cine y comienza. Dichas expectativas se cumplen desde el primer falso trailer, en especial me ha dado un ataque de risa con el titulado "El túnel de Satán". Por lo demás, gore, acción, buenos gags, Robert Downey Jr. haciendo un papelón, guiños, 
Tom Cruise impecable… la mejor película de todas las que he visto desde los años 80. No digo más, vayan a verla o lo lamentarán. Es una autentica OBRA MAESTRA DE OBRAS MAESTRAS. Exactamente lo que quiero ver cuando me siento ante una pantalla.
Y si quieren saber cosas más concretas, visiten los cientos de blogs que hablan de ella, antes que nosotros y con más visitas que nosotros.