No puedo ser malo con esta película, y podría porque hay de
todo a lo que sacarle punta, desde las actuaciones de los actores
profesionales, que no son muy creíbles, los niños del colegio que no son
actores profesionales, unos efectos especiales de chichinabo, y hasta un guion
que parece hecho sobre la marcha y acaba con el giro más manido y
usado de la historia. Pero aun así no puedo meterme con ella. Esta producida
por la ONG Admundi, y los ingresos de taquilla son para mantener un colegio de
un pueblo de Perú. También da un mensaje a los niños, el de cuidar nuestro
planeta y trabajar por el bien común y la paz. Es decir que va cargada de muy
buenas intenciones.
La película tardo 4 años en rodarse, su director, el
debutante Miguel Caffarena, rodaba en fines de semana o cuando tenían hueco
para hacerlo. La mayor parte del presupuesto (16.000€) se fue en construir un
decorado lunar con sus cromas y acondicionar una autocaravana como si fuera una
nave espacial. Conto con la colaboración de las niñas de un colegio de Málaga
que interpretan a una simpáticas extraterrestres en unas escenas a lo cámara
oculta o entrevista de televisión por la calle.
La historia va tal que así, una niña lleva tiempo en coma, cayó
en este estado al darse cuenta de que los humanos estamos destrozando el
planeta, ya sea con polución, guerras, hambre…. La pobre niña no puede con el
estrés y cae en coma. Pero antes de esto enterró dentro de una lata y en el
jardín de su casa, una carta dirigida a su abuelo, recientemente fallecido,
pidiéndole ayuda para salvar el planeta.
Esta carta es interceptada por una organización
extraterrestre que va ayudando a las distintas civilizaciones que hay por el
universo. Los aliens mandan a unos cuantos especímenes a contactar con los líderes
del planeta para ofrecerles su ayuda. Aquí es cuando tenemos las escenas de las
niñas del colegio preguntando por la calle quien es el líder del mundo, a lo
que la gente responde Obama o Zapatero (por aquel entonces el presidente del
país)
La película está claramente dirigida al público infantil y
con el mensaje claro de ser solidarios. La canción central de la película ya
nos lo indica, que apoyándose en la lata donde la niña mete su carta, la cual
recuerda a esos botes que se utilizan para postular ya sea para la lucha contra
el cáncer, el SIDA o cualquier otra buena causa, la letras dice tal que así:
“Hola, somos los niños, de este planeta, y aquí venimos, a dar la
laaaaaataaaaaa….” Es repetitiva y machacona, puede que hasta un poco hortera
pero consigue su cometido, que se te quede grabada en la mente, y por ende su
mensaje.
SOS Pelota Tierra no es una película convencional (en ese
caso suspendería estrepitosamente), es una acción solidaria de una ONG y unos
chavales de un colegio, y como tal la juzgo. Así que enhorabuena a todos los
implicados en el proyecto por llevarlo a cabo y por lanzar ese mensaje de
solidaridad.
A los habituales de este blog no creo que os vaya a llamar
la atención ni creo que sea una película para vosotros, pero los que tengáis
chavales podeis alquilarla en Filmin (el 50% va directamente a la ONG) igual le
pica el gusanillo a alguno de vuestros hijos al ver a otros chavales como ellos
en una película, y os sale un pedazo de estrella. Y sino pues habréis apoyado
una buena causa.