lunes, 3 de abril de 2017

MATA Y MATA OTRA VEZ

Tras el éxito de la cinta de artes marciales “Lucha o Muere”, película Sudafricana prácticamente pionera  en Occidente en lo que a películas de artes marciales se refiere,  Estados Unidos decide poner pasta en la secuela de esta, y teniendo en cuenta una especie de fiebre que comenzaba en los USA con la cosa de las artes Marciales, ponen en marcha esta “Mata y Mata otra vez” en 1981,  que  de poco no les sale una comedia involuntaria.
Y es que en esta película está todo metido a capón y porque si, con la excusa de presenciar unas peleas que muchas veces no vienen ni a cuento.
En ella, el campeón del mundo Steve Chase –interpretado por James Ryan-  es contratado por alguna organización gubernamental para rescatar al premio Nobel de química que ha sido secuestrado por un megalómano. Este caballero quiere que el premio nobel cree una medicina que permita doblegar la voluntad de unos
super-luchadores que han de dominar el mundo.
Para ello, Steve Chase, como si de un Equipo A chabacano se tratara, reune a sus viejos amigos de batallas, para juntos rescatar al premio novel de química. Por el camino, se las verán con luchadores de todo tipo.
El argumento parece sacado de algún patético, autocomplaciente y postmoderno cortometraje amateur intentando parecer mainstream, o peor aún, de un “Kung Fury” cualquiera, pero no se equivoquen; este delirio es genuino, y es en lo que se mal inspiran estos productos que he mencionado. ¿La diferencia? Pues que mientras que estas postmodernidades son en extremo coloridas y alegres, y el cachondeo circula a sus anchas, aquí la sordidez, los negativos de mala calidad y cierta incapacidad técnica por parte de sus artífices, impregnan todo el producto de un olor a mierda que, una vez olido, lo mejor es quitárselo de las narices lo antes posible. Pura mierda, señores, aunque no tanto como esos cortos del nuevo mileno a los que antes me refería y que dicen inspirarse en estas Series B de la época.
Con alguna exageración de las que contiene te ríes –sin que el director tenga la intención de hacer reír- pero por lo demás, aburrimiento y tedio hasta límites extremos, y zetosismo en algo que dista mucho de ser un producto fardón. Ni que decir, que las coreografías de esta película están a años luz de la más infame película Taiwanesa de artes marciales.
Sin embargo esta película es popular entre los aficionados por tratarse de la primera película que utiliza el efecto llamado “Time Bullet” en el que la cámara sigue a una bala que acaba de ser disparada, efecto este que popularizaría muchos años después la saga de “Matrix” con la ayuda de los efectos digitales, pero que en esta película es rodado en total artesanía con mucho ingenio y oficio. Si les soy sincero, mirando la película este efecto tan revolucionario, pasa inadvertido ante mis ojos y solo soy consciente de ello buscando info sobre la peli.
Por otro lado, con la mayoría del cast Sudafricano, a los actores les doblaron  la voz en los USA con acento Americano, así como en las escenas en las que sale dinero, se les filma usando dólares Americanos, ya que la producción Estadounidense quería hacer pasar la película por Americana a toda costa. Yo creo que ahí si que nadie diría que la peli es Sudafricana.
Dirige la cinta Iván Hall quién tiene en estas dos películas “Lucha o Muere” y “Mata y Mata otra vez” los momentos más álgidos de su correcta y artesanal carrera.