sábado, 27 de marzo de 2010

DOS VECES YO

La ultima colaboración (hasta el momento) de Steve Martin como actor y Carl Reiner tras las cámaras, se aleja bastante del descerebre enrarecido de serie B de UN GENIO CON DOS CEREBROS, y de la gamberrada de juguetear con el montaje que es CLIENTE MUERTO NO PAGA, para ofrecernos lo que a los entendidos les gusta llamar “Alta comedia”. Bueno, yo no se si “Alta” o “baja”, pero si que es un estilo de comedia un pelín mas sofisticado de lo que nos tiene acostumbrados Reiner, pero igualmente disfrutable. Aunque mi favorita sigue siendo UN GENIO CON DOS CEREBROS.
Una mujer multimillonaria, está a punto de fallecer, por lo que firma un contrato con la hija de uno de sus empleados con el que, con la ayuda de un brujo, una vez muerta poseerá el joven cuerpo de la muchacha y el alma de esta se irá al infinito. Un abogado que está por allí para dar fe de todo esto, tiene la mala suerte de ser accidentalmente golpeado con una vasija donde se encuentra el alma de la millonaria, por lo que esta poseerá la parte izquierda del abogado, lo que dará lugar a todo tipo de situaciones cómicas.
A mí este tipo de cine me deja siempre enormemente satisfecho. Es más Steve Martin da rienda suelta a su vena más física, dándonos un recital de chistes en los que no controla la parte izquierda de su cuerpo, que está muy bien, el mismo abofeteándose, siendo arrastrado por su propia mano, ambos lados del cuerpo que quieren ir por diferentes sitios… pero a juzgar por el año en el que se rodó la película (1984) y que me es muy familiar esa forma de actuar, no se yo si ahora una horda de fans ciegos se me echaran encima cuando lean esto: No me extrañaría ni un pelo, que Bruce Campbell en TERRORIFICAMENTE MUERTOS, hubiera mamado todo su arsenal de gestos y todo el rollito de la manita de la actuación de Steve Martin en esta película. El rollo es idéntico. Repito, “no me extrañaría”. Pero como todas estas cosas la mayoría de las veces son fruto de la casualidad, vamos a brindarle el beneplácito de la duda al señor Campbell (¡por que es el, que si no…!) y vamos a pensar que no.
Por lo demás, muy divertida película con la que nos lo pasamos muy bien y a la que quitaría de un plumazo la presencia de la co-protagonista, Lily Tomlin, porque desde niño, y no me pregunten por qué, la tengo mucha manía.