Nunca alquilé esta película en su momento. Y no lo hice porque la caratula me horrorizaba -en el buen sentido-. Cogía la funda una y otra vez, y ese monstruo me producía escalofríos. Y no se qué opinaría hoy al respecto si la hubiese visto entonces, pero lo cierto es que no ha sido para nada un visionado complaciente.
Un tipo comienza a tener pesadillas extrañas, por eso no quiere dormir de ninguna manera, aunque siempre acabe vencido por el sueño. En una de esas pesadillas, termina levitando en presencia de sus amiguetes. En otra arde sin quemarse. Por no sé que extraño motivo, llega a la conclusión de que esas pesadillas son una llamada de algo o alguien desde la cárcel de Alcatraz, así que ni corto ni perezoso, decide irse allí con unos amigotes a entrañar el misterio. Nada más llegar comienzan las posesiones, y las chorradas de la mano de una maestra de ceremonias híbrido entre "Elvira" y "Vampira", aunque multi-operada, interpretada por Toni Basil.
Nada de nada. Una peli requetelenta, que no da miedo, en la que no hay sangre y que para colmo de mares es aburrida hasta la extenuación.
Por sacarle algo bueno, destacaré algunos momentos logrados en la ambientación (pero contadísimos, casi inexistentes) y una ridícula violación a cargo del monstruo de la portada, que fuerza sexualmente a su novia, y ahí no se expresa sentimiento alguno. Eso, al menos, me provocó alguna risilla. Pero es que la peli no vale ni para cebarse con ella de lo indiferente que te deja.
A los mandos de la podrida nave Dimitri Logothetis, con una carrera que te deja tan indiferente como su propia peli.
Pero bueno, démosle un “chance”, que el póster me sigue pareciendo aterrador.
Nada de nada. Una peli requetelenta, que no da miedo, en la que no hay sangre y que para colmo de mares es aburrida hasta la extenuación.
Por sacarle algo bueno, destacaré algunos momentos logrados en la ambientación (pero contadísimos, casi inexistentes) y una ridícula violación a cargo del monstruo de la portada, que fuerza sexualmente a su novia, y ahí no se expresa sentimiento alguno. Eso, al menos, me provocó alguna risilla. Pero es que la peli no vale ni para cebarse con ella de lo indiferente que te deja.
A los mandos de la podrida nave Dimitri Logothetis, con una carrera que te deja tan indiferente como su propia peli.
Pero bueno, démosle un “chance”, que el póster me sigue pareciendo aterrador.