Y es que, si quitamos a Stallone de sus proyectos más
míticos y/o extravagantes, este vuelve a las mierdas que nos estaba ofreciendo
antes, esos “Get Carter”, “El protector” y demás, títulos a los que ésta “Una
bala en la cabeza” se asemeja más, en formas y contenido, que a esos Rambos,
Rockys y mercenarios que le han devuelto el respeto perdido.
Poco antes, también resulto un fracaso “El ultimo desafió”,
la vuelta al cine de Schwarzenegger, con lo que una vez más queda patente que
lo que al publico interesa de los “action heros” en grupo, no interesa una
mierda por separado.
Sin embargo, entendiendo el fracaso de estas películas, no
sería justo decir que “Una Bala en la cabeza” es una mala película de Stallone.
No, el está fetén, fresco, dando hostias como panes, derramando carisma de
abuelo.
Lo justo sería decir que estamos ante una mala película de
Walter Hill, que si bien tomó el pulso al cine de acción actual con “Invicto”,
aquí parece uno más de tantos directores forjados en la televisión.
Pero tampoco sería justo decir que es una mala película.
El guión es malo, lleno de tópicos, soso, plano… pero sin
embargo lo cierto es que la película está francamente entretenida, con peleas
coreografiadas excelentemente y Stallone, volviendo a meter tatuajes en sus
anabolizado cuerpo y, por ende, en sus películas, quizás para ganarse al sector
juvenil más macarra. Es como una pequeña obsesión.
Además, la fardada que se marca la película, con ese
maravilloso combate final entre Stallone y Jason Momoa (el Conan de Nu Image)
no a base de puños desnudos, no, sino ¡a base de hachazos!.
Basada en uno de los cómics mas vendidos de todos los
tiempos, el homónimo “Una bala en la cabeza” de Wilson y Matz, la película
viene a contarnos lo mismo que el cómic: Un asesino a sueldo al que han hecho
la doce trece sus contratadores, se alía con un policía que quiere capturarlos,
mientras que el asesino pretende vengar la muerte de su compañero, matándolos a
todos.
Lo peor de la película, es sin duda, el aire de “Budy movie”
que se gasta, siendo en co- protagonista, Sung Kang (visto en macarradas como
“Fast & Furious 5” y pronto en la 6, o “Ninja Assasin”) que interpreta al
policía, totalmente hostiable. Estamos deseando que Stallone le pegue un tiro a
ese gilipollas durante toda la película.
Pero por lo demás, y siendo conscientes de lo que estamos
viendo, la película se deja ver, e incluso vibramos en algunos momentos.
Eso si, querido Stallone: con la edad que tienes, déjate de peliculitas
y vuelve con cosas más vistosas y excéntricas, que con los “Fast & Furious”
copando la taquilla, con el público joven en el bolsillo, el tuyo más juvenil
tiene ya casi cuarenta tacos y te quiere ver haciendo de Rocky.
En cuanto a Walter Hill, casi, casi, que se retire. La unión
no ha sido tan fructuosa como cabía de esperar.