lunes, 24 de noviembre de 2014

THE TAINT

“The Taint” es una película genuinamente gore – esto es, la historia al servicio de los efectos especiales y no al revés-  de corte ultra-mega-independiente (casi amateur) cuyos efectos especiales artesanales (con una gotita, casi imperceptible, de C.G.I. ) serían del todo elogiosos y la baza fuerte del film, de no ser porque la propia naturaleza de la película, que en un alarde de ambición  creativa pretende ser provocativa, políticamente  incorrecta,  artística, moderna y populachera al mismo tiempo, se vuelve en su contra y anula por completo cualquier atributo que pudiera tener. Es más, desde que comienza, se vuelve antipática.
Exceso por exceso, intención de ser lo que no se es y actitud de “si no llegamos a ser esto que pretendemos, con eso que decís que somos, ya nos viene bien” se dan cita en una película que, no obstante, está muy bien rodada y, para ser una cosa de bajísimo presupuesto, mantiene el tempo perfectamente, llegando a estar, incluso, hasta entretenida… pero tantas pretensiones en una película gore, me crispan, enfadan e indignan.
Unos científicos logran, extrayendo del interior de los cojones el líquido que hace que fluyan las erecciones,  crear una especie de suero que fortalecerá la polla de aquel que se lo inyecte. Pero la cosa sale mal, y acaba en un río que contamina a toda la población masculina, convirtiéndolos en individuos misóginos de enormes pollas eyaculadoras (de puñetera goma que canta por soleares), que revientan a las mujeres con ellas, a la par que les aplastan las cabezas con piedras, con saña y exagerada mala baba.
Por otro lado, los no infectados, ahora, que lo que conocíamos como sociedad, ya no existe, aprovechan para violar a tanta mujer como puedan antes de que las pillen los infectados. Finalmente, llega a la ciudad una especie de Hipster que, con una muchacha que anda por las inmediaciones, intentarán combatir esta plaga misógina.
Aunque sus artífices definen la película de varias maneras, en la contraportada del dvd se decantan en primer lugar por “Una experiencia intelectual”, y luego sentencian que se trata de “Una violenta y misógina película sobre violencia, misoginia y entretenimiento” (vaya unos gilipollas), y aunque –spoiler-  al final ganan los misóginos de las grandes pollas,  y no dejan ni una sola tía viva,  una película en la que los misóginos son los malos y un par de héroes luchan contra ellos ¡no puede ser jamás de los jamases una película misógina! Pero como los directores son un par de modernillos enrollados, pues, venga, vamos a decir que es una película de lo más cabrona y desagradable.
Ya digo, una película que aunque esté muy bien técnicamente en todos los sentidos, siendo semi amateur, es un claro ejemplo de que, como todo en la vida, no solo las cosas bien hechas son importantes; para mí cuentan, en según que casos, la actitud e intenciones de quienes las hacen, y estos Drew Bolduc y Dan Nelson, son un par de universitarios gilipollitas, jugando a que ser, por un lado  la versión buena de Chad Ferrin y por otra los sucesores de los “Radio Silence”. Para ser tanto una cosa, como otra,  hay que tener talento, que estos muchachos no tienen. Ahora, la peli ¿Se puede ver? Sí, está entretenida. Y hasta curiosa.
Rodada en alguno de los bosques de Richmon y con estudiantes de la universidad de Virginia como actores, se ve que a nivel amateur debió gustar por allá abajo, porque pronto el pirata de Lloyd Kaufman y su infame “Troma” apareció y se quedó la película, supongo que engañando a sus autores, que gracias a sus ansias por tenerla distribuida permitirán que el dinero que esta dé, se lo quede el señor Kaufman en sus arcas. Eso si, ellos tendrán su flamante edición en Blu-Ray. Y el colmo del esnobismo: No solo es que la hayan editado también en VHS… es que, además, si quieres puedes adquirir el VHS decorado a mano…. para matarlos, Señora mía.
En algunos certámenes en los que se pasó la peli, le quitaron la inscripción “Kill Women” al póster como condición para proyectarla.