Cuando llegó la segunda parte, no corrí. La alquilé en vídeo. Al apretar el “eject” ya me había olvidado de ella. De hecho, lo único que realmente me motivó a verla es que en un festival de cine fantástico franchute fue premiada como “lo peor del año”, y supongo que me daba morbo ver por qué. Sinceramente, no creo que “Critters 2” fuese peor que muchos otros “exploitations” de “Gremlins”… porque eso era “Critters 1”, no lo olvidemos. Surgió a rebufo de la famosa producción de Spielberg, solo que tenía más calidad y más atributos positivos que “Ghoulies”, “Munchies” o “Hobgoblins”. Siempre consideré que “Critters” era a “Gremlins” lo que “Piraña” a “Tiburón”, la “copia buena" que adquiere entidad propia… y no deja de resultar gracioso que el director de “Gremlins”, la peli expoliada, fuese Joe Dante, el mismo de “Piraña”, la peli expoliante. ¡El cazador cazado!.
Del resto de las secuelas de “Critters” no puedo decir gran cosa. Creo que intenté ver la cuarta, pero no tuve cojoncillos de superar los primeros quince minutos. En cambio sí los he tenido para reunir aquí los fotocromos de la peli original del insulso Stephen Herek, cortesía del gran Alex Gardés. Soy consciente de que, aunque no me considere ni tan siquiera simpatizante de la causa critter, hay muchos ahí fuera que sí. Y que los bichos no dejan de ser un icono menor de su época. Por ello espero que, si ustedes pertenecen a semejante club, gocen del espectáculo…