sábado, 30 de enero de 2010

CHUPACABRA TERROR

El mayor problema que tiene esta peli, y cualquiera inspirada en la leyenda del chupacabra, es que uno no puede tomarse en serio un diálogo en el que se cita un nombre tan gracioso. "¡Oh, dios mío!, ¡es el chupacabra!". ¿No suena ridículo?, sí, un poco. Pero en el film que nos ocupa ese problema tampoco es demasiado grave, porque no estamos ante una producción ambiciosa, seria y de alto standing, sino ante un producto del Syfy Channel destinado a tele por cable (y dvd) con recursos económicos y humanos algo modestos. Y para protagonizarlo, nadie más adecuado que John Rhys-Davies, el rey de las series B de monstruos/animales elefantiásicos.
"Chupacabra terror" nos cuenta la historia de un científico que logra capturar vivo al legendario monstruo. Lo mete en una caja y de ahí a un barco, rumbo a los lluesei. Como era de esperar, los currantes responsables de cargarlo se dejarán llevar por la curiosidad, lo liberarán y el bicho comenzará a papearse a todo aquel tripulante que pille.
Y esa es la grandeza de esta peli, que no hay más. Monstruo cabreado, tripulación asustada, un poco de gore por aquí, unas cuantas explosiones por allá, muchos disparos y ya tienes 80 minutos de endeble, pero funcional, entretenimiento. A destacar, gustosamente, que el chupacabra es un tio disfrazado (y con bastante gracejo), que el barco está hecho en CGI y canta más que una almeja, y que la chica de la peli es especialmente irritante, por sus limitadas dotes interpretativas y porque esas grandes tetas no compensan el careto de pánfila que gasta.
Ver, chupar y olvidar.