
Este mismo año se va a estrenar la película basada en este comic, así que antes de que lo haga quería leerme los ocho números que componen su primer (y de momento único) volumen, para ir haciéndome una idea de lo que podremos ver en la pantalla grande, y como sea tan fiel como los trailers anuncian, estaremos ante algo, como poco, entretenido y muy violento.
Mark Millar es el guionista de moda de los últimos años, "The Authority", la linea "Ultimate" de "Marvel" o "Wanted" le han granjeado un puesto entre los grandes, y con "Kick-Ass" lo revalida. Su humor negro y mala leche casan genial con los dibujos limpios de John Romita Jr., otro grande entre grandes.
"Kick-Ass" trata sobre la vida de "Dave Lizewski", el típico pringado enamorado de los comics que no se come una rosca. Si ya de por si es un perdedor, el tener que hacerse pasar por gay para poder estar junto a la chica que le gusta no hace que gane puntos, es más, el lector le tendrá hasta un poco de tirria, y es que el pobre es algo gilipollas. Cierto día, así como quien no quiere la cosa se enfunda en un traje de submarinista que compra en "Ebay", al que hace unas modificaciones. Coge dos palos al estilo "Daredevil", y se pone a patrullar las zonas cercanas a su casa. Al principio no hace más que pasearse por los tejados y azoteas, hasta que encuentra un entuerto que solucionar. La paliza que le dan lo manda al hospital, donde le tienen que colocar placas de metal en el cabeza. Pasan los meses, hace la rehabilitación necesaria y vuelve al instituto. Cree que nunca más se enfundará su traje de superhéroe, pero le puede ese instinto de luchador. Entonces ocurre lo que se llama bautismo de fuego, su primera pelea en la que gana a unos atracadores es registrada por un móvil y subida a la red. Es tal la repercusión que consigue, que en seguida aparecen nuevos superhéroes, algunos no son más que gente disfrazada que se mata al intentar volar, o simplemente lucen esas "pintas" con orgullo, pero hay dos que han venido para darle a los malos pal´pelo, "Hit-Girl" y "Big Daddy". Una niña de 10 años con una gran habilidad con las espadas y las armas de fuego, y su padre, una especie de "Batman" con pistolas. Es entonces cuando las cosas se empiezan a liar y la vida de "Kick-Ass" correrá verdadero peligro.
Mark Millar es el guionista de moda de los últimos años, "The Authority", la linea "Ultimate" de "Marvel" o "Wanted" le han granjeado un puesto entre los grandes, y con "Kick-Ass" lo revalida. Su humor negro y mala leche casan genial con los dibujos limpios de John Romita Jr., otro grande entre grandes.
"Kick-Ass" trata sobre la vida de "Dave Lizewski", el típico pringado enamorado de los comics que no se come una rosca. Si ya de por si es un perdedor, el tener que hacerse pasar por gay para poder estar junto a la chica que le gusta no hace que gane puntos, es más, el lector le tendrá hasta un poco de tirria, y es que el pobre es algo gilipollas. Cierto día, así como quien no quiere la cosa se enfunda en un traje de submarinista que compra en "Ebay", al que hace unas modificaciones. Coge dos palos al estilo "Daredevil", y se pone a patrullar las zonas cercanas a su casa. Al principio no hace más que pasearse por los tejados y azoteas, hasta que encuentra un entuerto que solucionar. La paliza que le dan lo manda al hospital, donde le tienen que colocar placas de metal en el cabeza. Pasan los meses, hace la rehabilitación necesaria y vuelve al instituto. Cree que nunca más se enfundará su traje de superhéroe, pero le puede ese instinto de luchador. Entonces ocurre lo que se llama bautismo de fuego, su primera pelea en la que gana a unos atracadores es registrada por un móvil y subida a la red. Es tal la repercusión que consigue, que en seguida aparecen nuevos superhéroes, algunos no son más que gente disfrazada que se mata al intentar volar, o simplemente lucen esas "pintas" con orgullo, pero hay dos que han venido para darle a los malos pal´pelo, "Hit-Girl" y "Big Daddy". Una niña de 10 años con una gran habilidad con las espadas y las armas de fuego, y su padre, una especie de "Batman" con pistolas. Es entonces cuando las cosas se empiezan a liar y la vida de "Kick-Ass" correrá verdadero peligro.
No contaré nada más, si queréis podéis conseguir los ocho comics ya mismo, no son difíciles de localizar y se leen muy rapidito. Que Millar ha metido el dedo en la llaga está más que claro, no se puede ser un superhéroe por mucho que los desees. Empieza muy serio y realista, pero luego acaba convirtiéndose en lo que es, un comic. No sé, a mi no me hubiese importado un final mas "verosímil" pero oye, es lo que hay. Solo espero que la película sea fiel y no hagan como con "Wanted".