martes, 9 de junio de 2009

EXTREME MOVIE

"Dimension Extreme", probablemente la mejor productora de “direct to video”, especializada en terrores varios y responsable de algunos lanzamientos decentes localizables en los videoclubes (de las américas), se atreve con una comedia.
Bien, por el titulo, yo pensaba que "Extreme" se subía al carro de esos spoof  de última hornada, con lo de "movie" pegado a la palabra previa que sea y, por tanto, iba a ver otro coñazo más. Pues no. No se dejen engañar. Pero escuchen atentamente, o mejor dicho, lean lo que a continuación voy a escribir en mayúsculas: SI JUNTAMOS TODOS LAS SPOOF MOVIES DE LOS ULTIMOS 10 AÑOS, LAS MULTIPLICAMOS X 1000 Y HACEMOS DE ESA MULTIPLICACIÓN UNA MEJORA DE TODOS SUS BUENOS MOMENTOS (QUE HAN DE SER MUCHOS) EL RESULTADO FINAL NO SERÍA NI UN CUARTO DE DIVERTIDO QUE LA MITAD DE ESTA PELÍCULA.
Ea. Hacía mucho, mucho que no disfrutaba tanto. Y menos de una cosa concebida para su explotación en dvd. Pero repito, no estamos ante un spoof, "Extreme Movie" es la mejor comedia teen desde los 80, un huracán de entretenimiento y carcajadas, con la que, contra todo pronostico, me he llevado una muy agradable sorpresa.
La película es una sucesión de scketchs, que unidos por una historia, va haciendo chufla de la sexualidad adolescente, con gags escatológicos y, sobre todo verbales, pero mucho más extremos e inteligentes que los del resto de productos de las mismas características. A todo esto, súmenle un reparto formidable a base de la creme de la creme del cine teen actual, con lo que tenemos divertidos scketchs protagonizados por Michael Cera ("Juno", "Supersalidos"), Mathew Lillard ("Scream", "Scooby Doo") o Frankie Muniz ("Gordo mentiroso") entre otros muchos.
Con momentos muy buenos que no voy a destripar, la recomiendo a todo aquel amante de la comedia disparatada y tontorrona.
Los responsables de esta maravilla son los debutantes Adam Jay Epstein y Andrew Jacobson, que ya se firmaron tiempo atrás el guion de "No es otra estúpida película americana", bastante flojilla. Ante esta gran película, lo único que puedo decir es: Farrelly Brothers, escondeos en una ermita, porque si no, Epstein y Jacobson saldrán del gueto y lo primero que harán es meteros sus lubricadas pollas por el culo.