miércoles, 24 de junio de 2009

ORGAZMO

Lo recuerdo diáfanamente, éramos un grupo de amigotes que decidimos ir a ver aquella peli rara que se había estrenado nada menos que en los cines Verdi, la capital del arte y ensayo en Barcelona. Para entonces "South Park", la creación más famosa del director de "Orgazmo", Trey Parker -junto a Matt Stone- ya comenzaba a hacerse oír, pero no mucho. Sin embargo, sabíamos que de algún modo todo ello estaba relacionado. En fin, sea como fuere, vimos la peli en versión original subtitulada y lo pasamos bomba, nos reímos hasta hartarnos. Y desde entonces, cada vez que la veo, me sigue divirtiendo de lo lindo. Desde mi modesto entender, y aunque "South Park" tiene momentos/ideas muy buenos, "Orgazmo" es la mejor creación de Parker. Le sigue de cerca "Team America"... y "Cannibal, the musical", salvo algún gag, se queda bien lejos.
Un mormón se convierte en actor de cine X por necesidades económicas (aunque para el material explícito dispone de un doble... que en un momento dado lo interpreta un negro!!!) y da vida al superhéroe-porno "Orgazmo", acompañado de su inseparable compañero Choda Boy (genial Dian Bachar). Sin embargo el tipo para el que trabaja es un mafioso con muy malas pulgas que ante el mega-éxito de la peli resultante, obliga al mormón a rodar una secuela. Las cosas se ponen tan feas que finalmente los protas deberán llevar sus personajes al terreno de la realidad con el fin de combatir a sus explotadores.
La verdad es que "Orgazmo" es bastante menos políticamente incorrecta de lo que uno podría esperar, en el fondo (igual que le ocurre a "South Park") abunda cierta moralina encubierta y todo queda en el caca-culo-pedo-pis. Pero aún así, o gracias a ello, el resultado es de lo más entretenido y simpático y va sobrado de gags francamente descojonables, como cuando los protas prueban la versión real del arma de "Orgazmo", un rayo que provoca exactamente lo que imaginas, o algunas bromas a costa del mismo cine porno. A ratos Parker (verdadero motor del film, Matt Stone queda relegado a un papel secundario, aunque inolvidable, y a ciertas tareas tras la cámara) se permite adentrarse en el terreno del "spoof" puro con connotaciones surrealistas, pero ocurre poco, prima más la comedia pura y desmadrada con algunos guiños al cine de artes marciales (esos zooms!).
Como no podía ser de otro modo, abundan los cameos de gente del porno (destaca Ron Jeremy, aunque por ahí también asoma Max Hardcore... y más que habrán, pero a mi es que el porno me la suda bastante) y también tenemos a Lloyd -Troma- Kaufman en un breve papel.
Resumiendo, cachondeo puro, ideal para combatir el aburrimiento y demás sabores amargos.