viernes, 10 de febrero de 2023

EL COLEGIO DE SATÁN

Uno de los telefilmes de terror de los 70 más queridos por el público especializado. Emitido en “Movie of the Week” de la ABC en 1973, “El colegio de Satán” es recordado en el imaginario popular estadounidense con la misma intensidad y pasión con la que se recuerda en España la emisión de “La Cabina” de Mercero. Miles de espectadores americanos se acojonaron ante sus televisores aquella noche de Sábado al tiempo que se deleitaban con el palmito de Kate Jackson, popular por ser una de “Los Ángeles de Charlie”.
Un buen día la policía se encuentra a una joven ahorcada en su casa. La hermana de esta asegura que en realidad la chica no tenía motivos para quitarse la vida, por eso, decidirá investigar por su cuenta y riesgo. De este modo, se matriculará en la misma escuela en la que estudiaba su hermana. Una vez allí, diversos sucesos la llevan a investigar más todavía, hasta descubrir que muchas de las alumnas de esa escuela y, sobre todo, un profesor, practican ritos satánicos que traerán, para todos, inesperadas consecuencias.
No dudo que en pleno 1973 esta película causara cierto impacto entre los telespectadores e incluso, puede que “El colegio de Satán” fuera una influencia para más de un cineasta contemporáneo —diría que hay bastante de ella en “La casa del diablo” de Ti West, que la mejora—, pero lo cierto es que esto, con ese ritmo denso, esa cadencia lógicamente televisiva, es un tostón de mucho cuidado. Yo definiría esta película diciendo que se trata de una historia en la que, básicamente, un grupo de jovencitas caminan de noche por el interior de un colegio. Hasta los minutos finales no pasa nada, y cuando pasa, nada de lo que sucede es para tanto.
No obstante entiendo perfectamente la buena consideración que se la tiene y detecto, con todo su coñazo intrínseco, el ejercicio de estilo que en un momento dado esta película pueda llegar a ser, pero, lo siento, esta “Satan’s School for Girls” (que es su título original) no está hecha en absoluto para mí.
David Lowell Rich, que dirige el asunto, es un experimentado realizador de telefilmes que habiendo dedicado toda una vida al medio televisivo, todavía le quedó tiempo para hacer algunos trabajos cuyo destino eran las salas cinematográficas, por ejemplo “Aeropuerto 80” o “El golfo de San Francisco”, que gozaron de cierto relumbrón.
“El colegio de Satán” le debe el título a su edición videográfica en nuestro país, aunque también se la conoce bajo el nombre con el que fue emitida en su momento en televisión que, sin duda, es mucho más sugestivo que el elegido para ilustrar esta entrada: “Escuela satánica para señoritas”.