sábado, 30 de agosto de 2008

DONDE TE ESCONDES HERMANO

He preferido utilizar el título español de este indiscutible cult-film porque, aunque el original me mola mucho, el de aquí también y, a fin de cuentas, así es como la llamaba yo en la época dorada del video-club, de cuando se la pedí al habitual que solía visitar y el muy gilipollas la había ocultado en el almacén porque la consideraba muy mala y no se alquilaba.
Supongo que no hará falta que me enrolle mucho respecto a este film, pues la gran mayoría de lectores de este blog fijo que la habéis visto... pero por si acaso... "Dónde te escondes hermano" narra la original historia de dos hermanos siameses, uno de ellos deforme (mejor mega-deforme), que son separados a la fuerza por unos médicos. Años después, irán en busca de todos ellos para vengarse ante semejante putada. Al director todos le conocéis, Frank Henenlotter (rebautizado Henenlloter en la caratula del vhs españolo), un tipo relativamente íntegro y experto en cine exploitation (sobre todo el más clásico. No olvidemos que el film comentado está dedicado a Herschell Gordon Lewis) que se ha prodigado más bien poco tras la cámara. Después de esta "Basket Case", dirigió "Brain Damage", otra historia sobre la relación entre un chaval y un monstruo, "Basket Case 2 y 3", dos bufonadas divertidas y "Frankenhooker", idem. Tras esta, y 16 años de parón, ha vuelto con "Bad Biology".
Resulta curioso que "Dónde te escondes hermano" tiene muchos paralelismos con "Posesión Infernal" y hasta con su realizador, Sam Raimi. Año aparte, ambas pelis son bastante más serias de lo que luego facturarían sus responsables (aunque la de Henenlotter tiene algún puntazo de comedia negra más obvio) e igualmente, las dos eran mucho más gozables en sus versiones en formato VHS. El lavado digital ha evidenciado más sus fallos y sus carencias. Eso no me molesta en absoluto (como que se note un huevo el tono amateur a las dos), sin embargo, sí echo de menos más grano y oscuridad. Concretamente "Basket Case" está ambientada en escenarios muy degradados y barriobajeros (la consulta del médico es especialmente insana), y verla con tal claridad (en su versión DVD) le resta sordidez y la hace un pelo más sintética y artificial.
Chorradas aparte, la verdad es que "Dónde te escondes hermano" es una pequeña joya de lo más disfrutable, su historia te atrapa y sus puntazos mega-cutres (todo lo relacionado con el hermano monstruoso, Belial, que es increíblemente chungo... mola cuando se le ve en plano general y los dedos ni se mueven) le confieren un encanto muy especial.
Por cierto, su simpático protagonista, Kevin Van Hentenryck, cuando no se dedica a hacer cameos en las pelis de Henenlotter, o actuar en las producidas por fans, esculpe, madera y piedra para ser más exactos... y no lo hace mal, en los circuitos especializados se le respeta mucho y se habla de su carrera paralela en caspas de terror con franca curiosidad.