jueves, 12 de noviembre de 2009

DEMENCIAL (UNHINGED)

"Demencial" / "Unhinged" es un oscuro slasher rodado muy a lo independiente por habitantes de Portland, Oregon, a inicios de los 80. Se hizo "famoso" por entrar a formar parte de la lista de pelis prohibidas en las Inglaterras cuando a estos les entró la fiebre censora con respecto al horror, pero como ocurre con muchos films de esa dichosa lista, no es ni tan fuerte ni tan violento como se supone.
Meter a "Unhinged" en el cine de acuchillamientos es quedarse mas bien corto. Es cierto que tiene mucho de ello, pero también bebe bastante de los melodramas de terror gótico con su caserón envuelto en secretos, habitado por señoras estancadas en el pasado, noches repletas de relámpagos, ojos espiando a través de agujeros en la pared, respiraciones inquietantes en plena madrugada... etc. En general, la peli destila una lograda atmósfera que ayuda a que en ocasiones su visionado resulte inquietante.
Tres amigas pillan el coche y se largan a un concierto en plena naturaleza. A medio camino tienen un accidente y son rescatadas por los habitantes de una lóbrega y apartada mansión, gente de lo más extraña y que parece haberse quedado anclada en los años 30 o 40, una mujer mayor en silla de ruedas que odia a los hombres, su fea y reprimida hija y... y... mejor la véis. Ni que decir que las mozas comenzarán a ser asesinadas por una figura misteriosa, aunque si recordamos que son solo tres, y una está destinada a llevarse el rol de "Final girl", ya os podéis imaginar que de asesinatos va escasa la cosa (y sí, son generosos en cuanto a líquido rojo, pero no más cruentos que los de "El Mutilador", por ejemplo).
Vale, reconozco que "Unhinged" a ratos se hace pesadica por su ritmo cruelmente relajado, pero al no ser el típico esquema de los jóvenes idiotas perseguidos por un único psycho-killer y aportar algo más de historia, la espera entre crimen y crimen resulta un poco menos chapa de lo habitual (a ver, el aburrimiento es algo inevitable en todo slasher que se precie, ¡eso lo tenemos todos clarísimo!). A sus méritos hay que añadir un "giro final" bastante majo.
Otro aspecto muy llamativo de esta peli es la banda sonora, de lo más extraña y efectiva. Se hace raro y curioso escuchar un par de temas que también suenan en "Creepshow", lo que incrementa el rumor de que parte de la patitura del afamado film de Romero era música de archivo.
No es ninguna maravilla... pero tiene mucho encanto y, si te va el rollo y tienes paciencia, se puede disfrutar perfectamente.