Brasil es un país con gran tradición en cine de terror, por eso a poco que indaguemos, veremos que se hacen muchas pelis de miedo por allí… Aunque sea a un nivel prácticamente amateur, como en este caso (cosa que por otro lado está muy bien).Tiago Belotti, es un fan del cine de horror, que con una producción muy limitada y con más ganas que medios, se saca de la manga la enésima revisión del Zombie de Romero (donde hay guiños más que palpables a las dos ultimas entregas de la saga) en un largo, muy bien acabado, pero que cae en la misma trampa que la mayoría de largos amateur, que no tiene argumento. La película se limita a hilar una serie de diálogos con una sucesión de ataques zombis, que aportan ya muy poquito al de por sí trillado género. Intenta montar la película de una manera dinámica, para no caer en el tan peligroso terreno del “no dominio del tempo”, pero como daño colateral, lo que consigue es un ritmo de lo más gratuito y molesto… aunque es maravilloso el ver como anda sobrado de planos en unos momentos y luego ver que el plano secuencia es el que manda en la función ¡Porque esa es la esencia del amateurismo, señores!
En el tema “entretenimiento”, la peli anda mas bien coja… vamos que aburre a las ostras, pero lo compensa con las buenas (y bien hechas) dosis de gore con la que se nos regala la vista de vez en cuando.
Con todas sus carencias y con todos sus aciertos (y por la seriedad que a fin de cuentas desprende el producto) la peli me cae simpática y le damos un aprobadillo, que además el tal Tiago es un fan del género… Y no es un Julián Lara.
Por cierto, José Mojica Marins tiene un fugaz cameo, en el que a poco que te gires para rascarte las pelotas, ni te percatas de que ha salido en la peli… y eso que tiene hasta frase; exactamente dice: “Brasil será la capital de los muertos”.
