De todas las copias y plagios surgidos a raíz de EL EXORCISTA, me quedo sin lugar a dudas, con la aportación de Amando de Ossorio, primero por ser un director conocedor del género. Eso ya hace que de entrada, la película me caiga simpática, y segundo, porque aunque se aprovecha del filón, y directamente copia elementos reconocibles en EL EXORCISTA (Gapos verdes, girar partes del cuerpo que normalmente no pueden hacerlo o arrastrarse de manera desagradable, amen de estar la niña protagonista, interpretada por Marian Salgado, que es la dobladora española de la Regan de la película de Friedkin), si que cuenta con una entidad propia (no mucha), en el sentido de que, al menos, no es Satanás quien se mete dentro del cuerpo de la muchacha, si no una gitana mas mala que un dolor. Y la osadía de incluir una historia de desamor entre el cura protagonista (en su juventud) y una jovencita de buena familia, que acaba en el propáculo, ya dotan a la película de mas calidad, al menos argumental, que la más popular EXORCISMO.
Tras ser detenida, una vieja gitana que se dedica a hacer ritos Satánicos y a sacrificar bebés, se suicida, tras ser amenazada por el comisario, que le dice que le va a administrar un medicamento que le hará decir toda la verdad acerca del caso en el que está implicada.
Tras morir, y dejar a la policía en ascuas, el espíritu de la gitana, saldrá de su cuerpo, para, literalmente, irse andando hasta el cuerpo de una niña e instalarse allí. Un joven cura, el padre de la niña, un teólogo y la policía, le darán sal al mejunje, mientras la niña protagoniza episodios terroríficos y desagradables.
Pues si, la verdad es que es una película altamente entretenida, quizás menos sanguinaria de lo que nos hubiera gustado, pero con los suficientes elementos, risibles o no, como para pasar un rato bueno, que ya es mucho.
Curioso maquillaje, que logra poner el mismo rostro, aterrador por un lado, e involuntariamente descacharrante por otro, en una Kali Hansa adulta, que en una Marian Salgado menor. No hay diferencia… las dos actrices tienen la misma cara, supongo que, también, porque buscaron actrices muy parecidas, que una vez maquilladas parecieran la misma persona.
En el cast, tenemos al inevitable Fernando Sancho (LA LEY DEL KARATE EN EL OESTE, EL PANTANO DE LOS CUERVOS, Y AL TERCER AÑO RESUCITÓ), que parece que en todas las películas de terror en las que aparece, hace el mismo papel, el de policía malcarado y “malaleche”, tenemos a Maria Kosty (LA REBELIÓN DE LAS MUERTAS y la ya mentada EXORCISMO) y a Julia Saly (La pocha), al igual que Kosty, habitual de Paul Naschy, también en EXORCISMO, o en cosas como OPERACION MANTIS, EL ULTIMO KAMIKAZE, EL RETORNO DEL HOMBRE LOBO o MADRID AL DESNUDO. Siempre al lado de Paul Naschy, como si fueran un matrimonio.
En definitiva, correcta película, bien rodada, bien de ritmo, quizás más graciosa que terrorífica, pero en suma, muy, muy disfrutable.