viernes, 29 de noviembre de 2013

PSICOSIS II, EL REGRESO DE NORMAN

Me resulta curioso que  para según que sagas, la primera de sus películas acaba siendo un lastre, simplemente porque estas vienen precedidas de un prestigio fuera de precedentes. Una saga como esta de “Psicosis”, con una segunda y tercera partes magistrales (bueno, quizás la tercera no tanto), son un claro ejemplo de ello. Son películas ninguneadas, simplemente porque la primera de ellas es un clásico intocable de Alfred Hitchcock.
No gustándome el cine clásico en general, y si gustándome ese primer “Psicosis” en particular, he de decir que me gustan infinitamente más las secuelas (a excepción de “Psicosis IV” que es un telefilm de lo más chungo). Ahora pueden cargar sus armas, que recibiré las balas, eso si, cubriéndome con un escudo de adamamtiun.
Yo entiendo la importancia del primer “Psicosis”, entiendo que es un precedente a la hora de tratar el terror tal y como es hoy y todo eso, pero que quieren que les diga, me quedo con “Psicosis II, El regreso de Norman”.
Lo mejor de todo, es que hacía mogollón de años que no me sentaba frente a esta película, y en este reciente visionado me he dado cuenta de lo jodidamente buena que es esta secuela.
22 años después del estreno del primer “Psicosis”, Robert Bloch, autor de la novela en la que se inspira “Psicosis”, decide escribirse la secuela de su libro y ponerlo a la venta en las librerías, para así los gerifaltes de universal tener un material en el que poder basar su secuela.
En la novela, Bates 22 años después de los hechos narrados en la primera parte, se escapa del hospital psiquiátrico huyendo a Hollywood, dónde se estaba rodando un biopic de su persona. A los productores, este argumento les pareció una mierda, así que decidieron crear el argumento de “Psicosis II, el regreso de Norman” desde cero, pasándose la novela por los cojones, y haciendo una cosa un tanto más cinematográfica, pero del todo descabellada.
La película cuenta como tras esos 22 años de encierro psiquiátrico, Norman Bates sale en libertad ya que el juez considera que está curado de su trastorno mental, por lo que las iras de la fiscal Loomis (en referencia a una de las víctimas de Norman en el primer “Psicosis”) se volcarán en la persona de Norman hasta limites insospechados. Una vez en libertad, Norman regresa al motel de su propiedad, y empezará a trabajar en un restaurante adscrito a un programa de inserción de enfermos mentales. Allí conocerá a una jovencita que traerá al  hombre por el camino de la amargura.
En su casa, le asaltarán los recuerdos y una serie de asesinatos hacen pensar que Norman ha vuelto a enloquecer… aunque unos cuantos giros harán que creamos otras cosas durante el desarrollo de la peli.
“Psicosis II, el regreso de Norman”, comienza como una absoluta mamarrachada – nadie se cree que a un enfermo mental, a un asesino en serie, se le deje suelto y se le devuelva al lugar donde años atrás las lió pardas- para  que poco a poco la trama vaya cobrando vida, y se vuelve tan interesante, que es imposible desviar la atención de la película ni un solo instante. Todo lo que sucede es un misterio, que además, los diversos giros argumentales, volverán aún más misterioso.
A eso hay que añadirle una cuidadísima dirección  de Richard Franklin en la que predominan los movimientos de cámara (hay una secuencia en la que estando la cámara dentro de la habitación de Norman, y a modo de transición, esta, sale por la ventana, avanza por el tejado y baja por la pared, para mostrarnos como unos jóvenes se cuelan en el sótano de la casa, que  me parece totalmente magistral), los planos picados hasta el extremo, y unos potentes efectos especiales obra de Greg. C. Jensen (suyos son también los de “La Masa, un hombre increible”, “Los Goonies” o “Golpe en la pequeña China”) que dejan al espectador, cuando menos, sorprendido.
El guión es obra de Tom Holland, a posteriori director del “Noche de miedo” original y de “Muñeco diabólico” y en el reparto, además de a Tony Perkins, tenemos a una guapísima (casi tanto como su hermana Jennifer) Meg Tilly ( “Fama”, “The Two Jackes”), Vera Miles que ya aparecía en el primer “Psicosis” en un papel de importancia y a Robert Logia (“Big”, “Sangre fresca”).
Por su lado, Richard Franklin, es popular por rodar películas como “Patrick” al que le salió una secuela italiana, “Juego Secreto”a rebufo de “Juegos de Guerra” o “FX2: Ilusiones Mortales”, secuela  de “FX: Efectos  Mortales”.
Como curiosidad, decir que un par de años de que se estrenase la película, se estrenó de modo fraudulento un “Psicosis 2” que nada tenia que ver con la franquicia protagonizada por Norman Bates, se trataba en realidad del “Slasher” “Night School”, que cayó en las manos de un distribuidor, que viendo que a José Frade le salía bien lo de las secuelas bastardas, lo intentó con esta, teniendo en cuenta que el tipo con casco de moto que acuchilla aquí a las jovencitas, muy poquito tenía que ver con aquello tan famoso de Hitchcock de los años sesenta. Les dejamos la caratula del VHS al terminar la parrafada.
“Psicosis II”, la oficial,  ha envejecido muy, muy bien, y no recuerdo pasarlo tan bien viendo una película en mucho tiempo.
Probaremos ahora con el resto de secuelas.