Psicodelia, cosquillas, plumas ¿risas? Pues no. Tony Sinclair, al que conocí por una reseña de aquí mismo, es el director de este engendro titulado Alice in Tickleland, que no cuenta nada, no dice nada y no aporta nada.Primera escena, Alice esta en la fiesta de no-cumpleaños del sombrerero loco, este la ata con cuerdas al estilo "bondage" y la lanza contra la mesa. Allí encima la empieza a toquetear y hacer cosquillas. Coge un plumero y se lo restriega por todo el cuerpo. Alice no puede parar de reír, el espectador no puede creer lo que está viendo.
Segunda escena, llega otra chica y también es atada, siguen las cosquillas y los plumeros. Avanzamos mediante cámara rápida, donde atisbamos a un señor disfrazado de conejo haciéndole cosquillas a Alice.
Tercera escena, el sombrerero loco le lleva a la Reina de Corazones a Alice para que la torturen juntos a base de toqueteos insulsos y plumeros del polvo.
En un momento dado, la película termina y ni te enteras de que ha ocurrido.
Mientras escribo esto acaba de terminar de descargarse "Count Tickula", también del mencionado Sinclair y del mismo genero plumífero que la reseñada. En este caso parece un corto, ya que dura 9 minutos. Un personaje disfrazado de Drácula hace cosquillas a una damisela en cueros. Es decir, más de lo mismo. Pero hay dos notas a favor de "Count Tickula", dura mucho menos y se ve un parrus completo, algo es algo.
Solo para curiosos y, obvio, fetichistas de la pluma.