A José Antonio de la Loma, no solo le unía al “Vaquilla” el cine y su obsesión por los delincuentes, si no que además, durante muchos años, fue el contable de este. El director, llegó a confesar en su momento que “Al Vaquilla lo quiero como a un hijo”.
Por eso, la última película de De la Loma, como no podía ser de otra manera, está otra vez inspirada en las desventuras del “Vaquilla”.
Dándole las dosis justas de ficción y cambiando los nombres de los personajes ( Aquí el Vaquilla, pasa a llamarse “El Gato”... y que dicho sea de paso, al estar interpretado por un actor profesional, Joan Bentallé, le da a este un aspecto mucho mas aseado, que no cuela...) TRES DIAS DE LIBERTAD, nos cuenta, precisamente eso, los tres días de permiso que le dan al preso en cuestión y como le hacen la vida imposible entre unos y otros, para que se eche de nuevo a la mala vida y en vez de volver a la cárcel el día requerido, se fugue a Francia, para que así si le pillan, le incremente la condena.
En esta peli, no hay nada de acción, no se ven apenas delitos y si mucho paliqueo de lo mas tonto e insustancial, amén de una jamerga a la que “El Gato” se beneficia y que tiene dos tetas como dos balones de playa, los cuales pasea desnudos cada dos por tres durante toda la película. Y eso es lo que mas interés tiene de la película, porque la verdad, es que esto no viene a cuento. Aunque me la comí enterita...
Y es que ¿cómo se le ocurre a De la Loma volver al subgénero que le dio la fama, en una década en la que lo que petaba eran las pelis de Álvaro Fernández Armero? ¿Cómo se le ocurre hacer la película con actores y no con delincuentes reales como había hecho hasta ahora?
Total, que la última película de José Antonio de la Loma, totalmente fuera de lugar en 1996, se estrenó únicamente en dos o tres salas de Barcelona, no duró mas de una semana en cartel y no recaudó mas de quince millones de pesetas. Lo que no está mal, si tenemos en cuenta que la peli española que menos ha recaudado, recaudó 13.000 pesetas. Pero no recuerdo el nombre de esta.Solo para completitas de las pelis de maleantes, porque es una autentica rareza... pero es muy mala.
Por eso, la última película de De la Loma, como no podía ser de otra manera, está otra vez inspirada en las desventuras del “Vaquilla”.
Dándole las dosis justas de ficción y cambiando los nombres de los personajes ( Aquí el Vaquilla, pasa a llamarse “El Gato”... y que dicho sea de paso, al estar interpretado por un actor profesional, Joan Bentallé, le da a este un aspecto mucho mas aseado, que no cuela...) TRES DIAS DE LIBERTAD, nos cuenta, precisamente eso, los tres días de permiso que le dan al preso en cuestión y como le hacen la vida imposible entre unos y otros, para que se eche de nuevo a la mala vida y en vez de volver a la cárcel el día requerido, se fugue a Francia, para que así si le pillan, le incremente la condena.
En esta peli, no hay nada de acción, no se ven apenas delitos y si mucho paliqueo de lo mas tonto e insustancial, amén de una jamerga a la que “El Gato” se beneficia y que tiene dos tetas como dos balones de playa, los cuales pasea desnudos cada dos por tres durante toda la película. Y eso es lo que mas interés tiene de la película, porque la verdad, es que esto no viene a cuento. Aunque me la comí enterita...
Y es que ¿cómo se le ocurre a De la Loma volver al subgénero que le dio la fama, en una década en la que lo que petaba eran las pelis de Álvaro Fernández Armero? ¿Cómo se le ocurre hacer la película con actores y no con delincuentes reales como había hecho hasta ahora?
Total, que la última película de José Antonio de la Loma, totalmente fuera de lugar en 1996, se estrenó únicamente en dos o tres salas de Barcelona, no duró mas de una semana en cartel y no recaudó mas de quince millones de pesetas. Lo que no está mal, si tenemos en cuenta que la peli española que menos ha recaudado, recaudó 13.000 pesetas. Pero no recuerdo el nombre de esta.Solo para completitas de las pelis de maleantes, porque es una autentica rareza... pero es muy mala.