martes, 15 de junio de 2010

STAN HELSING

Por mucho productor ejecutivo de "Scary Movie" que se meta en este embolao, y por mucho Leslie Nielsen que haga un cameo, no estamos ante un “spoof” genuino, ni ante una película del todo paródica. Estaría mas en la onda de pelis como "My name is Bruce". ¿Y saben qué? Con tanto “spoof” malo que se hace últimamente, casi lo prefiero.
Un dependiente de un video-club llamado Stan, tiene que irse a su fiesta de Halloween pero, antes, debe entregar unos dvd´s a la madre de su jefe, si no lo va a despedir. Camino de la fiesta, en el coche de sus amigos, decide hacer un desvío para entregar los dvd´s, con tan mala suerte que acaban perdidos en un extraño pueblo asediado por monstruos y allí descubre que es un descendiente de Van Helsing y el destino le ha puesto allí para acabar con estos monstruos. Y lo hará de la manera más absurda.
Video-clubera, mala como ella sola, de puro absurda acaba cayendo hasta simpática, gracias, como no, a los monstruos a los que Stan Helsing debe enfrentarse. Estos no son otros que unas replicas customizadas, pero muy fieles a los originales de criaturas del cine moderno. Si entendemos como monstruos clásicos al hombre lobo, Drácula, la momia o Frankenstein, entendemos como sus réplicas actuales a Jason, Freddy, Michael Myers, Leatherface, Pinhead y Chucky… Y ahí están, no todo el tiempo que nos gustaría, pero cuando lo hacen, es lo mejor de la peli. Eso si, de vergüenza ajena el numerito que se marcan a lo "Village People" cantando el "Y.M.C.A", cambiando la letra por otra de temática mas “slasher”.
¿Los chistes? Malos. ¿La trama? Tonta y absurda. ¿Y entonces, donde radica la gracia del engendro? En que se trata de un homenaje a los monstruos modernos y al video-club en particular, y eso a los fans, nos toca la fibra. No llega ni a entretenida, pero la vemos con agrado.
Después de meter el cuezo en algunos productos de terror en las labores de producción, Bo Zenga, debuta en la dirección con esto.
Y si, Leslie Nielsen hace uno de los mejores papeles de su carrera, motivo por el cual también merece el esfuerzo de consumirla.