domingo, 22 de agosto de 2010

MI TEORIA EXPENDABLE

A raíz del estreno de "The Expendables"/"Los mercenarios", no he parado de oir/leer lo muy mucho molona que es, lo muy mucho ochentera que es y, en general, todo de críticas entusiastas, exageradas y algo desmedidas. Bien, yo no estoy muy de acuerdo con todo ello. Veamos, que la peli es entretenida y entrañable, no se lo discuto a nadie. Lo es. La secuencia del trio maravillas (Stallone, Schwarzenegger, Willis) es antológica, inolvidable y solo ella merece el precio de la entrada. Y que el film intenta recuperar un estilo de cine de acción que ya no se lleva, tampoco se lo discuto a nadie... eso si, que lo consiga o lo haga bien, ya es otro cantar.
Personalmente opino que "Rocky 6" y "Rambo 4" (es decir, "Rocky Balboa" y "John Rambo") son mucho mejores películas, mucho más arriesgadas (el mega-drama de la primera y la ultra-violencia de la segunda) y, curioso esto, mucho más personales para su actor/director, Sylvester Stallone. Está claro que en esos tiempos la carrera de Stallone estaba prácticamente acabada, y el tipo ya no tenía mucho que perder. De ahí que lo diera todo en estos films y no pensara tanto en sus resultados ya que, esencialmente, pintaban que iban a ser dos testamentos. Por ese motivo van destinadas a un público más adulto (o que vivió el auge de ambos personajes en directo y siendo un impresionable adolescente, como yo), y la prueba la tenéis en "Rambo 4" y su explosión de violencia, gore y barbaridades. Los mismos productores aseguran que apostar por esa línea les había hecho perder público potencial, y que para "The Expendables", por entonces en plena pre-producción, no iban a tirar por derroteros tan sangrientos, tan oscuros, tan duros y tan poco humorísticos. Es decir, tras el inesperado exitazo de "Rambo 4", se enfocó la que iba a ser la nueva peli de Stallone con otras intenciones, ganarse al mayor número posible de espectadores, sobre todo más jóvenes (de ahí las incursiones de Jason Statham y Jet Li), invertir más y arriesgar menos.
Stallone en ese aspecto no les ha fallado, ha hecho un film totalmente parido para ser disfrutado por el público, ha suavizado la violencia (comparada con la de "Rambo 4"), ha metido mucho más humor, mucha más autoparodia y ha ido a por todas, dejando la personalidad en la puerta y sin aportar gota de malrollismo y oscuridad a su trillada historia.
En ese sentido, "John Rambo" me parece mucho más fiel al supuesto espíritu que se reivindica en "The Expendables". Al no hacerlo de modo intencionado, ni pretender contentar a todo el público, Stallone logró ser más honesto en esa propuesta que en la que ahora triunfa en taquilla. Da la casualidad que los que más disfrutan y más flipan con el supuesto espíritu "old school"/"vieja escuela" de "The Expendables" son los veinteañeros que todo ese cine lo han mitificado a base de video-club... pero los que estuvimos allí en directo, los que vimos en el cine "Rambo", "Commando", "La jungla de cristal" o, yo que sé, "Delta Force" sabemos que en realidad "The Expendables" es un espejismo... un bonito espejismo, un merecido, muy merecido, homenaje a todo aquello, un cine que en su momento fue despreciado por la crítica y hoy, curioso, parece incluso molar. Sin embargo, y por mucho que lo intente, la última de Stallone es a las pelis de acción de los 80 lo que la "Freeway Cola" a la "Coca Cola".