Dicen que las serpientes, sobre todo aumentadas de tamaño, son un gancho muy efectivo a la hora de vender pelis de segunda o tercera división, motivo por el cual muchas de ellas las integran en su trama, supongo que por esa misma razón "Sand Serpents" se titula así, "Serpientes de arena". Sin embargo, en realidad se hacen un flaco favor a si mismos, ¿por qué?, porque los bichos de esta peli no son para nada serpientes, sino gusanos, y enormes, algo mucho más atractivo (aunque solo sea por estar menos explotados) y, hasta cierto punto, más original... eso si, recuerdan -y mucho- a "Temblores".
Unos soldados americanos se encuentran dando tiros en pleno conflicto de Afghanistan. En eso que son capturados por Talibanes y, cuando parece que estos los van a ejecutar, aparece un bicho que se los come a todos. Libres de nuevo, los yankees se verán obligados no solo a defenderse del enemigo, también esquivar las voraces fauces de los mentados gusanos de arena, que son unos cuantos.
Y como en "Temblores", estos monstruos no tienen ojos y se guían por las vibraciones. De hecho, es una bomba lo que los despierta, y si quieres librarte de ellos, mejor camina de puntillas y no berrees (como hicieron Kevin Bacon, Fred Ward y sus amigos).
Su primera aparición está lograda, atacando a un helicóptero en pleno vuelo cuando menos te lo esperas (eso si no has visto el trailer previamente) y la peli... perdón, el telefilm -inevitable producto directo a las arcas del Syfy Channel- no está demasiado mal. Bien realizado, con efectos especiales bastante potables y entretenido a su manera, "Sand Serpents" se puede ver sin mayores complicaciones, pasar un ratillo tontuno para luego volver a nuestras odiadas obligaciones sociales, algo de lo que el "Alicia en el país de las maravillas" de Tim Burton no puede presumir.